Maquillaje || Remington Leith ||

6

-Así que se han decidido por vivir juntos-afirmó la madre de Remington, ambos asintieron, sabían que eran jóvenes y que quizá la madre de tu novio no lo vería muy bien, así como la tuya-pues me alegro, ya era tiempo.

Remington se atragantó con la comida y tú solamente la miraste atónita.

-Mamá-replicó Sebastian y bueno Emerson estaba muriéndose de la risa por las reacciones de todos en la mesa.

-Es la verdad Seb, Maxime pasaba más tiempo en casa de tu hermano que en su propia casa, además siempre tenía problemas con su madre, que mejor que ya vivan juntos y nadie les cause jaqueca-argumentó, tú miraste a Remington y él seguía viendo a su madre con la boca entreabierta.

-Bien no me esperaba que nos regañaras pero definitivamente tampoco esperaba esto-y todos empezaron a reír, la cena siguió transcurriendo con tranquilidad, pronto la comida acabo y todos se dirigieron a la sala a pasar el rato, Stephanie anunció que debía ir a la casa de su madre dejándote sola con el trío de Kropp's.

-Así que, ¿Cómo te sientes viviendo con el desastre aquí presente?-Reíste por la pregunta y te encogiste de hombros.

-No es un desastre-Sebastian te miro con una ceja en alto y tú solo pusiste los ojos en blanco a la vez que te reías-bueno quizá sí pero solo un poco.

Después de un rato el tema de que Remington y tú ya vivían juntos quedo fuera y el próximo tour abordó toda la atención, te gustaba escuchar como el trío de chicos sonaban tan emocionados cuando hablaban de su trabajo, sabías lo apasionados que eran cuando se trataba de la música y era una de las principales razones por las cuales los admirabas tanto.

Mientras los chicos hablaban sobre las ideas para el escenario y posibles lugares de los conciertos, tú recargaste tu cabeza sobre el hombro de Remington, su cabeza se giró hacia ti y después de preguntarte si estabas bien regreso su mirada a sus hermanos al mismo tiempo que su brazo se enrollaba en tus hombros.

-Entonces Maxime-llamo Emerson, levantaste tu cabeza para mirarlo y el solo sonrió-¿Vendrás con nosotros al tour?

-No lo sé-suspiraste pensando en todo lo que implicaba ir de tour con Remington, las fans estaban al tanto de la relación pero aun así te asqueaba la idea de ver a Remington enojado con sus fans si algunas llegaban a tratarte mal-no quiero estorbar.

-Nunca me estorbarías-respondió rápidamente tu novio, restregó su nariz contra tu sien haciéndote reír.- ¿Verdad que no sería una molestia?

-¡Claro que no! Sería agradable tenerte con nosotros en el autobús, ayudas a controlar a...

-Emerson-advirtió tú novio a su hermano menor, este tenso los labios y asintió mirando hacia los lados.

-De todas formas sé que estás más tranquilo cuando estoy contigo, no hacía falta que Emerson lo dijera-las mejillas de Rem se sonrosaron y solo atinó a soltar una corta risilla.

-Piénsalo Maxime, sería bueno para ti, conocerías un montón de ciudades.

-Y a mucha gente, nos divertiremos mucho juntos.

-Y estarás conmigo, cuando estás presente siento más confianza al cantar-murmuró Remington besando tu mejilla, sonreíste a tu chico pensando en lo lindo que sería no tener que esperar tres meses para volver a verlo, miraste al trío de hermanos y pensaste en que tendrías que dejar de lado tu trabajo, aunque considerando que tú madre era tu jefa ya te habías dado por despedida.

-¿Están seguros que no seré una molestia?-El rostro de tu novio se iluminó al ver que prácticamente habías aceptado, Emerson río negando con la cabeza.

-Te propongo algo-miraste a Sebastian esperando por qué siguiera hablando-Ayudaras a Derek a vender las camisetas, los discos y posters, así sentirás que estás haciendo algo ¿Qué dices?

Mordiste tu labio inferior mientras observabas a los chicos frente a ti que estaban expectantes por tu respuesta, Remington sabía que aceptarlas, te conocía demasiado bien pero aun así tenía esa ligera incertidumbre de que te negaras, rodaste los ojos y soltaste una pequeña risa.

-¿Cuándo nos vamos?

-Esa es mi chica-los largos brazos de tu novio se enredaron en tu cuerpo y te atrajo hacia él posteriormente sentiste los brazos de Emerson y Sebastian rodearte también, haciendo un abrazo grupal.

Después de un rato Rem decidió que era hora de regresar a casa, ambos se despidieron y salieron de la casa tomados de la mano mientras escuchaban como Sebastian y Emerson gritaba cosas como "usen condón" y demás para molestarlos, riendo ambos subieron al auto de tu novio para después dirigirse a la casa.

Al estacionar el auto Remington no desabrocho su cinturón y bajó corriendo del auto para abrir tu puerta y ayudarte a bajar como siempre hacia, se quedó ahí sentado con las manos bien firmes en el volante.

-¿Pasa algo Remington?-Cuestionaste mirándole mientras guiabas una de tus manos a su blanco cabello, el inhalo aire profundamente y luego te miro.

-¿Estas segura de esto?-Lo miraste con una ceja en alto insegura de que responder ya que ni siquiera sabias a que se refería-¿Estas segura de pasar más de veinticuatro horas encerrada en un autobús lleno de muchos olores y hombres? No quiero sonar rudo pero nunca has estado en el medio puede llegar a hostigarte al punto de que te hartes y quieras abandonar todo, siendo sincero no estoy listo para dejarte ir, aún te necesito conmigo.

Sonreíste con ternura y tomaste en cuenta cada una de las palabras de tu novio ya que si él te lo estaba advirtiendo es porque era experiencia propia, tomaste su mano entre las tuyas y besaste el dorso de esta.

-Estoy un poco nerviosa no te voy a mentir, pero si estás a mi lado soy capaz de aguantar todo lo que se me venga encima Remington-viste como él soltaba todo el aire que había estado aguantando por varios minutos y sonreía agradecido.

-Todos los días doy gracias a lo que sea que te haya puesto en mi camino, no sé qué haría sin ti-y con esa última declaración unió tus labios con los de él y más que un solo beso lo sentiste como una promesa, una promesa de que no te iba a dejar ir y de que ambos estarían juntos a pesar de las adversidades.

Bajaron del auto y tomados de la mano comenzaron a caminar hacia la entrada de la puerta pero alguien estaba sentando en la entrada y ambos no pudieron evitar alertarse por si era un algún loco que quisiera hacerles daño.

-¿Quién está ahí?-Cuestionó Remington con voz firme y áspera, cosa que pasaba cuando se sentía amenazado.

-Vaya, por fin se dignan a aparecer, he estado aquí por más de una hora-te abofeteaste mentalmente, porque de haber regresado más tarde quizá Lex no estaría ahí esperando para darte un sermón e intentar arrastrarte de regreso a casa, esta iba a ser una larga noche.