Capítulo 30

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  "Ustedes están medio locas."

Su móvil estaba allí completamente roto, fui a su habitación y había una maleta hecha pero con la ropa tirada por doquier como si lo hubieran abierto y sacado y lanzado al rededor, el pasaporte de Hanna también estaba allí, viendo todo en ese estado solo podía pensar lo peor.

Era mi culpa... Era mi culpa.
Notas se había enojado conmigo y le había hecho algo a Hanna, pero... Notas está en la prisión, ¿O no?

Buscaba desesperadamente una nota, o lo que sea con instrucciones, una advertencia o lo que fuera, pero en su lugar encontré un boleto de avión a nombre de Hanna.
Seguí buscando al rededor con ayuda de Daniel pero no encontramos nada que nos ayudara a saber dónde estaba o quien había sido.

—Tal vez tuvo una fuerte discusión.

—¿Crees que esto luce como una discusión?

—Tal vez. Hay gente muy agresiva.

—Iré a preguntarle a los vecinos. —Dije queriendo evitar la conversación. Es un buen chico pero de todo lo que dice la mitad no tiene sentido.

—Ya intenté, pero cuando mencioné a la rubia el señor me dijo que si era uno de sus clientes la buscara en otro lado y luego me tiró la puerta en la cara.
Creo que no se me da muy bien con los hombres adultos.

—No puede ser que haya sucedido todo esto y nadie se haya dado cuenta, alguien debió escuchar algo. —Dije empezando a sollozar, pero entonces pensé en quién podría ayudarme.
—Daniel, préstame tu móvil.

—Está en el auto, ya vuelvo. —Dijo saliendo a buscarlo.
—Toma. —Dijo al regresar.

—¿Quien habla? —Escuché al otro lado de la línea.

—Toby, soy yo, Greta.

—¿Qué pasa? ¿Por qué me llamas de otro número?

—Tienes que venir a casa de Hanna, es urgente.

—Greta, ¿Estás segura? No quiero más problemas con Hanna.

—Hanna está desaparecida.

—No bromees, no es gracioso. Sí están haciéndome una broma dile que no es gracioso, no puedo creer que caigas tan bajo.

—Tobías, ¿Por qué bromearía con algo así?

—No lo sé, ustedes están medio locas.

—Maldición Toby, no hay mucho tiempo. ¡Estoy aquí y todo está tirado hecho un desastre, no sé dónde está y tengo mucho miedo!

—Voy en camino. —Dijo y colgó.

Apenas y tardó en venir, no quiero ni imaginar lo rápido que debió conducir.

—¿Y este qué? —Dijo mirando a Daniel al entrar.

—Soy Daniel. —Dijo tendiéndole la mano pero Tobías le ignoro por completo y caminó hasta mi, haciendo ver con quien estaba hablando.

—No te pongas idiota, es el novio de June, ella no pudo venir, está castigada...

—Perdón, estoy algo estresado. —Dijo dándole nuevamente una mirada a Daniel y este hizo un ademán restándole importancia.
—¿Qué es este desastre?

Niña Grande.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora