No Soy Ella Reiji Y Tu

CAPITULO 9

El contacto de los labios de Ruki fue tan mágico que cerré los ojos. Pero cuando los abrí, yo me encontraba en el suelo y este chico me tenía entre sus brazos.

Me había desmayado.

Fue un sueño.

—¿Oye chica te sucede algo?— en estos momentos debería de estar de todos los colores rojo del universo, solo fue una alucinación.

Estoy casi segura que no lo fue.

—Disculpa, no es nada, perdón por cualquier cosa que hiciera estando en un estado de shock—, suspiré cansada y me levanté del suelo con ayuda de este chico, —ha sido un largo día. Bueno con permiso...

Me había besado con él en mis sueños y no sabía su nombre. Te pasas T/n, no tienes remedio.

—Ruki Mukami, un placer.

—T/n, es un placer.

Hice una reverencia.

—Bueno, gracias con permiso Mukami, fue un placer— hice otra reverencia— Bueno me tengo que ir, cuídese.

¡Estoy segura que no fue un sueño!.

Y me alejé como alma que lleva el diablo.

Cuando entré a la escuela suspiré, con todo esto se me olvidó lo que hizo el idiota de Subaru.

Pero qué hice mal, yo no los conocía antes de venir a Japón. Será mejor irme con cuidado con esa familia. Tengo el presentimiento que me van a meter en problema.

Caminé por los pasillos, y iba tan despistada que choque con una chica rubia, me pidió disculpas y salió huyendo. Justo después apareció uno de los chicos que iba con Reiji.

—No estorbes en mi camino idiota—, me dijo el hijo de puta cuando pasó a mí lado.

¿Disculpa?

— ¿Acaso estás muy gordo?— cada dia mas odio esta escuela— Ahora lo entiendo tu egocentrismo es tan grande que por eso no cabes o ¡ya lo tengo!. La menstruación, ya te bajo y por eso estás de mal humor.

En segundos ya me tenía acorralada contra la pared.

—Catherine—, comenzó oler mi cuello —no debes jugar con fuego porque te puedes quemar.

Esa sensación me erizó los vellos.

Su voz.

Mierda era tan excitante escucharlo de esta forma, es como si ya lo hubiera vivido antes.

—Señor Sakamaki no debería estar en clase. Le pido de valla ahora mismo.

La campana me salvo.

—Esto no se va a quedar así, Cath—, antes de separarse de mi me beso los labios. Fue mínimo el roce pero fue...tan...mejor no lo digo.

Antes de que comenzara a tener más pensamientos con él para nada decentes, la realidad me dio una bofetada, me había llamado Catherine, él pensó que estaba con Catherine.

Tengo que averiguar de ella, lo antes posible. Esto se tornara oscuro si las cosas siguen de esta manera.

—Disculpa, señorita Tn, necesito hablar con usted—.

Por lo que se, no he roto ninguna regla...aun.

Caminé con el director hacia su oficina

—Tengo entendido que era una de las mejor alumnas en su institución anterior, y se dice que usted es una niña prodigio, estuvimos hablando con su padre. El nos dijo que por su edad debería de ir en segundo de bachillerato pero que en Inglaterra estaba por cursar el tercer año.

—Así es... Podría ir al punto.

Por lo menos mi padre ha hecho algo bien.

—La pasaremos a último año, porque lo más seguro es que se las clases le fueran aburridas.

Esa si era una gran noticia, obvio que me aburre.

—Muchas gracias.

—Ahora señorita acompáñeme a su nuevo salón.

Caminaba detrás de él, hasta detenerse en un salón. Toco la puerta y habló con el profesor.

—Listo puedes entrar, estoy atento a cualquier cosa.

El director se retiro con una leve reverencia.

El profesor me observó de forma cortante.

—Chicos ella es su nueva compañera, es de Inglaterra, pero es una chica inteligente por lo cual la adelantaron.

Entre a el salón mirando mis pies, cuando levanté la vista del suelo, me encuentro con eso ojos color rojo.

Podía decir que era fan de sus ojos.