No Soy Ella Reiji Y Tu

CAPÍTULO 7

T/n

Esa primera noche en la escuela fue de lo más tediosa, nadie me ha saludaba o dirigía la palabra.  Era como si no exisitiera.  Al llegar a casa, llore mucho sin razón.  Asumí que tal vez sería la decepción de no haber tenido un buen día.  Pueden decir que soy idiota pero tenía  esperanza de que todo mejorará.

Día dos en la escuela.

—Vas a ver que todo mejorará hija.

Mi madre intentó darme ánimos.

—Eso es espero, estoy a nada  de regresar a Inglaterra.

Mi mamá, solo sonrió y beso mi frente.

—Si esto no funciona. Te prometo que te iras a otra escuela pero esta vez en América.

—Seis meses.

—Seis meses, te lo prometo.

Me bajó del auto y  el frío  de la noche se hizo presenté.

Odio el frío.

Caminé de forma decidida hacia la entrada de la escuela...tipo infierno a la que tenía la desgracia de asistir. A quien carajos se le ocurrió un instituto nocturno.

El frío era más intenso de lo normal. Al llegar a la entrada sin querer me tropiezo con  un chico. Más bien el tropezó conmigo.

Hijo  de puta.

Camine hasta llegar al salón, hoy tocaba Historia, lo mejor será irme hasta la parte trasera del salón pero intenté buscar un lugar y  el único disponible era a lado de ese odioso chico que había chocado conmigo.

Cuando me senté escuche una clase de bufido o ¿queja?, no se que fue. Lo observé detenidamente, era guapo a pesar de el carácter  de " quítate o te puteo", hay que ser sinceras tenia lo suyo. Su cara parecía tan familiar.

¿De donde lo conozco?.

Es  parte de la familia lunática de los Salsamagi.   Ahora fui yo la que bufé y aleje mi pupitre más de lo normal del chico.  Me senté y volví a observas sus facciones.

Cabello blanco perfecto.

Nariz perfecta.

Ojos hermosos y de un color brillante.

Carácter de mierda.

Un estilo de badboy.

Piel blanca y tersa.

Este tipo si quisiera podría ser modelo.

El me descubrió mientras lo veía el me miro molesto, yo aparte la mirada avergonzada.

—Deja de verme, humana estúpida.

No te estaba mirando.

"No seas mentirosa", me dijo mi subconsciente.

Decidí mejor no decir nada. Me limite a mostrarle el dedo corazón.

—Repugnante humana.

¿Escuche bien?, hoy no tengo ganas de lidiar con idiotas y no vengo de buen humor.

—¡Repugnante tu puta madre!—, Le conteste.

Todo el salón se giro avernos, estaban fascinados o espantados. Sus rostros tenían marcados tantas cosas que no supe como interpretarlo.

Pero lo que paso después no me lo esperaba, el en un segundo ya me tenia tomada del cuello,  eso no fue lo mas terrorífico de todo, solo cerré los ojos un momento y cuando los abrí mi vida dependía de un hilo.

Estaba a nada de morir, si el soltaba mi cuello una caída de casi 100 metros me mataría. Pero si no me soltaba dentro de poco me quedaría sin oxígeno.

—Repite tus palabra  humana asquerosa. Pero piénsalo bien por que serán tus ultimas palabras.
Mi lado cobarde  me pidió que suplicara por mi vida pero mi lado valiente hizo que le contestará.

Por lo menos no iba a morir como una cobarde.

—Tu... puta...madre— intenté sonreír— púdrete...idiota.

El sonrió y me soltó.

Ahora si iba a morir por idiota  y lengua suelta.
Creo que este era mi fin. Cerre los ojos y espere el golpe, el cual nunca llegó, al contrario sentí que algo me tenía agarrada.
Abrí los ojos y me encontré unos ojos rojos impresionantes.  Eran tan bonitos. Mi fantasía duró poco porque caí en cuenta de quien era, uno de los hermanos Salsamagi.

Ahora que lo veía de cerca podría decir que es de los chicos mas guapos que he visto, pero eso jamas lo iba a decir en voz alta.

—¿Te encuentras bien...Tn?— Me dijo preocupado, me sorprendió que no hablara por el otro nombre.

—Si gracias...— le dije agradecida,m Ahora que lo pienso no se  como se llama—¿cual es tu nombre?.

Me mostró una debil sonrisa.

—Mi nombre es Reiji Sakamaki.

El chico me sonrio pero no eran de esas sonrisas de cortesía era una sonrisa que escondía un secreto, un doble significado.
Me bajó de forma lenta, mis ojos se encontraron con su mirada atenta.

—No te acerques a Subaru, si no quieres morir— Y se alejo.
La elegancia que irradiaba me dio un escalofrío. Era tan perfecto en todos los aspectos.  Ya le debía un favor y eso era malo.

Casi muero el día de hoy. Esto lo tiene que saber mi madre, no voy a permitir que el... ¡Con que el nombre de cabellos de Santa  se llama Subaru!... Ese hijo de puta me las pagará.

Iba a caminar hacia la escuela pero alguien me toco mi hombro.

—Buenas noches, le puedo ayudar en algo señora—. Le dije cortes como me habían enseñado.

—La vida es un ciclo. Todo se vuelve a repetir desde el principio, sea como sea siempre terminara de la misma manera y nada se puede cambiar.

—Disculpe a que se refiere.

Antes de que me contestara de la nada desapareció. Esta gente está loca.
Ahora que lo pienso como rayos le hizo Subaru para poder ir de un lado a otro en menos de un segundo.
Me quiero ir a casa esto es raro.

—Señorita no le han dicho que no puede estar fuera de la escuela.