Capítulo 15

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La noche en aislamiento se me hizo eterna. Me levanté muy tarde. Realmente extrañaba dormir. Me vestí, cepillé el pelo y maquillé para dirigirme fuera de la habitación.
Decidí pasarme por el cuarto de Jake un momento. Toqué varias veces la puerta y nadie contestaba. Abrí la puerta y mis fosas nasales fueron inundadas por un olor masculino, estaba vacía.
Me sorprendí puesto que su habitación estaba incluso más ordenada que la mía. Pensé que parecería una pocilga, pero me equivoqué. Alguien me tocó el hombre quitándome de mis pensamientos.

-¿Qué estás haciendo aquí?- preguntó Jake confundido mientras se descolaba el pelo. Se veía realmente sexy.

-Solo venía a decirte que me iba a almorzar- sonreí intentando disimular.

-Vamos entonces- dijo cerrando la puerta de su habitación y caminado por los oscuros pasillos.

Caminamos por los jardines y notaba que todo el mundo nos miraba. Me estaba poniendo nerviosa.

-No tienen nada mejor que hacer- me dijo como si me leyera la mente. -Esto para ellos es lo más interesante que han visto en años- me miró.

-Es que todos nos están mirando, que incómodo- dije agobiada. Yo nunca era el centro de atención.

-Tu solo ignóralos, haz como si no existiesen- dijo como si estuviera acostumbrado. Le hice caso, en realidad, tenía razón.

Estábamos a punto de entrar al comedor cuando algo se interpuso en mi camino y caí brutalmente al suelo. Escuché muchas risas y de repente unas manos me levantaron. Jake. Me giré y vi a Molly riéndose, me había puesto la zancadilla. Oh no, me las pagaría.

-¿Cuál es tu puto problema?- le dije muy enfadada. Me acerqué a ella lo más posible con la intención de intimidarla.

-Siento que seas tan torpe como para caerte- se burló mientras todos los demás se reían de mí.

-Te voy a matar zorra- sonreí formando un puño en mis manos.

-Lily, eso es lo que quiere, vámonos- me dijo Jake al oído. Tenía razón. No iba a perder mi tiempo.
Me di media vuelta cuando noté que me tiraban fuertemente del pelo. Iba a asesinarla. Le golpee con el codo en la nariz y calló al suelo aturdida. Creo que le rompí la nariz, puesto que sangraba. Me posicione encima pero Jake me apartó y me sujetó.

-¿Qué está pasando aquí?- gritó la Sra. Rickingham apartando a la masa de adolescentes. En décimas de segundos, me di cuenta de que estaba acabada.

-Me ha pegado sin venir a cuento Sra. Rickingham- dijo llorando. Será falsa pensé para mis adentros.

-A mi despacho Lily, ya- me dijo muy furiosa. Era mi final.

-Jake- susurré antes de que la Sra. Rickingham me arrastrara. Supe que me había escuchado debido a su expresión. Yo simplemente lo miraba hasta que entramos al despacho.

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