Café para Craig

Pedirte perdón. Mi propio café

‹Craig›

Ya había pedido perdón a Stan.
Ya había pedido perdón a Kyle.
Ya había arreglado todo con Clyde.
Solo me faltaba algo. Pedirte perdón a tí.

Me costó buscarte. Ni siquiera recordaba donde estabas viviendo en ese momento.

Kyle, Butters, Clyde, Chef, ni siquiera Stan. Nadi sabía en qué sitio estabas. Solo recoradaba una casa vieja, un barrio oscuro y lúgubre, una gran lluvia.

Mis recuerdos estaban nublados, no tenía ni la mas mínima idea de donde podrías estar. Pero que importa?! Si en verdad tenía la intención ahí estaba el reto. Debía buscarte.

Horas, Días, Semanas. Ya era una costumbre tomar un mapa, salir en bicicleta y buscar el lugar dónde te vi por última vez.

Y creeme. El cansancio no me importaba una mierda. Solo quería volver a saber de ti una vez mas.

Recuerdo que un día, volviendo a casa de una jornada de búsqueda, encontré mi collar, el que debía compartir contigo pero lancé por la ventana. Ese fue uno de los motivos por los cuales intensifique la búsqueda.

Cada dia no paraba de pensar en tí. Incluso deseaba que esos idiotas que estaban contigo ese día; Damien y Pip, vinieran a llevarme nuevamente contigo.

La búsqueda fue difícil. Pero en algún momento te encontraría.

Y te localicé! Pero no gracias a mi búsqueda, sino a tu amigo, Christophe, el cual me contó que te había visto en su vieja casa.

Fue una gran pista. Al fin podría tener la certeza de donde estabas.

Preparé todo. Me vestí de la forma en que te gustaba, llevé comida, mucha comida, y un gran abrigo que compré, solo para tí.

Tomé un taxi, y durante el trayecto no hacia mas que pensar en tí, pues el momento había llegado, quería volver a ver a mi ex-novio después de tantos meses.

Al llegar ni siquiera lo dudé. Llegué a esa vieja casa y grité tu nombre. Sabía que estabas allí.

Y cuando escuché tus pasos, mi corazón se aceleró. Mi mente empezó a perderse y mi cuerpo empezó a temblar de los nervios.

Pero cuando abriste esa puerta, todo se invirtió. Pasé de la absoluta felicidad a la tristeza. De la esperanza al desconsuelo.

Verte como te vi. Derrotado, delgado, con el rostro caido, ojos rojos y cabello opaco y quebradizo me hizo romper en llanto.

Te veías muy mal. Tu estado físico no era bueno, tu apariencia denotaba depresión, lo veía en tus ojos. Y de quien fue culpa? De mi, Craig Tucker.

-Craig...

Tu voz... Eso me dolió aún mas. Estaba ronca, cortada, parecía que habías estado llorando bastante tiempo.

No sabia que decir. No sabía como reaccionar. No esperaba verte en tal estado, y menos verte tan vacío, sin emociones. Solo veía un cuerpo palido vestido con unos jeans grises y una camisa verde mal abotonada.

-T-tweek... L-lo... Lo siento demasiado!!!

-Craig...

-Perdóname, perdóname, perdóname! Te hice tanta mierda, lo siento... Soy una porquería de persona... Mira, te traje comida, un abrigo, te daré lo que quieras.

-Tu... Tu...

Vi como tus ojos volvían. Vi como estabas respirando mas rápido, y se formaba una expresión en tu rostro, pero una que no buscaba.

-Tu... Eres una basura! -Me dijiste con ira- Que mierda quieres?! Me das un puto regalo y ya?! todo arreglado?! Que crees, no es así!!! Sabes toda la basura que he tenido que soportar?! Mi café cerró! Me quedé sin amigos ni donde dormir. Y la unica persona en quien realmente confíe en esta porquería de vida, no quiso darme un minimo de confianza. A que mierda vienes acá?! A pedir perdón? Pues te diré algo Craig Tucker, no te voy a perdonar! Así como me trataste también lo haré. Eres una maldita basura de mierda, y me arrepiento de haberte conocido

-Tweek, se que me odias ahora. Te entiendo, solo acepta estas ayudas, si necesitas algo hablame. Te pido perdón por todo, estoy dispuesto a ayudarte en lo que pueda.

-Bien!!! Ayudame borrandote de este puto mundo. Puedes tomar tu caridad y largarte de acá. No te necesito para nada, así que vete al carajo.

-Vamos, no seas tan orgulloso, ten, te preparé algo de comida.

-Prepara lo que se te dé la gana. Vetw, no me interesas!

Tomaste un tupper lleno de carne y me lo lanzaste a la cabeza. Fácilmente pude haberlo esquivado, pero si alguien me golpeaba, y ese alguien eras tú, estaba dispuesto a recibir ese golpe.

-Porque mierda no lo agarraste?!

-Se que me odias. Golpeame todo lo que quieras... Lo merezco

-Basta! N-no me hagas esa psicología barata. Aun estoy molesto con-

No puedo negarlo. Se que me odias.

Pero tampoco puedo negar que tras tantos malditos meses extrañaba besar tus labios, Tweek. No puedo negar que extrañaba caer al piso contigo en un abrazo cálido, no puedo negar que aún te amo.

-C-craig! Déjame! E-estas... Tibio...

-Extrañaba esto, Tweek.

No me puedo detener. Quiero besarte una y otra vez, quiero decirte tantas veces que te amo. Te amo, te amo, te amo idiota! Todos tenían razón. Te amo.

-Craig...

-Adelante. Golpeame, dime que me odias. Te doy el derecho... Hagas lo que hagas, aún te amo.

Esperaba un regaño, un golpe, una mirada con molestia de parte tuya. Pero recibí algo que no esperaba, un gran beso de tu parte, el cual no pude dejar de seguir.

-Te odio idiota. Te odio, aun así me sigues gustando... Q-que carajos haces para lograrlo Craig?

-No lo sé. Tal vez, tu y yo...

-Estamos hechos...

-Uno

-Para el otro