Capítulo 21 en problemas.

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Yami

—MARIK ¡QUE TE PASA!

—QUIERO QUE ME EXPLIQUES QUE QUIERES CON TN. –me soltó a la vez que me empujaba.

— ¿de qué hablas? –dije mientras me acomodaba la corbata.

—NO ME QUIERAS VER LA CARA DE ESTÚPIDO, sé que te llevaste a Tn a tu mansión.

«¿Cómo sabía eso?»

—y si te vas a preguntar cómo lo supe es muy fácil, no confío EN NADIE y alguien de mi equipo se quedó vigilando cerca de aquí y me dijeron que te la llevaste ¿qué te traes con mi chica?

—Tn no es tu Chica.

—ya fue mi novia que no se te olvide.

—sí, fue tu novia cuando tú eras "bueno" ella ya no te ama.

—entonces ¿a quién ama? A ti, no me hagas reír.

—sí, me ama a mí, ya la hice mía.

—¡¡MALDITO!!

Me iba a golpear pero rápidamente saque mi pistola.

—no te muevas O JURO QUE ¡TE MATO!

—no te conviene matarme, Tn jamás te perdonaría que mataras alguien.

— a mí no me vas a chantajear, eso no funciona conmigo, además Tn no te ama ella me ama a mí.

—seguro tú la violaste.

—no tuve que hacerlo, ella lo quiso, no te mereces a una chica como ella.

—jaja ¿y tú sí? Acéptalo yami ambos somos criminales, secuestramos gente pasamos drogas este negocio nos ha dejado millones y gracias a eso vivimos como reyes, yo ya me retire y puedo hacer mi vida con ella y con todo el dinero que acumule en estos años en cambio tu no, la policía te busca a la primera que salgas a un parque te atrapan y vas a la cárcel al menos treinta años.

«Las palabras de Marik resonaron en mi cabeza y aunque quisiera negarlo él tenía razón ¿qué podía ofrecerle a Tn? ¿Una vida a escondidas?»

—bien. –deje a apuntarle y guarde la pistola.

— ¿por qué no trajiste a Tn contigo?

—... eso no te incumbe ahora la mando a traer.

Presione el botón de mi auricular y Juan llegó enseguida.

—sí señor que se le ofrece.

—quiero que vayas a mi mansión por la chica.

—como usted ordene.

—esto no te lo perdonaré yami ahora entiendo porque no me cobraste por tenerla aquí la viste y te gusto.

—ella ya había estado aquí antes.

— ¿cómo dices? Explícate.

—al inepto que antes tenía de mano derecha confundió a Tn con otra chica y por eso la tuve aquí, después la deje ir advirtiéndola de que si decía algo lo pagaría.

—oh claro y no me digas que no quisiste "jugar" con ella, te conozco muy bien y sé que eres un mujeriego.

—no te voy a negar que si quise obligarla pero después ella sólita me busco y fue cuando la hice mía.

—NO TE CREO, ELLA NUNCA HARÍA ESO.

—puedes preguntarle, y sabes que retírate, te avisaré cuando llegue Tn.

(Yami y tú) Enamorada de mi secuestradorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora