Capítulo 12

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"A partir de hoy, Kayla dejará de existir"


Las agujas del reloj marcaban las siete de la tarde, solo quedaba una hora para que todo terminara. Bajé las escaleras y ni Joe, Emer y Walter habían vuelto a casa. Me asomé al salón y vi a Robert recostado en el sofá de piel, estaba distraído viendo una serie en la televisión. Y podía jurar que no se inmutaba con nada y estaba bastante ensimismado viéndola.

Corrí a la oficina dónde Joe y los demás solían realizar sus negocios, estaba nerviosa, tanto que un sudor frío recorría mi espalda. No podía hacer ruido y mucho menos que el estúpido guardaespaldas de Joe se diera cuenta. Cerré la puerta sin ser escuchada y el olor a alcohol invadió mis orificios nasales, creía que iba a marearme. Era demasiado fuerte. Una pequeña mesa al lado del escritorio estaba llena de botellas de whisky y el cenicero lleno de colillas. Rebusqué en aquella oficina algo que sirviera como prueba para terminar con el negocio que tenían.

Las estanterías estaban llenas de carpetas, todas contenían cientos de papeles que no entendía, cogí una de ellas y me puse a leer el contenido para ver si era válido ante la policía. Algunos documentos demostraban la compra-venta de varios tipos de drogas ilegales y los dejé sobre la mesa para llevármelos.

Mis ojos fueron a parar a un cajón, estaba cerrado con llave. Forcejeé intentando abrirlo pero era inútil. Mordí mi labio nerviosa mirando toda la sala, pensando que hacer para abrirlo. Desconocía totalmente el lugar en el que podría estar la llave porque Joe siempre me mantenía alejada de todas las cosas que él hacía y sobre todo, me prohibía entrar aquí.

Comencé a sacar carpetas de los muebles para amontonarlas en el escritorio y en la silla, ni rastro de la llave... Los papeles se iban cayendo conforme sacaba todo, en ese momento no me importaba, pero el sonido de una caja caer al sacar una carpeta llamó mi atención. Me agaché y pude ver jeringas, pastillas y polvos en su interior. Vacié la caja y del fondo de ella cayó un llavero.

Rápido Kayla. Mi conciencia no paraba de hablarme y por su culpa mis nervios aumentaban.

Mis dedos temblaban, estaba muy nerviosa. Creía que iba a entrar en pánico. Comprobé todas las llaves hasta que di con la que abría ese cajón. Varias armas estaban ahí junto a lo que parecía una foto mía.

¿Qué mierda era eso? La cogí y debajo aparecieron más fotos, removí todo el cajón y seguía sin salir de mi asombro. Mi garganta se había secado por los nervios.

De fiesta, con Maddie, con mi familia en Londres, junto a mi hermana Chelsey en un parque jugando y paseando a mi perro, en el aeropuerto rumbo a EE.UU...

No daba crédito a todo lo que había encontrado. ¿Joe me había controlado durante mucho tiempo? Guardé bajo mi camiseta todas las fotos y seguí mirando, había un papel con nombres en una lista. Todas eran chicas y sus nombres estaban señalados con una cruz roja.

¿No era la única en esto? ¿Dónde estaban las demás?

Los papeles restantes indicaban contratos de confidencialidad, direcciones, envíos de drogas a otros países y acuerdos con empresas. ¿Qué clase de mafia tenían Joe, Emer y Walter? ¿No era solo droga con lo que comercializaban?

Cerré la puerta cuando cogí todo lo del interior del cajón y lo guardé bajo mi ropa como pude. Pretendía avanzar pero el robusto cuerpo de Robert apareció frente a mí, le sonreí de forma hipócrita, intentando no ser descubierta.

- ¿Qué hacías ahí adentro? –Se cruzó de brazos-

- Ehm, Joe me llamó para que... -Miré hacia las escaleras y volví a fijarme en su cara, su ceja estaba arqueada- para que le buscara un papel que necesitaba urgentemente. –Encogí mis hombros sonriendo-

Bizzle's trouble - jbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora