1| El Chico Malo |Ruggarol|

20: "Juegos"

Karol

Su familia y yo sentados en una sola mesa. Jamás creí que esto pasará, yo en esta situación, haciéndome pasar por su novia e inventando cualquier historia a las preguntas que recibo de parte de su madre.

Miro a Ruggero de reojo, este aguanta las ganas de reír al ver mi incomodidad. ¡Que idiota! Continuo comiendo, debo admitir que estos tallarines están muy ricos, uno de los mejores que he probado.

— Cuentanos algo sobre ti, Karol — dice la señora María. — ¿Tu familia donde esta?

— Pues, mi papá murió cuando era niña — un leve silencio hace presencia — y mi mamá, trabaja en Navarro como enfermera. Aún esta buscando un trabajo por acá para estar mas cerca de la facultad.

— ¿Y Ruggero y tú ya se besaron? — trago saliva de inmediato. Rugge parece también incomodarse ante la pregunta.

— Liliana, pero que imprudente eres — la regaña su mamá.

— Solo quiero saber. Si son novios, es obvio que lo deben haber hecho. Así como las películas románticas que tanto me gustan — dice poniendo ambas manos sobre su pecho.

Decido optar por silenciar, esa pregunta me ha puesto demasiada incómoda. Ruggero, sin embargo, parece no incomodarse ¿Quien lo entiende?

— Bueno, Rugge hijo, recoges los platos después de que todos terminen ¿de acuerdo? — dice poniéndose de pie. Se percina y sale del comedor. Liliana hace lo minutos pocos minutos después.

Un silencio incomodo se instala entre Ruggero y yo. Ninguno de los dos dice nada, cada uno continua comiendo de su plato.

Me gustaría preguntarle para que quería venir aquí, porque le urgía tanto salir tan rápido, pero no lo hago. Tal vez por temor a su respuesta, o porque simplemente no me atrevo.

— ¿Terminaste? — pregunta finalmente poniendo su plato a un costado.

Asiento haciendo lo mismo — Si gracias, estaba rico. — sonríe ligeramente — Mas bien, te quería preguntar algo ¿Puedo?

— Adelante — responde algo confundido.

— ¿Por que... Dijiste que tú y yo somos novios cuando en realidad no somos nada?

Muy bien karol, muy bien. Preguntando cosas que ni siquiera te molestan.

— ¿Solo eso? — Pregunta divertido — por favor, karol. Sabemos que eso no te molesta, pero bueno, lo hice porque mi mamá y Liliana pensaron eso, y si les decía la verdad, les quitaría la ilusión de que por fin haya encontrado una novia firme.

Como si nada hubiera pasado, agarra mi plato junto con el suyo y se levanta caminando hacia la cocina.

Auch! ¿Eso debía dolerme? Porque sentí como me hacia añicos.

Suspiro profundo, me pongo de pie y camino hasta la cocina. Él se encuentra en el lavabo fregando los platos. Sonrió sin querer al verlo así.

— ¿Por que mejor tú no haces esto y yo los guardo? — dice él girándose para verme fijamente.

— Okey — respondo. Él se seca las manos y se hace a un lado para que me ponga en su lugar.

Rápidamente la espuma empieza a esparcirse por el lavabo y por mis brazos, algunas burbujas se forman en el aire y río como niña cuando se revientan.

De pronto, lo siento. Coloca sus manos en mi cintura y las acaricia lentamente. Me estremezco ante el contacto. Pega mi trasero en su entrepierna y siento su creciente erección.

— ¿Que estas...Que haces? — pregunto entrecortada.

No dice nada, y continúa con sus traviesas manos. Me gira sobre mis talones y por fin lo veo de frente. Entre cierro los ojos esperando que me bese, lo siento tan cerca, solo centímetros de distancia, pero en vez de eso, besa mi mandíbula, descendiendo hasta mi cuello.

Hecho mi cabeza hacia atrás y suelto un gemido ahogado. Esto es demasiado y a la vez tan poco.

Quiero tocarlo, Quiero sentirlo, Quiero comprobar que esto es real.

Llevo mis manos hasta su torso, que gracias a la ligera playera que lleva puesta me permite mejor contacto con su piel. Los acaricio lentamente, disfrutando la sensación.

Él forma una pequeña sonrisa y en sus ojos puedo ver la lujuria por el deseo. Toma mi rostro con sus manos y me obliga a mirarlo fijamente, entonces me besa. Rápidamente le correspondo el beso, el desesperado beso que poco a poco va cambiando el ritmo.

Abro mi boca dándole paso a su lengua, que examina cada parte de mi cavidad bucal. Retrocede algunos pasos, acorralandome contra el lavabo, dejandome sin escapatoria.

Siento sus manos descender hasta mi trasero. Lo aprieta. Suelto un gemido involuntario.

Mala idea, pésima idea.

— Escuche soni....— doy un Respingo y algo a un lado a Ruggero al escuchar la voz de Liliana aproximarse.

Demasiado tarde para evitar que haya visto algo. Lo ha visto todo, y su semblante confuso lo dice todo.

— Yo...— balbucea nerviosamente.

— ¿Que quieres? — espeta Ruggero y lo fulminó con la mirada.

— Escuche sonidos extraños, quería saber si todo estaba bien. No quería interrumpir — dice con la mirada baja y sus manos entrelazadas. — deberían ser un poco mas silenciosos.

Y sin más, sale corriendo de la cocina dejándonos completamente helados y sin opción ha responder.

Lo miro de reojo, el muy idiota esta aguantando las ganas de reír.

— Bueno, que comience el juego — susurra cuando pasa por mi lado haciéndome estremecer.

¿Juego? ¿A que se refiere?...

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Bastante ingenua nos resulto karolcita😏😂😘.

Lamento mucho la demora💔 estoy enferma últimamente :c la gripe :'v

Bueno, solo espero que les haya gustado el capítulo♥ si es así no se olviden de dejar su voto y comentario✨. Se los agradecería un montón♥.

Les quería pedir de favor, que se pasen por mi perfil ha leer la nueva novela adaptada que estoy escribiendo💘 Si llegamos ha mas leídas en esa c: actualizare dentro de esta semana esta novela😉. ¿Les parece? 💅

Bueno, Gracias por leer💜

25⭐ y continuó🌠🌚