1| El Chico Malo |Ruggarol|

4: "Te lo prohíbo"

—¿Me pueden explicar que hacían en esa maldita casa? —espeta Michael totalmente alterado caminando por toda la habitación.

Acabamos de llegar de aquella fogata, y para mi mala suerte él estaba aquí, sentado en mi cama esperando a que lleguemos para gritar como lo esta haciendo ahora.

—Solo fuimos a la fogata ¿Tiene algo de malo? — cuestionó irónicamente con indiferencia.

—¿Con quien? — esta vez modera un poco su tono de voz.

—Con Valentina —interviene Carolina por lo bajo.

—¿La rubia? — asentimos —¿Es que ustedes están locas? Esa chica es mala junta, puede ligar hasta con tres chicos a la vez.

Pongo los ojos en blanco y camino hasta mi cama. Me siento en ella y cruzó las piernas.

—Yo elijo mis amistades, y para ser sinceros, la rubia me ha caído excelente —sonrió de lado.

Silencia por algunos segundos, sabe que tengo razón - escucha karol - vuelve a empezar - no quiero que te acerques a esa fraternidad ¿Escuchaste? Y mucho menos que hables con cualquiera de ese grupete. ¡Te lo prohibo!

Ruedo los ojos y asiento haciendo una mueca de desprecio. Sé que con "grupete" se refiere a los chicos de la otra banda. Aunque no pienso hacerle caso. A los pocos que he conocido me han caído muy bien, bueno, a excepción de la barbie esa de Candelaria y al imbécil de Ruggero, son tal para cual con su genio insoportable.

—Hasta mañana. Tienen que levantarse temprano, y no quiero quejas —gruñe por último para después irse.

¿Pero que se ha creído para darme ordenes?

—Te dije que no debíamos ir — dice Carolina hecha un manojo de nervios.

—Me llega sus sermones — dejo caer mi cuerpo bruscamente sobre la cama — igual, me interesa un comino lo que ordene.

—Es tu primo mayor karol. Además, que yo sepa tu madre te dejo bajo su mando — le sonrió con hipocresía y ella estalla en risa. — Vámonos a dormir, no quiero llegar tarde.

—¿Y que onda con ese tal Agustín? Te gusta ¿No? —digo poniéndome de pie sonriendole pícaramente.

—¿Que? No y No — sus mejillas cambian de color a un rojo intenso. La miro y alzo una ceja — bueno esta bien, tal, vez un poco, pero olvidalo no vale la pena pensar en él.

El tono en que lo dice se transforma a triste y melancólico. Opto por silenciar, de repente ese no es un tema del cual le apetece hablar y yo no soy quien para obligarla.

******

Para mí buena suerte la profesora de lenguaje no están mala como pensé. A pesar de haber llegado 10 minutos tarde porque la maldita alarma no sonó, me dejo pasar sin ningún sermón o algo por el estilo.

Busco con la mirada a alguien conocido con quien sentarme, sin querer queriendo mis ojos se encuentran con los de él, con lo de Ruggero. Hacemos contacto visual por pocos segundos, ya que quita su mirada y le sonríe a la chica que se encuentra a su costado.

—Hey, karol — oigo un susurro en la esquina del salón.

Giro y veo a Erick, el loco que se la para tomando fotos haciéndome una señal para sentarme a su lado. Me alzo de hombros y aceptó, no tiene nada de malo.

—¿Fotografia también implica lenguaje? — pregunto queriendo entablar una conversación.

—En el mundo de la fotografía, es muy importante saber sobre letras — responde irónicamente y yo solo me limitó a sonreír.

La clase no estuvo para nada aburrida, bueno, al menos para mi gusto. Salgo del salón acompañada de Erick, quien va a mi costado sonriendo sin saber el motivo.

Pongo los ojos en blanco cuando veo a Ruggero mirándome de una forma burlona, no hace falta saber porque, seguramente sé esta burlando por la escenita de anoche. ¿Es normal odiar a un chico sin siquiera conocerlo?

—Fue un gusto compartir tiempo contigo karol. —Erick interrumpe mis pensamientos besando tiernamente mi mano.

—¿Okey? — digo confundia ante su acto — ¿Sabes que estamos en pleno siglo XXI verdad? —reímos al unisono.

—¿Fui un poco formal? —cuestiona sonrojándose. Asiento — pues lo lamento, solo quería causar una buena impresión.

Vuelvo a reír. Recién lo conozco y ya me esta cayendo súper bien. Le sonrió como gesto de agradecimiento, él deposita un corto beso en mi mejilla y se va por el extenso pasillo.

—Hola karol — me estremezco al escuchar su varonil voz.

Giro y lo veo. Tiene sus manos dentro de los bolsillos delanteros, y apoya todo su peso en una de sus piernas. Su expresión es normal, no tiene ni un gesto de burla o como siempre lo hace.

—Te estoy hablando — interviene sacándome del transe. —sé que causó la misma impresión en todas pero tampoco es para tanto —sonríe algo victorioso.

—Idiota — murmuro para empezar a caminar queriéndome alejar de su presencia. Escucho sus pasos aproximarse pero lo ignoro.

—No podrás esquivarme para siempre — susurra en mi oído provocando que trague saliva.

Se muerde el labio y se va tranquilo como si nada hubiera pasado.
¿Que es lo que pretende?

Holaaa😅
Si, después de varios días aquí está el siguiente capítulo.

Ya no podré actualizar todos los días como solía hacerlo. Lo que pasa es que como he vuelto al colegio, pues las tareas y todo eso me mantienen ocupada, por eso, tendré menos tiempo. Pero seguiré actualizando, solamente cada dos o tres días.

Bueno, ¿Que les pareció el capitulo?

¿Que creen que este pretendiendo Ruggerito?😏

Nos leemos en el siguiente💞

Besitos al aire💋💋❤