7. Felicidad en forma de escultura

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Ya había pasado una semana desde que Yoongi y Jimin se hablaban apenas por cortos mensajes. Esta noche sería la reunión de los siete en el apartamento que compartían Kookie, Jin y Namjoon, pues Yoongi hace un tiempo se había mudado con Tae y Hobi.

Jimin no podría estar más ansioso. Muchos sentimientos se agolpaban en su corazón que ahora se encontraba confundido. De verdad dolía la actitud de su Hyung, pero él no sentía que tenía derecho a reclamar, podría haber sido sólo un pasatiempo.

Timbró con los nervios a flor de piel, para encontrarse con la característica sonrisa de Jungkook que le extendía los brazos.

— ¡Jimin Hyung! — dijo mientras lo envolvía en un cálido abrazo — llevas mucho tiempo si venir aquí ... ¿acaso alguien más te tiene tan ocupado?

— Por-por supuesto que no Kookie... entre la pasantía y la universidad no hay tiempo — soltó con una pequeña risa.

— Hyung perezoso — río Kookie dejándolo pasar.

Jimin no esperaba encontrarse con una furiosa mirada por parte de Yoongi, se notaba de lejos como le hervía la sangre. Se sentó intentando obviar la forma penetrante en que el pelinegro le observaba como si tratase de hacerlo desaparecer.

— ¡Jiminie! — gritó Hoseok, saltando a su lado — ¿Cómo están los cachetes más tiernos del mundo ?

— ¡Yo no soy cachetón hyung! — respondió Jimin mostrandose sonrojado y aún más adorable, al tiempo que todos soltaban una sonora carcajada.

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Ya eran alrededor de las 10, todos se encontraban con sus estómagos llenos mientras Jin comentaba cómo había preparado tantos platos en tan poco tiempo. Jimin casi había olvidado la sensación de pesadez en su corazón y Yoongi ya ni le miraba. Entonces, sintió un suave agarre en su muñeca y luego Jungkook le susurro al oído.

— Hyung, ven conmigo tengo algo que mostrarte...

Jimin lo siguió hasta la habitación. Mientras observaba a todas partes notó cuánto había crecido, los libros de derecho ya ocupaban más espacio que los videojuegos así que sonrió en silencio.

— Hyung — habló para llamar su atención — el... el otro día un cliente me regaló esto ... quería saber si ... si usted puede decirme de dónde es — dijo pasándole una pequeña figurita que tenía en sus manos.

Jimin la tomó en sus manos y la observó con detenimiento, luego abrió los ojos un poco asombrado — e-es una escultura en miniatura de Jules Desbois... fue un escultor francés muy famoso en su época — miró el objeto casi con añoranza — Esto sólo lo puedes comprar en el Louvre en París ... es realmente un lindo regalo — sonrió devolviéndolo.

 — Mmm y ... ¿Le gusta, hyung?

— Oh, por supuesto amo la escultura, aunque no la elegí como mi línea de trabajo es muy hermosa.

— Estaba pensando en... en regalársela — Jimin le miró a los ojos con un brillo incomparable. 

— Yo no sé nada de arte hyung, a usted le gustará más.

— ¿Estás seguro ? — preguntó sin ocultar la emoción en su voz.

— Cien porciento hyung.

Con espontaneidad absoluta Jimin le dio un abrazo fuerte, sacando el aire de los pulmones de Kookie.

Ceguera «Yoonmin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora