Wasting Love

Capítulo 33. "Ese nombre..."

-Esta es una larga historia... si no se las cuento toda no comprenderán nada...Además de todo merecen y necesitan saberla...-Dijo aguantándose las lágrimas, los demás nos colocamos alrededor de ella y la escuchamos con atención, así ella comenzó a narrarnos todo...

***FlashBack***

Yo era una simple campesina de una familia de clase baja, vivíamos muy cerca de Londres, pero eso no importaba, la zona rural siempre fue toda mi infancia, mi familia se encargaba del arado y la ganadería, ese siempre había sido nuestro trabajo en la granja, de pronto un día llegó, acababa de cumplir los quince años, en ese momento me adentré al bosque, sabía que había algo más allá aunque mis padres siempre le habían temido a lo que existía más allá de nuestra humilde granja, después de escuchar tantas historias, tantos relatos de magia negra, brujas y maldiciones, la tentación, el morbo me llamaba, aunque muy dentro de mi sabía que no era verdad algo me jalaba, caminé y caminé pero parecía que nada era real, así que decidí regresar y dejar todas esas fantasías en el olvido, pero de pronto una mujer de unos 70 años me pidió ayuda, ésta estaba en el suelo, llevaba varios libros y estos yacían en el suelo junto a ella, de inmediato la ayudé a levantarse y a recoger sus libros

-No debería estar por aquí señora, es muy peligroso –Dije tratando de sonar madura

-No es peligroso en lo absoluto, es más peligroso vivir donde los demás, tantos pecados son cometidos entre todas las personas... aquí solo hay paz y una gran energía de positividad gracias a la naturaleza que nos rodea –Solo afirmé y me alejé

-Pero no me iría mal un poco de ayuda, mi cabaña no está muy lejos, y ya estoy muy vieja, seguro volveré a tropezar con algunas rocas – Solo suspiré y me acerqué a ayudarle con aquellos pesados libros , después de unos minutos por fin llegamos a aquella cabaña, no había nada en particular, solo muchos libros y cosas rústicas, a lo que no me llamó la atención nada, ella me miró y me ofreció un poco de leche fresca y pan, algo me hizo aceptar de inmediato, me senté en la mesa y comencé a ojear aquellos libros, estaban en otro idioma a lo que no les presté más atención, de pronto unas jóvenes aparecieron, sus edades iban entre los 17 a 25 años a simple vista, ellas eran muy simpáticas, pronto aquella anciana llegó y a todas nos dio leche y pan

-¿Quién es ella Rosalie? –Preguntó una de ellas

-Ella es Ann – Dijo la anciana, de inmediato comencé a sentir que algo no estaba bien, no entendía como era que sabía mi nombre, me bebí rápidamente la leche y me apresuré a la puerta

-Tranquila Ann, Rosalie es adivina, ella lo sabe todo –Dijo una de las jóvenes, eso me alteró aún más ya que mis padres me habían hablado de esas personas, ellos solo decían lo que el diablo les ordenaba que dijeran, una confusión y un miedo terrible me envolvió, de pronto caí como un costal de papas al suelo, mis ojos se cerraron y nada más ocurrió, desperté entre la confusión, estaba en mi hogar, de pronto mi madre me despertó, la abracé fuertemente, ella hizo igual.

-Debemos hablar de algo Ann – Dijo ella mientras se sentaba en la cama

-No tenemos más gallinas, los demás animales están muertos, las vacas y las cabras dejaron de dar leche, tu padre cree que estas están enfermas, sin esa producción nuestra vida se va a deteriorar, creemos que como eres la mayor lo mejor sería que trabajaras en el arado con una familia bien acomodada, ellos te darán todo lo que necesites, más de lo que nosotros nunca te pudimos ni te hubiéramos podido dar, esto es lo mejor para ti y para nosotros –Lo acepté y abracé con todas mis fuerzas a mi madre y a mis dos hermanos pequeños al igual que a mi padre, un carruaje esperaba afuera, de éste salió un hombre con ropas extravagantes y una mujer joven con muchas joyas y un gran vestido decorado, me acerqué a ellos, mis padres me entregaron

-Él es el Conde Jacob y su esposa Lady Rosalie, de ahora en adelante trabajarás para ellos –Dijo mi padre, de inmediato recordé ese nombre... Rosalie...