Lo aprendí de ti

Cap 29: Una noche de cine

—¿Y tú que piensas hacer hoy? —me pregunta mientras gira en la silla de mi escritorio.

—Iré a la casa de Jessa —respondo sin moverme de la cama.

Deja la silla quieta de modo que queda frente a mi. Arquea una ceja y sonríe muy insinuante.

—Con mis padres —lo miro mal— ¿A caso eres idiota?

Cuando salí de la universidad con Max, vinimos a mi casa a jugar al Resident Evil como dos niños de ocho años. Luego nos aburrimos y nos quedamos hablando de nuestros planes para hoy.
Él como siempre, me contó que irá al antro, pero esta vez con Denise.

Ella no nos contó muy bien por qué está peleada con Louis. Sólo nos dijo que tienen problemas y que no quería pensar en eso.
La veo muy normal e incluso sale más con nosotros.
Tal vez tuve razón en el momento en que dije que él no es para ella, al menos en mi opinión.

—Oh está bien, lo siento Thales —me dice poniendo los ojos en blanco.

Hace unos días mis padres me dijeron que iríamos a la casa de los Trotwood,  y en ese preciso momento se me vino a la cabeza que volvería a ver a Jessa,  luego de aquella vez en el lago.
Pensé que sería bueno verla de nuevo porque hace bastante no hablamos.

(...)

Me termino de vestir y bajo de inmediato al garage. Iré a comprar helado y alguna que otra película antes de ir.

Hay que tener en cuenta que luego de cenar, nuestros padres se ponen a hablar de sus asuntos y nosotros nos aburrimos, sin contar que nos excluyen de su conversación y les importa poco que nos retiremos. Entonces, no vendría mal todo eso.

Regreso el auto al garage y al bajar veo a mis padres ya listos, esperándome en su auto. Iremos en el de ellos, como siempre.

Apenas abro la puerta oigo la voz de mi madre:

—Recuerda lo que te dije Jeremy, y ten siempre en mente que es mucho dinero —dice y cuando me siento se calla de inmediato, lo que agradezco porque odio cuando hablan de... ese tema.

El atardecer que se refleja a través de una de las ventanas traseras del Audi es muy bonito, y se complementa con una canción de los 80s puesta en el stereo, típico de mi padre.

Tuve que negar todas las propuestas para salir, incluso la de mis amigos porque, más que nada mi madre, no toleraría que no asista con ellos a la cena. Es muy exigente con este tipo de cosas.

Al llegar, saludamos a Scott y a Lauren, a quien le pregunto donde se encuentra Jessa porque le quería decir algo, me dice que está en su habitación.
Voy hacia la cocina y le doy el helado a Lily, la cocinera, para que lo guarde. Luego me dirijo de inmediato a las escaleras con las dos películas.

Las paredes extremadamente blancas hacen que la luz parezca aún más brillante de lo que es, además hacen que el pasillo se vea muy ancho.

Me acerco a la puerta de su habitación, la cual está entreabierta. Mierda.

Arrojo las películas que había traído a una pequeña mesa, que se encuentra contra una pared del gran pasillo. Una es de terror y la otra de dibujos animados. Si, mayormente las películas infantiles ayudan a que puedas dormir por la noche.

Bajo las escaleras respirando fuerte y oigo las risas de mis padres. Me decido a no ir con ellos. Esto me ha sacado todo el buen humor que tenía.

Atravieso el living, abro la puerta del comedor y me siento. Lo único que podré hacer por ahora es estar con el celular.

Jessa POV