-Enfermera.... Enfermera...
- Dígame joven, ¿Que necesita?
¿Y nunca nadie vino a verme?
Su padre y su esposa venían los fines de semana...
¿Y quien estuvo siempre conmigo?
Pues yo... Entre risas le respondió la joven enfermera, que aun su rostro no daba a descubrir, por su gorro y tapabocas quirúrgico, estaban en terapia intensiva por tanto era demasiado el cuido...
¿Y acaso nunca te quitas esas cosas?
No, reglas son reglas y pues se deben cumplir jovencito...
¿Y tú eres anciana que me dices jovencito?
No, preguntas demasiado... Descansa un poco
En esos momentos llego el médico dando la orden de que iniciaran terapias con el fisiatra, y que debía ser trasladado a cuidados intermedios, ya no era necesario tenerlo en esa área porque su recuperación estaba siendo demasiado rápida para el tiempo que paso en vida vegetativa prácticamente...
- Enfermera... Enfermera
-Dime cariño!
- ¿Eso significa que debo empezar a moverme?
-Sí, pero es poco a poco... Yo te ayudare en tus terapias, pero debes empezar a comer para que recuperes fuerzas, un suero no es suficiente...
- ¿Y mi familia?
-Pronto mi cielo, pronto vendrán...
- Es que quizás viéndolos, recuerde algo...
- En eso tienes razón, yo me encargare de buscarlos, pero descansa...
-¡Gracias! Está bien, te dejare en paz un rato...
ESTÁS LEYENDO
El Ángel y la Prisionera
RomansaUn angel negro, una oscuridad andante, una estrella que ya no brilla porque opacaron su luz, una mirada cálida y a su vez congelando todo lo que mira, en su piel hay marcas y recuerdos que perturban, no puede volar, se quedo herido entre tanta melan...