No me busques

Final

El tiempo de espera por la opinión de los médicos se me hizo infinito. Estaba en un estado de ánimo nunca vivido antes... tenía hambre pero no podía pegar bocado, me daban escalofríos, sudores, temblores en las manos...

-Familia Amderson- preguntó un tal médico llamado Roger Petterson.

-Aquí- dijo mi madre en un grito desesperado.

-Mike ha sufrido graves lesiones externas e internas por lo que se encuentra en estado de coma. No sabremos cuando despertará... pueden ser horas, días, años... ni si quiera sabemos si despertará siendo sincero. Mucha suerte- dijo el médico con una mirada compasiva.

El mensaje me había roto todavía más. Mi cabeza no paró de pensar en todos los momentos que podía haber pasado al lado de mi pequeño hermanito... Me perdí gran parte de su vida y quizás ahora no volvería a verlo más. Estos pensamientos me hacían llorar y llorar desconsoladamente.

-Amor- me dijo Jake abrazándome. Como respuesta lloré en su hombro mientras acariciaba mi cabello.

-Lily, tu hermano te quería mucho. A él no le gustaría verte así- dijo mi madre.

Entré junto a Jake a la habitación donde estaba mi hermano. Le di la mano por un largo rato y besé su frente antes de irme. Antes de salir, volví mi mirada para observarlo nuevamente, era tan guapo a pesar de su estado...

-Hija, ¿dónde dormirás hoy?- preguntó mi padre.

-No lo sé, no lo había pensado- respondí sincera.

-Si te quieres quedar en casa, he preparado tú habitación- dijo mi madre con una sonrisa tierna pero a la vez triste.

-Tengo que hablar con Jake- dije separándome de ellos y encontrándome con Jake fumando un cigarrillo en las puertas principales del hospital.

-Jake- dije quedando a su lado y quitándole su cigarrillo para darle una larga calada.

-¿Qué pasa?- dijo quitándome el cigarro (decía que fumar era malo para la salud, sin embargo, él lo hacía)

-Creo que pasaré la estancia de mi hermano en el hospital en casa de mis padres- dije con un tono suave esperando su reacción.

-¿Cómo? Lily, no sabes cuándo despertará tu hermano- dijo sosteniendo mi cara.

-Lo sé Jake, es sólo que necesito estar con mi familia para apoyarnos- dije separándome.

-Vale, si eso es lo que quieres por mi parte no hay problema. Pero... ¿nos veremos a menudo verdad?- dijo mirándome.

-Jake escuchame antes de decir nada. Creo que es mejor tomarnos un tiempo. Estoy totalmente podrida por dentro ahora mismo y sé con toda mi alma que no podría hacerte feliz cuando yo no me siento bien, es injusto- dije empezando a llorar

-¿Tomarnos un tiempo? Lily... ¿ya no me amas?- dijo el tirando de su cabello por frustración.

-Jake por favor, claro que te amo. Por eso mismo tomo esta decisión tan dura- dije.

-Creo que estas exagerando Lily, no creo que tomarnos un tiempo sea la solución para que tu hermano despierte- dijo pronunciando esas palabras tan duras.

-¿Es que no lo entiendes? No puedo estar contigo siendo feliz mientras mi hermano está en coma en este maldito hospital joder- dije gritando.

-¿Eso es lo que quieres? ¿Dejarlo? Si crees que es la solución me iré, pero antes déjame decirte mi opinión. - dijo frustrado por mi decisión. -Creo que tu decisión es absurda, te alejas de mi lado porque según tu no me puedes hacer feliz. Lo que no entiendes es que sólo tu presencia alegra mis días... yo pasé por lo que estas pasando ahora y tomé la misma decisión, créeme Lily, es mejor superar esto con alguien a tu lado- dijo. Sus palabras me habían hecho pensar, pero no cambié de opinión.

-Jake entiendeme por favor, no tengo ganas de nada, no tengo ganas de salir, de comer, de hacer cosas... mi vida ahora se tornó oscura y lo último que quiero es arrastrarte conmigo, te quiero demasiado como para eso. Con todo el dolor de mi corazón, adiós Jake- dije llorando y saliendo corriendo dentro del hospital. En el fondo, tenía la esperanza de que corriera tras de mi, pero no fue así. Creo que le dejé muy claras mis intenciones.

Fui corriendo en busca de mi madre, necesitaba consuelo.

-Mamá...- dije llorando casi sin poder respirar.

-Lo he oído todo hija...- dijo acariciando mi pelo. Como respuesta lloré aún más. -¿Estás segura de que es lo correcto?- preguntó mi madre.

-Mamá, no estoy segura de nada maldita sea- contesté frustrada.

-Él te amaba, lo único que quería era ayudarte y estar a tu lado en estos momentos tan duros- dijo mi madre. ¡Que idiota soy! Había dejado ir al único apoyo de mi vida, a alguien que me demostraba que me quería todos los días... salí corriendo hacia fuera con la esperanza de verlo ahí, pero simplemente no estaba.

Mi vida había pasado de ser de color rosa a ser negra como la noche. Lo había tenido todo y ahora no tenía nada. Pasaba mis días yendo al hospital, no salía de mi habitación, apenas comía, no visitaba a mis amigos... pasaron así los días hasta irme a las prácticas. No quería ir, pero mis padres me obligaron con la excusa " Mike querría que fueras"... respecto a Mike, no había mejorado, seguía en coma... también seguía sin saber nada de Jake, eso me mataba por dentro como si mil cristales estuvieran clavados ahora en mi corazón.