El fantasma del lago Suseong

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La ciudad y todas sus calles estaban en total silencio. No había ni un alma caminando entre esos caminos oscuros como el carbón: ni las almas torturadas ni tampoco las aliviadas. Todo el mundo reposaba tranquilamente en sus respectivos sitios, y entre esos sitios se encontraba esa mujer de pelo rubio y ojos morenos: justo en el lugar que le pertenecía. 

Yoongi, fríamente, se la miraba desde una cómoda silla que él mismo había trasladado a esa sala. La mujer estaba sentada en el suelo, desnuda, tenía los brazos y las piernas atadas, su cabeza colgaba inconsciente, y en su cintura vientre estaba una de las cosas más bonitas que podía haber visto.

Lejos de ser algo colorido y bello para la mayoría de la gente, lo que esa mujer llevaba gracias a la cortesía de Yoongi era más bien algo intimidante para toda esa gente que prefería lo colorido y la purpurina. Rodeando su cintura de encontraba un cinturón metálico, grueso, apretado, y no lo olvidemos, con unas púas muy afiladas y largas apuntando hacia el interior. 

Yoongi había tenido paciencia. Cuando pasó un buen rato finalmente la mujer despertó. Se sintió extraña al despertar: su cabeza dolía (a causa del golpe que le había dado Yoongi horas antes), sus extremidades estaban agarrotadas  y su cuello dolía de haber estado colgando. Tardó poco en reaccionar, pero ese tiempo de desconcierto fue algo inmensamente divertido para el hombre en la sala. -No hables. No quiero escuchar nada de tu sucia boca.- dijo el chico más joven que ella, antes de que la otra preguntara cualquier estupidez cliché como ¿dónde estoy?. En cuanto la mujer observó la situación en la que estaba sus ojos se llenaron de lágrimas una vez que el terror se apoderó de ella. Gritó ferózmente intentando que alguien la escuchara inúltilmente. Se removió en su asiento intentando liberarse de sus ataduras, pero en el momento en el que se movió un milímetro sintió una ligera presión en su estómago, haciendo que se parara bruscamente. -Yo de ti no me movería. Ese cinturón que llevas puesto se llama cinturón de San Erasmo, y a pesar que yo no soy cristiano ni tengo la intención de ser santo, debo admitir que los cristianos del medievo eran bastante originales.- La mujer lloraba descorazonadoramente sin escuchar las palabras de su secuestrador. - Ni se te ocurra volver a sollozar o acabaré con esto ahora mismo.- la mujer cerró su boca haciendo un esfuerzo y continuó llorando por su vida en el silencio del cuarto. - Veras, lo que hace este bonito cinturón es... nada. No hace nada. El no te hará daño, no te hará ni un rasguño, no te matará.- los ojos de la mujer se abrieron un poco. Como si un pequeño rayo de esperanza le dijera que no estaba todo acabado.- Lo harás tu.- Toda esperanza se borró de esos ojos borrosos, y una sonrisa bien prominente apareció en el rostro de Yoongi. - Se que eres una puta tonta, pero supongo que te habrás dado cuenta de lo que quiero decir. Con el mínimo movimiento que hagas te clavarás los pinchos del cinturón, te desangrarás y morirás. La mujer no podía gritar más fuerte. -Por favor, ¡NO! ¡Haré lo que quieras! pero por favor déjame ir, no se lo diré a nadie.- 

-Nunca te di permiso para volver a hablar. Cómo sé que eres un humano normal y corriente sin nada especial que aportar a la sociedad y no te moverías por mucho que esperara aquí sentado, tengo un regalo para tí.- Yoongi le dedicó una pequeña sonrisa y salió de la habitación. Una vez fuera abrió una pequeña ranura por la que se podía ver la habitación. A su derecha había una pequeña cuerda, y en ese justo momento, justo en medio del silencio y de la confusión, Yoongi agarró la cuerda y tiró de ella falsamente. El falso techo que había dentro de la sala se desplomó, y de entre los cimientos cayeron cientos, miles de cucarachas. 

La mujer en el interior del cuarto estaba cubierta de ellas, gritando desesperada, llorando a mares, suplicando por clemencia. Aunque Yoongi no sabía si lloraba por la repugnante sensación de cientos de cucarachas sobre su cuerpo desnudo o por el hecho de haberse clavado ya tres pinchos y seguir removiéndose inconscientemente entre ellos. 

Cuando hubo pasado un rato en el que ya no se escuchaban gritos y sólo sollozos Yoongi alzó su voz desde detrás de la puerta -Wow, mira lo que te has hecho. Has hecho un gran trabajo.- dijo el chico riendo ligeramente.- Puede que te preguntes por qué he hecho esto, y la respuesta es muy fácil: el otro dia iba caminando cerca del hospital cuando te vi salir de allí, fumando, con el teléfono en la mano hablando indiferentemente de lo cómodo que había sido tu aborto. Sinceramente, creo que esta es una forma más bonita de abortar para tí.- Yoongi no podía dejar de mirar la cabellera rubia de la mujer. Algunas veces, entre paliza y paliza, su padre le había dicho que su madre era rubia. Y en ese momento no podía dejar de recordar todas las palabras de ese bastardo. ¿Habría sido su madre igual que esa mujer? ¿Le habría importado tan poco la vida de su propio hijo? ¿Hubiera decidido que él muriera en vez de ella si hubiera podido escoger? No sabía cuales eran las respuestas, pero lo que si sabía era que la mujer delante de sus ojos hubiera respondido a todas positivamente. 

En cuanto limpió el cuarto y se aseguró de que la mujer había perdido toda la sangre necesaria para morir se dispuso a trocearla y guardarla en bolsas de basura para llevarla al lago Suseong y hundir cada pieza en sus profundidades. 

Y así, cómo si fuera otro día más, Yoongi se dirigió tranquilo y con paso firme a un salón de tatuajes cualquiera y se dispuso a tatuar su cuarta rosa. 

Ya parecía lejano el día en el que tatuó la primera rosa. Ya parecía lejano el momento en el que sintió tanto placer y felicidad.

Sin embargo esas sensaciones estaban a punto de ser desenterradas del corazón y desempolvadas por primera vez de una manera autentica. 


Aquí estoy mi gente de youtu.. quiero decir de Wattpad!

Me echabais de menos? Porque yo a vosotrxs sí!!

Se que no es salseante, pero creo que es importante para el desarrollo de la historia perdonadme si no os gusta XD

Bueno chicxs voy a ponerme a actualizar todos los fics, así que estad atentos. (Suplica porque lean sus otros fics)

Pd: si os gusta este tipo de escritura más gore, en mi história Killer (JK) encontraréis cosas aun mejores. (Bueno ya dejo el spam).

Y eso... que estamos a punto de llegar a las 8K y os amo con locura, mis galletitas de mantequilla!!

Lxs amo,
Baii 🌹

Estocolmo »YoonseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora