El Chico del Gimnasio (PAUSADA)

Capítulo 32

Narra Ailen.

- Saca la maldita mano de ahí...

Susurré. Él sonrió.

- No.

- No me provoques mas...

Agarre una tostada y la mordí para no gritar.

- Eres un...

- Te encanta mi amor...

- Pero no con Alicia al lado tuyo.

Tomé café.

En lo que va del desayuno, Juan Luis no dejó de tocarme la pierna y cerca de mi zona intima por debajo del mantel de la mesa. Lo peor es que tiene a Alicia al lado de él, y al lado de Alicia está el bebé. Yo al lado mio tengo a alguien que no conozco, debe ser conocido de Nacho o que se yo. Pero es incómodo de todas formas.

Estoy odiando este desayuno...

- ¿Te vas sola...?

- Si... No hay nadie conmigo...

- Me quise referir a que si te vas en taxi o tienes coche...

- En taxi. ¿Por que?

- Solo pregunto... Porque puedo llevarte...

- No... Prefiero ir en un taxi.

Corrió mi ropa interior y acaricio mi feminidad.

- ¿Estas loco?

Murmuré comiendo una galleta. No quería gemir y pasar vergüenza por su culpa.

- Shh...

Empezó a mover su mano con mas frecuencia. Mordí mi labio.

Es un maldito.

- Voy a... Llegar...

- Hazlo...

Pasaron unos segundos.

Mordi mi labio de nuevo. Él sacó su mano de donde estaba y sacó todo lo mío con su lengua.

- ¿Paso algo Amor?

Preguntó Alicia al verlo.

- Solo... Se me volcó mantequilla amor. No es nada.

Me miro y sonrió. Estaba roja.

Volvió a poner su mano donde estaba, repitiendo el mismo procedimiento de antes. Así hizo una vez mas y acomodo mi ropa interior.

Termine mi desayuno y subí a la habitación donde Nacho me habia indicado para dormir anoche. O sea, la misma donde me acosté con Juan.

Me cambie de ropa interior después de higienizarme, y decidí irme. Harry pasaría por mi, y me dijo que ya llegó.

- No niegues que te gustó.

Juan me besó. Me alejé.

- Está mal...

- Lo se. Pero no podía no hacerlo.

- Me voy...

Bese su mejilla y salí. Me despedí de todos y Mariana me acompañó a la salida.

- Nos vemos Aily

- Adiós Mary, nos vemos.

Bese su mejilla y subí al coche de Harry.

- Hola imbécil.

- Hola tonta. Vamos.

Deje mis cosas en el asiento trasero y nos fuimos.

Le conté todo lo que pasó. Casi me mata por lo de Juan y Alicia. Pero no es mi culpa, sino de Juan que quiso hacer esto. Bien, no me quejaré ni voy a negar que fue algo hermoso lo de anoche. Aun así me siento culpable por Alicia, no tiene porqué soportar esto.

Llegue a casa. Fui al baño, hice mis necesidades, me duché y salí. No tenia ganas de nada basicamente. Sólo pensaba en él, y en lo que pasó.

Cuando entró al baño ayer, estaba llorando porque no soportaba verlo con otra. Me molestaba, me dolía.

Solo espero que se decida; yo no voy a ser su juguete de nuevo.

Narra Juan.

- Te extraño...

- Yo también te extraño... Pero no puedo ir a verte ahora...

- Quiero ver a mi hijo..

- No puedes. Tengo al imbécil de mi marido al lado, duerme, pero igual ahora no puedes venir. Si quieres mañana puedes venir, él se va de viaje...

- Oh, genial Amor mio. Ya pronto estaremos juntos los tres.

- Si... Solo espera que le saque mas dinero... Solo un poco mas.

- Ya, dejalo y ven conmigo Nena. Tengo todo lo que necesitas, no lo necesitas mas a ese idiota. Ven conmigo.

- Ah... Haré lo que pueda.

- Bien... Te amo.

- Y yo...

Alicia cortó la llamada. La muy tonta tenia el altavoz, y no se dio cuenta que estaba despierto.

- ¿Como es eso que te vas con otro?

Se volteo.

- Juan no...

- ¿Desde cuando...?

- Antes de conocerte... Él me había dejado embarazada... Luego se arrepintió y volvimos... Pero yo te amo y...

- Callate Alicia. -La interrumpí- Deja de mentir. Nunca me amaste, y yo tampoco te amé.

Se quedó quieta.

- ¿Como...?

- Yo siempre amé a otra persona. Solo estaba contigo porque pensaba que Alex era mi bebé. Ahora se que no es así.

- ¿Entonces...?

- Entonces vas a agarrar todo lo que te pertenece y te vas a ir. Mañana no te quiero aquí.

Me levanté, me cambié y me fui.

Ahora podre ir con Ailen..