1| El Chico Malo |Ruggarol|

35: "Alejados"

[Omnisciente]

La castaña se encontraba confundida ¿Que hacia su mamá ahí? ¿Por que habría venido? O sea, le alegraba muchísimo volver a verla, pero también, le preocupaba su presencia. Ya que solo se podía significar una cosa: Peligro.

— Te extrañe mucho, Karol — le dijo Rosario a su hija, terminando de abrazarla.

— Yo también, Mami, pero...¿Por qué estas aquí? — preguntó la castaña, teniendo a la respuesta.

— Pues, vine a saber como estabas. Además, Michael me ha estado llamando e informandome sobre tu comportamiento, y lo que me ha dicho no me ha gustado. — comentó, causando el temor de Karol ¿Sera que el idiota que tenia de primo había abierto la boca? De ser así lo mataría, eso es seguro — además, me han trasladado a un hospital en esta ciudad, así podre estar mas cerca de ti.

Karol soltó un suspiro. Al menos sabia que su mamá lo retiraría del internado y todo continuaría como siempre, pero....Ya no estaría tan libre como últimamente había estado, ya que Rosario la estaría vigilando con cautela.

— ¡Tía! — gritó Mike, corriendo hasta donde se encontraba y abrazándola fuertemente — que bueno que ya estas por aca.

— Pero que grande que estas — lo saludo, besando su frente. — y si, por fin podre estar con mi hija.

— Que hermosa noticia, ahora si mi querida prima se mantendrá alejada de lo que no le conviene.

Sevilla fulminó con la mirada a su primo. Era un completo idiota. Quería tirarlo al suelo y pegarle hasta cansarse, pero se contuvo.

— Karol, vendré mañana ¿si? Para revisar tus notas y eso, ahora tengo que intalarme en la casa que he alquilado. Nos vemos mañana, cuidense — Rosario se despidió de su hija y de su sobrino, y se fue.

Michael y karol cruzaron miradas. Este la miraba burlón, sin ocultar la gracia que le hacía la cara de la chica.

— Eres un imbécil — gritó ella. — Como se te ocurre llamar a mi mamá. Algo le has debido de decir para que ella pida el traslado acá ¡Estupido!

— Primero te me calmas, y segundo, tuve que decirle como te comportas, y agradece que no le dije de tu "cercanía" con el idiota de Ruggero, porque ahi si te cuelga.

— Ruggero es solo....ni siquiera es mi amigo. — dijo, con un nudo en la garganta.

— ¿Entonces porque se besaron? — Karol bajó la mirada — puedo ver en tus ojos, que tú sientes algo por él. Pero él hacia ti no, no te quiere. Se burlara de ti, y juro que si lo hace...lo castro.

— Él no me gusta. — ay si, como si eso fuera cierto.

— Eso esperó Karol, y también, ojalá que no te le acerques, porque ahora si no dudaré en decirle a mi tía, y estarás en serios problemas.

Dicho eso, Michael la miró por última vez y se alejo del lugar, dejándola completamente confundida, y con sus sentimientos aun mas enredados.

(...)

Matemática. El curso que menos le gustaba. Pero ¿A quien podría gustarle? Todo es fórmula y enredos, todo un problema para que al final, te de un resultado insignificante.

Lo único bueno era que, lo compartía con Rugger....¡No! No pensaría en él. Se había propuesto dejar de pensarlo, dejar de mirarlo y dejar de sonreír cada vez qué decía algo.