1| El Chico Malo |Ruggarol|

12: "¿Celos?

Karol

—¿Que tú hiciste que? — replica una vez mas la rubia después de haberle contado todo los sucesos de anoche. — ¡Dios! Eso si que es novedad, no cualquiera se besa con Pasquarelli.

— ¿Y crees que estoy orgullosa de eso? Michael me estrangularía viva si se entera que bese al chico que odia. Así que esto, se queda entre las tres — les advierto a las dos chicas que se encuentran sentadas al borde de la cama.

— Como sea —  interviene Carolina — te recomiendo que no te hagas ilusiones con él. Solo usa a las chicas para satisfacer sus necesidades, sabes a lo que me refiero, el sexo.

No puedo evitar asombrarme por la forma en como se ha expresado. Sin anestesia de por medio.

— Bueno yo tengo que irme — dice Valentina — seguramente mi compañera de cuarto debe haberse aparecido, y no quiero tener arrojados por todos lados.

-—¿Con quien compartes habitación? — cuestiono.

— Con Candelaria, y creeme, es un completo desastre — dicho esto habré la puerta y la tira fuertemente.

Me alzó de hombros y decido comer las tortillas que acabo de comprar, que por cierto, se ven deliciosas.

Miro a Carolina de reojo, ha estado un poco Rara desde anoche, su semblante cambio profundamente y eso es notable. Pero no me atrevo a preguntarle el motivo, estoy segura que sí quiere contarme, en cualquier momento lo hará.

El día se pasa volando cuando no hay nada que hacer. Toda la tarde me la he pasado mirando películas y revisando las redes sociales. Esto si que es vida.

Pero la tranquilidad, siempre es interrumpida. La puerta se abre de golpe, y Michael entra sin siquiera pedir permiso. Odio ese comportamiento.

— ¿Que quieres? — le espeto poniéndome de pie. Está claro que yo seré la que arregle la situación, ya que Carolina ni se inmuta.

— Me han dicho que bailaste con Ruggero, es eso mentira ¿Verdad?

No puedo evitar sentir cierto temor. Seguramente si le confirmó que es cierto, ira corriendo a romperle la cara.

— Por supuesto que no — digo soltando risas — es más, ni siquiera cruce palabra con él. Es un tipo aburrido, no me cae.

— Mas te vale, karol. No quiero que te relaciones con gente de ese grupete, y mucho menos con su jefecito.

— Yo elijo mis amistades, te vuelvo a repetir que tú no me mandas — sonrió hipócritamente.

Michael aprieta los puños pero no dice nada. ¡Ja! Siento que gane esta vez.

Pasa su mano por su cabello y camina por la habitación. Yo lo observó fastidiada, esperando a que salga por esa puerta y la tranquilidad vuelva a reinar.

— ¿Te puedes ir? — digo señalando la puerta — queremos estar solas.

Hago un ademán a Carolina para que hable pero ella permanece callada mirando el celular. ¡Okey, no puedo contar con ella cuando se trata de contradecir a mi primo! Genial.

— Mi tía llamo hace rato — confiesa para mi repentina sorpresa. — preguntó por ti, y por supuesto le tuve que dar las quejas.

— ¿Quejas? Mike, yo no he hecho nada malo. El único que se porta mal eres tú — contrataco.

— ¿Desobedecerme te parece mucho? — río a carcajadas. Debe estar bromeando — esto no es broma — dice y dejo de reír — a partir de ahora vas hacer lo que yo te digo ¿Oiste?

Estoy a punto de reprochar pero su mirada me causa terror y decido callar. No quisiera ganarme una discusión, ya tuve suficiente.

Asiento de mala gana y él sonríe gustoso. Esta vez, el gano este round.

Michael 1 Karol 0.

(...)

Llegó tarde, como siempre. La profesora me mira de mala gana, acabo de presentarme a la clase cinco minutos después de que haya empezado. Mi maestra después de darme unos buenos reproches me deja entrar. Bajo la vista de la vergüenza, varios chicos han empezado a murmurar y odio que lo hagan.

Buscó a Valentina con la mirada, ella me sonríe cuando nuestras miradas se cruzan y me llama para sentarme a su lado.

— Veo que eres mas Tardona que yo — bromea y yo la fulminó con la mirada. — debes dormir un poco mas temprano.

— Lo hice, enserio.

— ¿De verdad? Porque tu última conexión en Whatssap dice que fue a las 5:00 AM.

— Hay ya! — respondo resignada — no me di cuenta de la hora. Además, no tenía sueño.

La rubia rueda los ojos y asienta haciendo un gruñido.

(...)

Cada vez que suena el último timbre indicando que el día escolar ha finalizado, me siento liberada, aunque no tanto ya que tendré que realizar las terribles tareas que han dejado.

Camino hasta mi casillero acompañada de Carolina. En eso, mis ojos se posan en unos chicos besándose contra los casilleros.

No tardo en darme cuenta de que se trata de Ruggero y la horrorosa de Candelaria. Siento que mi estómago se encoge, y una corriente caliente recorrer mi estómagos. Estos son celos, para nada.

— Ellos...¿Son algo? — le preguntó a Caro que también se ha quedado estupefacta viendo la escena.

— No. Ya te dije, Ruggero solo usa a las chicas para una noche. — responde cortante y empieza a caminar.

La sigo. No debe importarme la vida de ese tipo, ni mucho menos sentir algún tipo de sentimiento hacia él. Lo único que siento es asco y repugnancia.

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Muchas gracias por leer♥ espero y les haya gustado el capítulo😊.

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Bye Bye. Besitos al aire😘