Estrategia con fallos

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Cuando terminaron las grabaciones aquel día, Alejandra y César se fueron para su casa, ambos pensando en Victoria. Él en la manera de pedirle perdón y ella, en cambio, rezaba porque nada de lo que le pasaba por la cabeza estuviera ocurriendo en realidad. La llamó mil veces... nunca contestó... pero decidió cumplir el acuerdo al que habían llegado, iba a confiar en ella, a fin de cuentas llevaba años sufriendo aquel tormento y eso la convertía en una experta en soportar y manejar esas situaciones. Alejandra decidió que lo volvería a intentar al día siguiente y se acostó,con una sensación horrible, sintiéndose responsable, impotente ante un escenario que no estaba bajo su control, sabiendo que una persona a la que quería podría estar sufriendo y ella estaba allí, a salvo, sin hacer absolutamente nada.

César por su parte había llegado a su apartamento y se había encontrado con una carta al abrir el buzón, era la resolución de su divorcio!! Era libre, libre para ella, para amarla, en caso de que fuera capaz de perdonarlo, de darle otra oportunidad  para demostrarle cuán arrepentido estaba de la manera en la que la había tratado. Se metió en la cama y fue buscando en su teléfono todas las fotos que tenía de ella, pulsó el botón de "crear película" y se acostó mirando aquel vídeo donde podía ver a Victoria arreglada, lista para grabar, con su hermosa melena negra suelta, el maquillaje resaltando esos ojos felinos y los labios rojos pidiendo a gritos que los besara... En otras aparecía recién llegada al foro en la mañana, con sus gafas de sol, el cabello recogido, su ropa casual... y él, no sabía en cuál la amaba más. Había algo en común en todas aquellas fotos, Victoria siempre salía risueña, de buen humor, con esa sonrisa que le robaba el alma, que lo llenaba de alegría... Cómo podía ser tan perfecta y cómo podía desprender tanta felicidad?? Se quedó dormido con una imagen en la que estaban celebrando el cumpleaños de ella, y tenía toda la cara llena de pastel por culpa de él. A pesar de habérselo estampado en la cara, ella moría de la risa, aguantaba todas sus ocurrencias, correspondía con enormes sonrisas a sus travesuras y él, en aquel momento, sólo deseaba comer ese pastel de su boca, mezclarlo con el sabor de su piel.... Y de nuevo volvió a soñar con ella... esta vez era él el que la buscaba en el camerino y la encontraba arreglándose el pelo y vestida para montar a caballo, estaban en la locación de Las Amazonas. Sin dudarlo un segundo la invitó a montar por los alrededores de la hacienda y ella accedió sin rechistar. La ayudó a montarse en el caballo y él subió detrás, protegiéndola con sus brazos, pues sabía que no era muy buena amazona. El vaivén de su cuerpo contra él al galope hizo que su entrepierna despertara; intentó pensar en otra cosa para que aquello no fuera a más y ella no lo notara pero fue imposible. Su pelo le acariciaba la cara, su perfume en el aire, su cuerpo rozándolo... Paró el caballo frente al río y se bajó rápidamente, intentando disimular pero era tarde; cuando la tomó en brazos para ayudarla a bajar ella miró hacia su entrepierna y le sonrió. No dijo nada, sólo lo tomó de la mano y lo llevó hasta la orilla y, una vez allí, lo empezó a desnudar. Le fue desabotonando la camisa lentamente y acariciando su pecho hasta la altura del cinturón; lo desabrochó y lo dejó caer. Se quedó con la mirada fija en su erección, que ya se salía por encima del boxer. "Desnúdame" le dijo mirándolo a los ojos y él, rápidamente se deshizo de su camisa y de su sostén, y quedó embobado viendo sus senos; la atrajo hacia él, sintiendo sus pezones rozarle el pecho y su erección tocando la entrepierna de ella aún cubierta por los jeans. Dibujaba su espalda mientras lamía sus pechos con desesperación, escuchando sus jadeos, bajó hasta el ombligo y, mientras sus labios recorrían su vientre, sus manos terminaron de desnudarla. Ella salió corriendo al río y él la persiguió desesperado. Nada más entrar en el agua, ella empezó a alejarse, él nadaba más rápido para alcanzarla pero, aún dejándose el alma por llegar junto a ella, terminó presenciando cómo la corriente se la llevaba...

C: (Despertando completamente sudado) VICTORIA!!!!!!!!......Amor... no te vayas...esperaa...(Llorando como un niño) Otra vez te volví a perder...

Resiliencia TekilaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora