Prólogo de nuestro amor

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“Desde ese día todo fue distinto en mi vida.

Pip y Damien me lo dijeron unos dias atrás, alguien llegaría a mi vida, me haría feliz y me sacaría de todas mis preocupaciones. Esperé a ese chico con ansias mucho tiempo, lo que no imaginaba era que ese chico sería ese azabache.

Cuando te vi entrar sentí algo, tenía mas nervios que de costumbre, y tu sola presencia me hacía temblar. Tus abrigo, gorro y guantes compartían al color de tus ojos, un bello azul rey, imponente y único.

Tu actitud nunca estuvo atrás, pues a pesar de verte intimidante y algo engreído demostraste tener empatía, ser amable, honesto y amigable.

Damien y Pip acertaron en una cosa, cuando tú llegaras mi vida tomaría un rumbo distinto.

Es que los chicos me daban consejos cuando salía contigo, Clyde me decía como vestir, Butters me ayudaba con mi actitud, incluso aveces Kyle me daba el apoyo que necesitaba para asumir las citas contigo.

Tu presencia se volvió costumbre en mi cafetería, Clyde, Butters y Kyle siempre estaban al tanto de que tú llegaras para avisarme y atenderte personalmente.

El collar que ambos compartimos, después de la pelea y todo eso, aún lo llevo orgullosamente en mi cuello, pues con este empezamos a escribir nuestra historia de amor, nuestro libro, el de Craig y Tweek.

Hay tantas cosas que quisiera recordar, nuestra primera cita en el parque, cuando vi a Gregory y Christophe, nuestro primer beso, cuando le dijimos a todos sobre nuestra relación... En fin, hay tantas cosas, pero una que me marcó.

Al comienzo decías que lo nuestro se debía a mi Wonder-Coffee, y bueno, en cierta parte tenías razón.

Una dd las razones por las que ya no puedo hacer ese café es debido a la ausencia de Pip y Damien, ellos le daban un toque especial al café.

Pip bien me lo dijo una vez: “Este café no será normal, no sera solo un sabor o un aroma. Este café despertará emociones, puede cambiar a una persona como no te imaginas. Solo te diré algo Tweek, yo te puedo ayudar a hacerlo, pero tienes que pensar bien a quien se lo darás”

Era curioso, el café no era el más caro, pero la gente casi no lo requería mucho, y quienes lo hacían no tenían los efectos que este tuvo en Kyle, Butters o Clyde. En cambio, en ti, vi que te cambió. Si, eras mas reservado, timido hasta cierto punto quizás, pero eras egocéntrico, y eso se acabó.

Hay otra cosa que siempre recordaré contigo, esa vez que me dedicaste una canción con una guitarra de Token.

Tu voz siempre ha sido hermosa, pero al cantar esta se transforma, puedes cantar como un ángel, un ángel qye me hace sentir calma, como si estuviera en casa.

Hay cosas que también merecen mención. Kyle, Butters, Clyde y yo, resultó que todos teniamos mas en comun de lo que imaginabamos. Al final todos tuvimos nuestro final feliz.

Kyle y Stan se hicieron novios, dejaron de lado las malditas burlas y comentarios, ellos se amaban y era lo único que importaba.

Kenny y Butters, que podría decir de ellos? Un amor sin duda alguna, en especial Kenny que a pesar de no tener mucho dinero sabe como demostrar su amor al pequeño rubio.

Clyde y Token. Relación incomoda no? Tu mejor amigo con tu ex-novio, pero vaya que son una gran pareja, un par de tortolitos enamorados.

Bridon y Kevin. Quién diría que tus amigos de la infancia se amaban, cosas que siempre se mantuvieron en secreto.

Gregory y Christophe no eran novedad.

Por último, despues dd una ruptura asquerosa y un montón de resistencia, Tu y Yo, Craig y Tweek.

Tu papá, Kyle, Bridon y mas, tantos que a propósito o no intervinieron en nuestro relación.

Al final tu y yo sabemos cómo terminó todo.

Ahora no solo somos los tontos enamorados que se veían todas las tardes en la cafetería, ahora somos familia.

Vivimos juntos, dormimos juntos y disfrutamos bajo el mismo techo. Si, tu padre fue difícil de convencer, pero tu determinación hizo que el entendiera como te sentías.

A partir de este punto no hay mas. No sé que nos depare el futuro, talvez mas sorpresas, amor, desamor y algunas peleas, al fin y al cabo así es el amor.

Craig, hoy, mañana y siempre te daré gracias por hacerme volver a creer en el amor.

Craig Tucker, te amo, y siempre te amaré”

–Tweek, que escribes? —Preguntó Craig entrando con un vaso de leche— Ya casi son las 12, no piensas bajar a celebrar?

Ya era Navidad. El tiempo pasó rápido sin conflictos ni dificultades, pues al final todos encontraron el verdadero amor, el que les correspondía.

Era 24 de diciembre, 11:50 de la noche, ya cerca de abrir los regalos, y como invitados estarían Kyle y Stan.

–C-cierto... V-voy! —Dijo después de mirar su reloj—

–Te estaremos esperando abajo, ya llegaron Kyle y Stan.

Craig volvió a salir, dejando a Tweek con una carta en sus manos mientras una sonrisa se dibujaba en sus labios.

–Valio la pena esperar, Pip.

Tweek tomó la carta y la empacó junto a un gorro que él mismo hizo. Uno parecido al que Craig usaba a diario, solo que con un pompón amarillo grande y largas orejeras.

Inmediatamente bajó al primer piso a hacer la cuenta regresiva junto a todos los chicos.

–Casi no llegas amigo —Dijo Kyle mientras saludaba— Listo?

–S-si...

–Aca vamos! —Gritó Craig— 10, 9, 8, 7...

–C-craig... —Tweek tomó la mano de su novio y dejó el regalo junto a él— Feliz Navidad.

–Feliz Navidad, amor...

–5, 4 , 3, 2...

–FELIZ NAVIDAD!!!

Un abrazo lleno de euforia, Stan y Kyle celebraron con un beso mientras Craig y Tweek hacian lo propio. Los fuegos artificiales sonaban fuera de la casa, y los silbatos y cornetas alegraban ese ahora 25 de diciembre.

La casa Tucker estaba llena de alegría, Thomas, su esposa, Ruby, Kyle, Stan, Craig y Tweek disfrutaban una Navidad como antes, juntos en compañía.

Así se daba fin a las dificultades que se atravesaron en el camino. No mas sufrimiento, no más dolor, a partir de ese momento todo sería alegría para los muchachos.

—Fin—

Café para CraigDonde viven las historias. Descúbrelo ahora