Capítulo 43. "Un extraño paquete"

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-Solo quiero decirte que nos tienes a nosotros sin importar nada, trataré de ser el mejor primo mayor que pueda, igual seguro tus padres solo quieren sentirse jóvenes otra vez, cuando se les pase estarán de regreso, pero por lo mientras puedes contar totalmente conmigo - Rápidamente lo abracé con todas mis fuerzas, sabía que no estaba sola, sin nada más que decir me acerqué a la puerta para salir de aquella habitación

-Por cierto... Gracias, sé que aún no puedo aceptar lo que ocurrió pero tú nos salvaste, sé que nunca podré devolverte el favor pero puedo intentarlo cuántas veces sean - Me sonrió, yo hice igual y salí de la habitación, me fui a acostar, estaba cansada pero por lo menos ahora todo había vuelto a la normalidad, después de mucho tiempo por fin podría dormir en paz.
Un extraño sonido me despertó, alguien estaba tocando a la puerta, rápidamente me levanté de la cama, me puse una bata e intenté cepillarme rápidamente el cabello para que no se viera tan alborotado, bajé las escaleras y abrí la puerta, solo era el cartero, traía una caja, el paquete era mediano, podía sostenerlo sin complicaciones además de que era algo liviano, la etiqueta de la correspondencia, de donde era que provenía al parecer en el viaje se despegó a lo que solo pude quedarme con una gran interrogante, pero lo más seguro era que aquel paquete fuese para Malcolm o Angus así que preferí solo dejarlo en la mesa de la cocina, regresé a mi habitación, fui a tomar una ducha y me vestí casual como siempre, me puse unos zapatos cómodos de piso, unos jeans de mezclilla y un suéter rosado de cuello de tortuga, fui a despertar a Ann ya que no tenía nada que hacer y además de todo ya era muy tarde para seguir durmiendo ya que casi era medio día, ella aún balbuceando me miró algo enfadada a lo que decidí dejarla dormir en paz, salí de su habitación y fui a preparar algo para desayunar, hacía mucho tiempo que había dejado de hacerlo aún recordaba esas ocasiones que cocinaba junto a mamá, por suerte aún recordaba algunas cosas, solo preparé huevo con tocino junto a unas rebanadas de pan tostado y jugo de naranja, pronto como si el olor del desayuno los hubiera llamado aparecieron Ann, Angus y Malcolm, de inmediato nos sentamos a desayunar

-¿Que es esa caja? -Preguntó Angus con mucha curiosidad, definitivamente no era nada para él

-El cartero lo trajo esta mañana, seguro es para Malcolm, no hay datos del remitente ya que al parecer la etiqueta se desprendió en el viaje, solo aparece nuestra dirección

-Tal vez tengas razón, hace días esperaba un paquete de propaganda y discos que una disquera nos había prometido, creí que nunca llegaría, pero es extraño, me imaginaba una caja más grande -Dijo Malcolm mientras tomaba la caja y se la llevaba a la habitación así agradeciendo el desayuno y que recibiera el paquete, Ann se ofreció a lavar los platos y a limpiar un poco la casa, por otro lado Angus iría con sus amigos, yo sin nada más que hacer me decidí a salir a caminar, recordando el paquete me hacía pensar en si la carta del abuelo le llegaría pronto, entre pensamientos absurdos y cosas realmente importantes solo pude escuchar mi nombre, me di media vuelta y a casi una calle se encontraba Dave, al verme de inmediato salió corriendo para acercarse a mi

-Creí que no me escucharías, te veías perdida en tus pensamientos -Dijo de modo burlón, él tenía razón así que solo bajé la mirada apenada

-¿A dónde vas? -Pregunté intentando de romper el silencio

-Compraré cuerdas nuevas de guitarra ¿Y tú? ¿Acaso esperabas a alguien? -Solo negué con la cabeza

-Si no tienes nada que hacer puedes acompañarme, a los chicos les agradará verte, después de todo lo que hiciste ellos no saben como agradecerte -Solo afirmé sin mostrar mucho interés y nos dirigimos a comprar las cuerdas, después de ello caminamos por un verde campo, ya que esa era otra manera de llegar, caminamos por el pastizal tranquilamente hasta que el lodo me hizo hundirme, mis zapatos quedaron llenos de éste
-Tal vez deberíamos ir al arroyo a qué te laves los pies -Dijo Dave mientras me ayudaba a caminar descalzo, pronto llegamos a un arroyo, la parte positiva fue que no nos desviamos demasiado del camino, me senté en una roca cerca del agua y comencé a lavar mis pies, ya que al igual que mis zapatos habían quedado llenos de lodo fangoso, después de eso enjuagué mis zapatos quitando el lodo, los puse a secar al sol, estaba por levantarme y continuar el camino hasta que Dave me detuvo reteniendome en la roca, se agachó frente a mí y comenzó a masajear mis pies no tardé en sonrojarme ¿Porque él hacía eso? 

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