1| El Chico Malo |Ruggarol|

26: "Desilusión"

Apreto los ojos fuertemente y los vuelvo a abrir. Conozco a la perfección a Michael, y sé que esta enojado. Bueno, tiene razón en hacerlo, estos últimos días he estado evitando contestarle, le colgaba o simplemente apagaba el celular.

— Mike, primito querido, es bueno volver a verte — digo, fingiendo una sonrisa y abriendo los brazos esperando un abrazo que claramente nunca llega.

— No te hagas la buenita, karol. ¿Donde mierda hasta estado estos días? Y no me digas que donde tu jodida tía porque sabemos que no es verdad.

Trago saliva. No soy buena mintiendo, siempre termino tartamudeando o riendo por los nervios.

— Ya te dije donde estaba, es tu problema si no me crees. — que sínica soy. — ahora, si me disculpas, quiero ir a mi habitación. Estoy agotada.

Le sonrio, doy media vuelta y empiezo a caminar a toda velocidad haciendo caso omiso a sus llamados.

Cuando por fin llego a la puerta de mi habitación, suelto un suspiro. Forcejeo con la manija y me sorprende que la puerta este cerrada. Frunzo el ceño e introduzco una mano en mi bolso para sacar la llave.

A los pocos segundos, introduzco la llave en la cerradura y entro al cuarto. La escena que encuentro es de una película, sin duda.

Agustín, como puede, se coloca sus pantalones mientras que Carolina solamente tiene puesta su sujetador y unas diminutas bragas. ¿Pero que verga?

— Karol! — dicen ambos al unísono, compartiendo miradas de terror.

— Traumada de por vida, eso es obvio — digo en broma, dejando mi maleta a un costado.

— Yo, yo me voy — Agustín toma su playera y sale como alma que lleva al diablo de la habitación.

Suelto una carcajada y volteo a mirar a mi amiga.

— Que vergüenza — río ante las palabras de la sonrojada Carolina.

Observo como se viste rápidamente y se pone frente a mí. Tiene su cabello alborotado y la mirada en el suelo.

— Karol, lo que viste... — comienza, jugueteando con sus dedos — Agus y yo, pues, no somos novios ni nada de eso. Aunque bueno, no se, después de esto, quizá...

— Caro, tranquila, no te juzgo en serio. Es normal ¿no? Ustedes se gustan y pues, son adolescentes con las hormonas alborotadas. — reímos — solo ahora que estaré traumada.

Ella lleva sus manos hacia su rostro y se cubre.  No conocía ese lado malo de Carolina, aunque me gusta, creo que cada persona tiene su lado perverso después de todo.

— No a todas se nos cumple el deseo de tener algo con nuestro crush — digo poniéndome de pie, tomando mi maleta y colocándola encima la mesa.

— Y, ahora es momento que me cuentes tú — sonríe maliciosamente — ¿Que onda con Ruggero? ¿Te fuiste con él?

— ¿Por que preguntas? — arqueo una ceja.

— Bueno, se han estado oyendo rumores entre los chicos del grupo de tu primo. Varios han dicho que te han visto subiendo a un taxi con un chico ¿Es eso verdad?

— Oh dios mio — mi boca se forma en una "O". Estoy en problemas, graves problemas — ¿se dieron cuenta que se trataba de Ruggero?

— Ja! Lo sabia, te fuiste con él — exclama saltando como loca por toda la habitación. — ¿A donde? ¿Hicierom cosas sucias? Cuentamelo todo.

Sonrió, notoriamente sonrojada. Todavía no puedo evitar hacerlo al recordar todo lo que ha pasado con Ruggero. Aun puedo sentir su aliento recorriendo cada centímetro de mi piel. Y mi cuerpo pide a gritos que se repita. Dios! Con tan solo recordarlo, un escalofrío recorre mi cuerpo.

— Te contare todo, en serio — le digo — pero ahora quiero guardar todas mis cosas y descansar aunque sea un poco. Mañana será un día agotador.

— Recién vamos medio día — ríe — pero bueno, te entiendo. Más tarde me contaras todo y con detalles. — asiento.

— ¿Y Valentina? — pregunto guardando unas cuantas prendas en el armario.

— Ahí, odiando cada día mas a Michael. No sé, para mi que le gusta pero bueno, ella dice que lo odia.

— Ay, ojala que el sentimiento sea negativo. Pobre Valen, Mike en un completo idiota, esperó que no le guste.

Ella asienta y se sienta al borde de la cama, cruzando las piernas. Termino de desempacar todo y suspiro cansada. Recién empieza el dia y ya deseo dormir.

— ¿Vamos por algo de comer? — propongo señalando la salida.

— Recién son la una. — niega divertida — pero creo que un bocado jamas esta de más.

Reímos al unísono y salimos de la habitación, camino hasta el comedor.

Al llegar, nos topamos con una discusión de ambos grupos. Michael y Ruggero van al frente señalándose como amenaza. Jalo a Caro para poder escuchar mejor la discusión.

— Dime que no te llevaste a karol contigo imbécil! — dice gritando Mike totalmente enfurecido.

— Por favor, ¿A karol? ¿Es en serio? ¿Quien va querer llevarse a esa chiquita? Es demasiado ingenua e infantil para mí. — Ruggero hace una cara de disgusto causando la risa de sus amigos. — anda a acusar a otro idiota ¿si? A mí dejame en paz.

Siento un puñal atravesando mi pecho. Sus palabras son demasiado hirientes y no puedo soportarlo. Bajo la mirada aguantando las ganas de llorar. ¡Que gran desilusión la que siento ahora mismo!

Vuelvo a alzar la mirada y me encuentro con sus hermosos ojos cafés observándome desde lejos. Nuestras miradas se conectan por varios segundos y estoy segura que en mis ojos, puede notar lo dolida que me encuentro, y que ahora mismo quiero ir a golpearlo por utilizarme.

Pero me contengo. Dejo de mirarlo, tomo la mano de Carolina y tiro de ella hasta salir del comedor, con los sentimientos rotos.

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¿Quien mas cree que Ruggero es un completo imbécil? 😒

Sin embargo, tal vez tenía que decir eso para no levantar sospechas ¿Estan de acuerdo con eso? 😦

Ojala les haya gustado el capítulo♥♥

40⭐ y continuo ¿Lo lograremos?

Bye Bye. Besitos al aire♥♥♥