Capítulo 13

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Triste canción



El ambiente en la torre de plata era animado como de costumbre, pero EunBi no tenía ganas de divertirse con los demás. Materializada en su forma de espectro fantasmal, miraba por una reja como el cielo se oscurecía del todo. Aunque ya no tenia un cuerpo solido ni poseía un corazón,  continuaba poseyendo sentimientos. Sentimientos que no desaparecían mientras su alma permaneciese anclada en el mundo mortal al cual estaba aferrada a causa de su muerte injusta. Sentimientos que continuarían ya  que el  alma y el razonamiento  era  el que los proporcionaba.

Y sus sentimientos le pedían que fuese a ver como estaba JiMin.

La admiración y el cariño que sentía por él iba Más allá del agradecimiento por haberla salvado de vagar sin rumbo como un alma errante. Estaba enamorada de él. Se había enamorado de él siendo una solitaria alma sin cuerpo. Una niña de catorce años que seguiría  así eternamente.

EunBi miro a sus compañeros con una sonrisa triste y  decidió salir a comprobar que JiMin estuviese bien. Ella conocía el alcance de sus pesadillas - Hoseok se había ido de la lengua con ella en muchas ocasiones- y tenía miedo de que estuviese sufriendo por ello.

- ¿A dónde vas?- le pregunto una voz amiga. EunBi se dio la vuelta y vio a su mejor amigo Seung que la observaba con un libro entre sus manos transparente. Los fantasmas no tenían la facultad para tocar cosas sólidas pero JiMin les concedía aquel poder cuando anclaba las almas en sus dominios - habíamos quedado en leer Esta obra de teatro entre los dos- le recordó.

EunBi parpadeo recordando a su promesa de tres días atrás y se sintió dividida. Quería leer aquella historia con su amigo pero el deseo de ver a JiMin era más fuerte  he intenso.

-Lo siento pero tendremos que dejarlo para otro día Seung- Se disculpó ella juntando sus manos.

Él alzó una Ceja mientras apretaba el libro contra su costado. Seung había muerto a la edad de dieciseis años en otro de los pueblos que rodeaban el valle. Cinco años atras, su padre le había propinado una brutal paliza cuando se enteró que cazaba murciélagos para el demonio del castillo maldito. A causa de una hemorragia interna, murió dos días después. Cuando su alma en pena vagaba por el bosque, JiMin lo salvó y lo llevó a la torre de plata con las mas de cincuenta almas que poblaban dicha torre.

-¿Qué es lo que tienes que hacer que es mas importante que cumplir con tu palabra?- insistió él.

Ella pensó en engañarle, pero desechó aquella falta de confianza. EunBi confiaba plenamente en su amigo aunque no le hubiese confesado aún su amor por JiMin. Aquel era su mayor secreto, algo que solo le pertenecía a ella y quería atesorarlo para siempre. La pequeña niña era muy consciente de que jamás seria correspondida.

-Estoy preocupada por el señor- le dijo a Seung.

El joven arrugó el ceño haciendo que pareciese mas adulto de lo que era.

-Yo también lo estoy- confesó Seung con una sonrisa triste- desde su penúltimo paseo no parece el mismo y ahora a traído un huésped humano, algo realmente muy estraño.

-Lo salvó de morir devorado - relató EunBi orgullosa de la bondad del señor. Una bondad que no tenía el sacerdote que provocó que muriese congelada y humillada delante de los vecinos de Banok. Si aún estuviese viva, le entrarían arcadas nada mas de recordar a KyungSoon.

Su amigo la miró con una expresión triste.

-Ojalá hubiese podido salvarnos a nosotros también.

El Castillo de las Almas (Amante Demonio)JIKOOK👣 adptDonde viven las historias. Descúbrelo ahora