Cuando justo pensé que no podía pasarme nada peor, me pasa esto.
Tal vez el universo está contra mi y está es su forma de decirme "hey no eh terminado contigo" y luego me patea en medio de las piernas para dejar bien claro el punto.
Tener a Jimin en la misma clase ya me resultaba bastante abrumador, no podría lidiar con ser su compañero, solo nosotros dos durante semanas, en el proyecto de la profesora Kim. Tenía que haber más personas que se interesaran por el piano. Seguro las había. Si yo lo estoy y soy nuevo entonces debe haber más.
La voz de la profesora me alejo de mis esperanzados pensamientos y comenzó a dar más explicaciones referentes al trabajo.
— Ya que terminaron todos voy a decirles con que personas trabajarán. De algunos de ustedes tengo grandes expectativas y estoy ansiosa por ver lo que presentarán.
Casi pude sentir sus córneas chocar contra mi cara. Estaba seguro de que ese "algunos" tenía algo que ver con Jimin y conmigo.
Y no podía estar más en lo cierto porque cuando levante la vista de la mesa lo primero que vi fue los ojos de la maestra viéndome disimuladamente con una sonrisilla en el rostro.
Comenzó a nombrar a las personas en parejas o grupos y luego de unos minutos solo faltábamos cuatro personas más, Jimin y yo. Estaba cruzando los dedos para que el destino o el universo tuvieran compasión de mí. No me siento listo para afrontar mi temor más grande.
Es decir, sabía que me tocaría con Jimin pero al menos esperaba que hubiera otra persona entre nosotros para sentirme más cómodo y menos avergonzado.
— Sun hee, Jimin y Jungkook, ustedes tocaran el piano.
¿Cristo por qué?
Después de que la maestra dijo a las ultimas personas, dio la indicación de juntarnos en nuestro grupo o con la pareja que nos hubiera tocado para comenzar con la planeación del proyecto.
Gire hacia un lado para ver a Jimin desde mi lugar y me encontré a mi mismo mirando a través del hombro de Tae, como sus ojos se hacían pequeños cuando le sonreía a la chica de cabello corto y negro con el par de anteojos.
Ella lucía de verdad agradable. Tenía puesta una blusa color crema y una falda blanca que le quedaba justo por encima de las rodillas. Su sonrisa resaltaba sus facciones y su cabello corto la hacía lucir bastante tierna y adorable. Definitivamente su nombre parecía hacerle absoluta justicia a su cara, porque no dejaba de sonreírle a Jimin mostrando un par de hoyuelos a penas visibles.
— Kookie voy a ir con Dae hyun , ¿porque no vas con Jimin y Sun hee? ellos ya están platicando te lo vas a perder.
Me sonrió y a penas se levanto del asiento lo vi agitar su mano a un chico de cabello marrón oscuro con la sonrisa pequeña.
Mi mirada regreso de a poco a la escena de Jimin y Sun hee sonriendo entre si. Tome un poco del valor que Taehyung había dejado incrustado en su banca y luego me levante de la silla para encaminarme hacia ellos.
Cuando estaba a un metro de distancia mi respiración se atoró en mi garganta. Quería salir corriendo. Se supone que no quería estar con Jimin a solas, pero ahora que había alguien más involucrado me causaba incluso más miedo el tener que pasar tiempo juntos. Los tres. Solos.
— uhm... yo... y-y-yo... — los dos se giraron a mirarme con las sonrisas pegadas en el rostro y Sun hee fue la primera en hablar.
—Oh hola... me llamo Kang Sun hee, es un placer conocerte y también trabajar contigo — me extendió la mano y su sonrisa volvió a aparecer en su rostro. Desde aquí incluso podía ver un bonito lunar debajo de su ojo izquierdo.
Le extendí la mano de vuelta y me esforcé por succionar aire suficiente antes de hablar — Yo soy Jungkook... — mi voz sonó a penas como un susurro enfermizo e inmediatamente me avergoncé de mi mismo y mis mejillas se volvieron tan rojas como fue posible.
— ¿Como? no te escuche muy bien.
Intenté una vez más. Jale aire con cuidado y me esforcé porque mi voz sonara audible.
Pero a penas termine de tomar aire Jimin contestó por mi.
— Se llama Jungkook, es mi amigo.
¿Amigo? ¿Cuando nuestra situación había pasado de acosador-pianista a "amigos"?.
Mi mirada se despegó del piso y vi a Sun hee sonreírle a Jimin mientras él me dirigía sus ojos pequeños con la sonrisa cálida de siempre.
— Es bonito — dijo Jimin tomándome desprevenido
— ¿Perdón?
— Tu nombre. Es bonito. Ayer te fuiste muy rápido y no me dijiste tú nombre pero ahora lo sé y es muy bonito.
Juraría que vi a Sun hee mirar a Jimin con incredulidad y luego agitar la cabeza un poco para mirarse los dedos.
La palpitación de mi corazón era tan rápida qué podría estar a punto de darme un paro cardiaco. Jimin me sonrió otra vez y entonces me di cuenta de algo.
Tal vez y solo tal vez, Jimin si me gustaba.
Un poquito.
Solo un poquito.
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Pueden matarme si quieren.
Lo siento si no subí capítulo en un largo tiempo, normalmente me tardo una semana en subir pero les juro que no me dio tiempesillo.
En serio los siento. 😞
Gracias por leer. Bye 💖
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