Pares Impares Hank McCoy / OC

parálisis de sueño

El día había pasado rápido, estuve todo el día en el laboratorio y por la tarde me dediqué a limpiar el desastre en el que vivía Charles.
Aún no entendía como aquel hombre pulcro, amable y culto se había convertido en un drogadicto vagabundo que vivía en su propia mugre.
Charles para mi siempre fue un ejemplo a seguir,era como mi héroe, fue la persona que me demostró que no estaba sola en el mundo, él y Raven, eran como mi familia, ahora Hank también lo era.
Ver en esta situación a mi héroe, me partía el corazón, quería ayudarlo, pero no sabía cómo, Raven no volvería y Moira, Moira no me agradaba.
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Había llegado la noche y con ella el miedo a las pesadillas.
No quería molestar a Hank otra vez, así que fuí a mirar televisión, el plan era mirar televisión hasta el otro día y no dormir mucho.
Miré la hora, las 11 p.m. , me quedé otro rato más, se me iba a hacer larga la noche.
Eran al rededor de las 3 de la madrugada, yo moría de sueño, y en cuanto cerraba los ojos, me entraba un miedo paralizante, y tenía que abrirlos.
Quería llorar de frustración, ¿por qué no podía dormir??.

Estaba quedándome dormida en el sofá, cuando escuché pasos.
Enseguida me puse en alerta.
Me puse de pie arriba del sillón y esperé, los pasos se acercaban, mi respiración se hacía pesada, podía escuchar mi propio corazón,
Por la puerta de la cocina, apareció Hank.
Me sentía ridícula.
Era una situación digna de admirar.
Yo, parada arriba del sillón, con el control remoto a modo de arma.
Hank en pijama, mirándome y debatiéndose si reírse en mi cara o preguntar qué me pasaba.

—Me dirás qué ocurre, o debo preguntarte?— hubiera preferido que te ríeras Hank.
Bajé la guardia, y suspiré derrotada.

—Ya te lo dije hoy por la mañana—suspiré—no quería molestarte otra vez...—

Oí a Hank suspirar, —lo siento..— susurré.

—Max a mi no me molesta en nada que vayas a dormir a mi habitación, en serio pensabas pasar la noche aquí??, Aquí hace frío, y lograrás enfermarte si sigues aquí, si tienes miedo... Ven conmigo, o con el profesor, eres nuestra mejor amiga Max, tu nos cuidas a nosotros , y crees que nosotros no podremos cuidarte a ti?—vaya.. el sentimiento de agradecimiento crecía en mi pecho, pero de mi boca las palabras no salían.

—..Yo.. lo siento, no, Yo creí que te molestaba, y bueno.. el profesor.. tal vez me echara en cuanto pasará por la puerta..—
—Lo siento Hank..— por un momento sentí que los decepcionaba a ambos, eran mis amigos, y yo no era capaz de decirles que la estaba pasando mal, solo por no preocuparlos, por no añadir otro problema a la casa.

Sin pensarlo fuí y lo abracé, lo abracé como si el mundo dependiera de ello,

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Narra Hank:

No sabía que estaba ocurriendo con Maxi, cuando la encontré arriba del sillón, pensé en reír, de lo ridícula que era la situación.
—No quería molestarte—cuántas veces tenía que decirle a esta chica que no me molestaba.
—Max, a mi no me molesta en nada que vayas a dormir a mi habitación, en serio pensabas pasar la noche aquí??—
—Aquí hace frío Max, te enfermarás..ven conmigo ,o ve con el profesor, eres nuestra mejor amiga Max, tu cuidas de nosotros y crees que nosotros no podremos cuidarte a ti?— bajó la guardia en ese momento, me miró como si quisiera llorar, vino hacia mí, y me abrazó, muy fuerte.
Yo no sabía muy bien como reaccionar.
Y atiné a abrazarla también, quería cuidar de ella, pero si ella no me dejaba, sería imposible.
.—. gracias azúl...—dijo entre susurros.
La llevé a mi habitación y nos acostamos, ella jamás dejo de abrazarme.
Me sentía extraño, sentía un calor subiendo por mi cuello, pero al mismo tiempo, sentía que todo estaba bien.
—De que se tratan esas pesadillas Maxi?— pregunté.
Ella se sentó en la cama como chinito, y me miró fijamente, se sacó el cabello de su rostro y dijo.
—Enrealidad no sé si sean pesadillas, es como si mi cuerpo se paralizara, y no puedo moverme y tampoco puedo gritar o parpadear, y es entonces cuando siento el terror puro, es como si una enorme figura oscura estuviera arriba de mi, observado todos mis intentos desesperados de moverme y de gritar, todo esto pasa en cuestión de minutos pero es horrible, tengo miedo de dormirme.— entonces lo entendí todo, lo que Max sufría eran parálisis de sueño, nunca me había pasado, pero todos los que lo sufrían decían que es algo que no le deseas ni a tu peor enemigo.

—Max, lo que te pasa es parálisis de sueño , se te sube el muerto como se dice vulgarmente, no tienes nada de que preocuparte, duerme conmigo todo el tiempo que quieras, no me molesta, pero tengo en cuenta que lo que te pasa es una condición médica cariño—

Ese fue el momento en el que Max, durmió todos los días conmigo, durante años, años y años,

Había llegado un momento en que incluso a mi se me hacia muy raro que ella no estuviera en mi habitación.