Hoseok estaba tumbado sobre la cama totalmente quieto mientras Yoongi se acercaba gateando sobre el peligrosamente. Hoseok estaba totalmente expectante al siguiente movimiento del rubio. El corazón de Hoseok iba más rápido de lo que jamás había ido. Le iba a explotar el pecho.
Yoongi siguió gateando sobre la cama, y cuando llegó a la altura de Hoseok se detuvo. Poco a poco fue bajando el peso de su cuerpo hasta quedar con ambos codos apoyados en el colchón a ambos lados de la cabeza de Hoseok. Lentamente posó sus caderas sobre las contrarias y comenzó a frotar su cuerpo contra la piel desnuda del mayor.
Sus caderas se movían de arriba a abajo y de delante hacía atrás haciendo pequeños círculos de vez en cuando, pero sus ojos estaban quietos mirando la cara de Hoseok: como se deshacía en gemidos involuntarios, la forma en la que sus mejillas se volvían rojas y mordía sus labios y removía su cabello.Yoongi acababa de comenzar pero Hoseok estaba disfrutando demasiado. Creía que en cualquier momento podría llegar al climax sin ningún problema. Yoongi se veía tan dominante y Hoseok tan inocente. Quizás el hecho de que uno estuviera completamente vestido y el otro completamente desnudo tenía algo que ver.
-Bésame- Hoseok quería volver a probar sus labios. Aunque fuera una vez más. Los necesitaba con locura. Los anhelaba.
Yoongi comenzó a mover las caderas más rápido y más fuerte mientras comenzaba a repartir besos húmedos y lametones por el torso y el cuello del moreno. Recorrió con su lengua todo su pecho hasta llegar a las clavículas y subir a su rostro. Una vez allí lamió sus labios con ansia y comenzó a besarlos desesperadamente. Los labios de Hoseok de sentían tan bien. Las mordidas de Yoongi sobre sus labios se sentían tan bien. Era el cielo en la tierra.
Hoseok comenzó a seguir sus impulsos y llevó sus manos al borde de la camiseta del rubio. Levantándose rápidamente y apresurándose a morder esa piel blanquecina en la que tanto había pensado.
Yoongi comenzó a desabrochar su pantalón. Se alejó de Hoseok y se lo quitó.-Bebé, ¿por qué no me quitas tú esto?- Hoseok se relamió los labios y se acercó al borde de la cama.
Cuando llegó acercó su boca al borde de sus boxers y, mirando al mayor a los ojos, comenzó a quitar su prenda con los dientes. Tocando su piel con los labios.
Fue bajando su prenda interior poco a poco, hasta que finalmente llegó al falo del mayor.
Todo resultaba tan erótico: Yoongi de pie completamente desnudo y Hoseok sobre la cama, inmóvil, con su boca a centímetros de su hombría.Hoseok se relamió los labios e inconscientemente la vergüenza volvió a su ser. Estaba nervioso. ¿Qué pasaría si no le gustaba? ¿cómo se hacia?
El pelinegro acercó su boca un poco más, haciendo que su aliento chocara con el miembro del mayor y este se estremeciera. Hoseok comenzó a frotar su rostro sobre el pene ya erecto de Yoongi, intentando alargar un poco más la situación.
-S-sabes mhmm me encantaría que me la chuparas.- Hoseok comenzó a besar inocentemente el largo de Yoongi- pero tengo algo mejor para que chupes, bebé.-
Hoseok levantó la cabeza confundido. No entendía lo que decía.Yoongi acercó su mano a la boca de Hoseok y posó dos dedos sobre sus labios. Indicando que los lamiera.
Los dedos se introdujeron en su boca y Hoseok comenzó a lamer los intensamente, deseando saber cuál seria el siguiente paso.Cuando Yoongi consideró que sus labios estaban lo suficientemente mojados se abalanzó repentinamente sobre Hoseok y comenzó a besarlo de nuevo. Le encantaban sus labios en forma de corazón. Estaban tan húmedos y eran tan tiernos. Le encantaba su cuello y su piel color miel. Sus pezones rozados que hacían que Hoseok se estremeciera a cada contacto con su lengua. Los huesos de las caderas de Hoseok que eran perfectos para dejar marcas notables. Sus abdominales poco marcados pero sumamente sexys.
Yoongi había descubierto una nueva afición: recorrer cada parte del cuerpo de ese chico con su lengua.
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Estocolmo »Yoonseok
FanfictionDonde Hoseok es secuestrado por Yoongi. » Síndrome de Estocolmo: Trastorno psicólogico temporal que aparece en la persona que ha sido secuestrada y que consiste en desarrollar una relación de complicidad y fuerte vínculo afectivo con el secuestrado...