Atrapada con los Akatsuki

#13: Ahorro con malinterpretaciones pervertidas

Congelada, procuré centrarme solamente en sus ojos. Estaba demasiado roja como para poder hacer algo más aparte de observar que Itachi también estaba colorado hasta el cuello. Mi pelo, ahora empapado, me tapaba los pechos y la entrepierna, por suerte. Y luego mi padre decía que lo tenía demasiado largo...

- Eh... Esto... Yo... Lo siento... No sabía que...- balbuceé, temblando. 

Fui interrumpida bruscamente: antes de poderme explicar, Itachi había resbalado bruscamente, quedándose pegado a mí por completo. Para colmo, pude sentir "esa cosa" rozando el interior de mis muslos. Puse mis manos en sus hombros, tratando de respetar el poco espacio vital que había entre nosotros.

- Yo...- repetí. Volví a ser interrumpida, esta vez por su voluntad. 

En un segundo, tomó aire, dejó caer su rostro sobre el mío y me plantó mi primer beso, cerrando los ojos. Por timidez, más que por otra cosa, yo también cerré los míos y me dejé llevar por él. El agua seguía saliendo del grifo, y eso no hacía sino elevar más la temperatura de mi piel (entre el sonrojo y el agua... >///<).

- No te preocupes- sonrió, acariciándome el cabello-. Un accidente lo tiene cualquiera.

- Pero es que yo...- traté de decir. Volvió a besarme, transmitiéndome una seguridad increíble sólo con ese gesto. Que yo supiera, nunca había besado a ninguna chica, ¿y tenía semejante habilidad? Una de dos: o tenía un lado oscuro y era un vicioso, o había hecho un cursillo de besos a escondidas.

- Ya que estás conmigo, quédate- murmuró en mi oído, pasando un brazo por mi cintura e incorporándose con cuidado, levantándome a mí de paso. 

Estaba 100% segura de que si un tomate me veía, me preguntaba de qué rama de la familia era yo.

***

- ¿Por qué no me habéis avisado que había alguien duchándose?- protesté, bajando las escaleras y tomando a Kira en brazos. 

- ¿¡Os habéis duchado juntos!?- se cayó Deidara del sillón de la sorpresa. Me estampé una mano en la frente.

- ¡Si entré a la bañera y se me cayó Itachi encima, ¿tú qué crees?!- ladré, colorada de nuevo.

- Hala, otra pareja, otro ahorro- comentó Kakuzu.

Puse los ojos en blanco antes de irme a preparar la comida de Kira, y para ahorrarse preguntas y comentarios, Itachi vino conmigo. Pero por supuesto, Hidan, Tobi, Deidara y Sasori nos siguieron, sentándose en la mesa mientras yo sacudía el biberón e Itachi sostenía a Kira. Se había dejado suelto el pelo a petición mía, ya que le quedaba más lindo así. 

- ¿Y qué, mucha temperatura?- comenzó a atacar Deidara, meneando las cejas. Volví a poner los ojos en blanco y me volví a sonrojar.

- No es de tu incumbencia- protesté, cogiendo a Kira y sentándome en una silla para darle de comer.

- Ahora ni se te ocurra decir algo o te mato- advirtió Itachi, tomando un vaso de agua y fulminando a Hidan con la mirada. 

Reí cuando lo vi tomarse la primera mitad del vaso con tranquilidad, pero sin quitarle ojo de encima a los pervertidos que habían presentes en la sala. Y justo cuando estaba por la segunda mitad...

- Una moneda a que hubo lemmon en la ducha- le apostó Sasori a Hidan.

Itachi pegó un escupitajo de agua sobre ellos, antes de empezar a perseguirlos por toda la casa hasta darles una colleja a cada uno. Cuando regresó, no pude aguantarme la risa.

- ¡Estoy muy calmado!- me señaló con un dedo, haciéndose el pelo para atrás con los dedos.

- Eso díselo a la vena de tu frente y a la vena de tu cuello- me reí, terminando de limpiar a Kira tras el provecho. 

- Cálmate, Titán, ya les has pegado, vuelve a tu forma humana...- seguí riéndome sin parar.

- Te has olvidado de que dormimos juntos por una semana más, ¿verdad?- me recordó Itachi, alzando una ceja con una sonrisa de lado. Me sonrojé y el rostro que se me quedó debió de ser épico, porque él comenzó a reírse de mi reacción-. No te preocupes, no soy tan cruel.

- Menos mal...- suspiré, aliviada.

- Aunque quizá se me vaya de las manos y...

- Ni. Se. Te. Ocurra- amenacé pausadamente-. Mira, ya me has asustado.

- ¿Qué gato no le teme al lobo?

- Anda, baja de esa nube que te has creado y toma a Kira, que voy a esterilizar el biberón- rodé los ojos, dándole la niña a Itachi y dándome la vuelta para realizar la acción recién nombrada.

Me daba miedo que, cuando Kira se fuera, Itachi siguiera durmiendo conmigo... (miedo en plan bien, no en plan "Oh Dios mío, me va a violar" o algo así xD).

(En la foto, Itachi sonriendo ^///^. Lamento mucho lo corto que ha sido, pero fue lo que me salió u.u Sepan disculpar)