Love is HORRIBLE (I think) {#TM2)

10. Amigos.

Viernes.

Se suponía que debía estar súper animada porque era viernes y eso significaba fiestas y descanso. Sabía que ambas cosas no casaban muy bien, pero yo siempre acababa consiguiendo el equilibrio perfecto de ambas. El caso era de que estaba decaída. Decaída porque no había vuelto a saber nada de Oliver. Y sabía que era una gran tontería que me sintiera así cuando era yo la que quería espantarlo unos días atrás, sin embargo, ya le había cogido un cierto cariño. Éramos amigos. ¿Realmente éramos siquiera amigos?  Bueno, sea como sea extrañaba su sonrisa y sus estúpidos comentarios que me ponían histérica. Extraba verle y hacerme la dura delante suya. Lo extrañaba a él... Y yo, como mujer fuerte e independiente que lucha por lo que quiere, en cuanto salí de la universidad fui al colegio de mi sobrino para recogerlo. No sin antes avisar a Heather para que ella no fuera.

Respiré profundamente un par de veces antes de salir del coche. Estaba muy nerviosa. Quería verlo de nuevo, hacerlo rabiar y que él  me hiciera rabiar a mí, y por supuesto contemplar su sonrisa, aunque fuera por última vez. Erguí mi espalda y andé a paso decidido hasta Oliver. Él me miró sorprendido, pero no sólo sorprendido. Un torbellino de emociones completamente diferentes habían cruzado por su mirada.

-Hola. - Dije, sonriente. Oliver alzó una ceja con curiosidad. -Venía a recoger a James - Él asintió, pero parecía decepcionado. Tragué saliva y decidí ser fuerte. -y a verte...

Su cara fue un poema. Por un momento tuve miedo de haberla cagado con ese estúpido comentario. ¿Quién me mandaba decirle a un chico que venía a verle? Habría sonado ridícula, tal y como me sentía.

-Vaya... - Miré hacia el suelo, pero levanté la mirada al oír un suspiro. -Creí que estarías más entretenida con otras cosas. - Dijo con desdén. Fruncí el ceño. ¿Por qué se ponía así? Sólo le había cogido la mano a Jack.

-Y yo creía que podríamos ser amigos. - Espeté. Estaba intentando no ser muy brusca con él, pero me era difícil cuando no paraba de rechazarme.

-¿Amigos? - Soltó una carcajada, pero al verme completamente seria, se callo abruptamente. -Claro. Seremos amigos.

-Vale. - Murmuré sin saber muy bien que decir. -Bueno, me llevo a James. Ya hablaremos.

Cogí a James de la mano y me dispuse a irme, pero paré en seco al oír mi nombre salir de sus labios.

-¿Nos vemos esta tarde?  Quiero enseñarte algo que te encantará. - Dijo y sonrío y yo casi me muero.

Por fin esa sonrisa que tanto anhelaba. Me quedé muda por un momento, se me hacía imposible que las palabras salieran de mi garganta.

-Mm... vale.

-Perfecto. Paso a recogerte a las cuatro. - Asentí, incapaz de pronunciar palabra y me marché de allí con James.

*

-¿Y para qué querías ir a recoger a James? - Preguntó Harry con una ceja alzada. Joder, como me conocía...

-Tenía cosas que arreglar con Oliver. - Me limité a decir. Heather abrió los ojos como platos y una gran sonrisa se le dibujó en la cara. -No es lo que tú piensas.- Aclaré mirando a Heather y me reí un poco ante su cara de desilusión. -Somos amigos. - Dije y suspiré.

Harry me miró poco convencido, pero no dijo nada al respecto, cosa que agradecí. Estuve jugando un rato con James y Spiderman, y luego, me fui a mi casa para estar lista para cuando Oliver viniera  recogerme.

No sabía adónde iríamos, así que saqué una camiseta y unos vaqueros de mi armario. Iba a ponérmelos cuando veo un mensaje de Oliver en mi móvil.

"Llévate un bañador ;)"

Justo a tiempo, Oliver.

No tenía ningún bikini y estuve apunto de entrar en pánico hasta que recordé que Heather  tenía  y que seguramente no le importaría dejarme uno.

-¿Diga? - Dijo mi amiga desde el otro lado.

-Heather, necesito urgentemente que me dejes un bikini. - Solté de golpe.

-Voy para allá.

Diez minutos después, mi amiga estaba en la puerta de mi casa montada en su precioso Audi. Recogí la bolsa con el bikini y Heather se fue. No sin antes guiñarme un ojo con picardía.

Maldije mil veces a Heather cuando al ponerme el bikini descubrí que la parte de abajo era brasileña.

Maldita Heather y sus ganas de encontrarme un hombre.

*

-Bueno, qué me dices, ¿te animas? - Dijo pasándome una tabla como las de surf pero mucho más plan, más estrecha y más larga.

-¿A qué exactamente?

-Windsurf. - Dijo como si nada. Yo no era muy fan de los deportes de riesgo, sin embargo, no iba a parecer una cobarde delante de él.

-Claro que me atrevo. - Dije tomando la tabla de un tirón. Él soltó una suave carcajada.

Me acerqué a la orilla del rió  y puse ambos pies sobre los esquís a la vez que tomaba con fuerza aquella especie de cometa. Me gustaría decir que me salió súper bien, pero la realidad es que con el primer movimiento del agua me caí de culo. Oliver se acercó corriendo a mí, sonriente.

-¿Es tu primera vez? - Asentí, intentando levantarme avergonzada. Oliver me tendió la mano para ayudarme y yo la acepté. -Bien. - Dijo una vez que estuve de pie. -Te enseñaré. Pon tus pies sobre los esquís y echa el culo hacia atrás para que no se te vaya el cuerpo hacia alante.

Siguió dándome instrucciones, las cuales, yo seguía al pie de la letra. No quería volver a caerme por nada del mundo. Él se metió en el agua hasta que esta le llegó a los hombros mientras me aguantaba por la cintura. La sensación era increíble como volar. Y fue aún más intenso cuando me soltó. Una vez que se le cogía el tranquillo era bastante fácil a decir verdad. Vi desde el agua como Oliver se preparaba y se metía en el agua al igual que yo minutos atrás, sólo que con mucha más gracia.

Sonreí mientras el sol me acariciaba. Era la mejor sensación del mundo. Me sentía completamente libre, como si en cualquier momento pudiese echar a volar. Y lo había descubierto gracias a Oliver.

Él pasó por mi lado y le dediqué mi más sincera sonrisa. Me sentía tan feliz y tan completa en aquel momento.

-Me encanta ser el que provoque esa sonrisa. - Me pareció oír, e iba a preguntarle, pero el ya había pasado de largo.