Juego virtual.

Capítulo 27: Pequeña niña.

Detiene el coche de un frenazo y el padre de la joven se da la vuelta y empieza a golpear a su hija, muchas veces en diferentes partes.

La niña siente como su vida va cayendo, la sangre poco a poco comienza a cubrir su cuerpo mientras ve la mirada de su padre, esos ojos que tanto deseó que la vieran llenos de amor pero que siempre hubo odio en ellos y ella ahora se pregunta "¿cual fue su error? quizás haber nacido". 

Escucha las bocinas de los carros quejándose pero nadie viene a ayudarla. ¿Quien iba a ayudar a una niña a la cual ni siquiera sus padres la quieren? 

Otro golpe en el estomago que le saca el aire por unos segundos, intenta respirar pero ahora al hacerlo siente como si el aire estuviera combinado con sangre.

Sigue escuchando las bocinas de los carros, ¿por qué nadie la viene a ayudar? vuelve a preguntarse la niña. 

Otro golpe en la cara la ciega, necesita gritar, luchar por su vida pero no esta tan segura de querer seguir viviendo ya que quizás es hora de que vaya a descansar. No importa que no haya llegado a sentir una felicidad completa, ya está cansada y quiere rendirse pero no puede aunque quiere.

¿Que la retiene aquí? su abuela murió, su madre no cambia por completo y Yahir... ella ni siquiera está segura de si es quien dice ser. Y de repente recuerda lo que un día él le dijo "No se cuales son tus problemas pero no dejes de luchar y si crees que a nadie le importas recuerda que aquí estoy" 

Ella no siente que sea un motivo suficiente pero de repente se da cuenta de algo, ¿por que tiene que darle lo que él quiere? en cambio, debe demostrarle que ella merece y puede ser feliz.  Intenta gritar pero no le sale la voz, vuelve a intentarlo pero tampoco.

—Ayuda—consigue decir pero fue más bien un susurro, siguen los golpes seguidos de su llanto—. ¡Ayuda!

Grita varias veces pero aún nadie viene, su llanto se hace cada vez mas fuerte, ella quiere vivir y ser feliz y aunque desea luchar ya su cuerpo no se lo permite.

Ya no siente el peso de su padre, ¿estará muerta? pero no, alguien por fin se lo ha quitado de encima.

—Todo estará bien, nena—oye que le dice un señor al cargarla, ella ve la preocupación reflejada en sus ojos, sus parpados comienzan a pesarle obligando a que cierre los ojos por unos segundos pero el señor la mueve —. No te duermas, lucha. 

¿Por qué suena tan fácil esa palabra? saber que es tan difícil no rendirse ante las adversidades.

Lo ultimo que oye la niña son las sirenas.

Por otro lado, el padre lleno de odio no es capaz de aceptar que no hizo lo correcto. Él desea seguir golpeando a esa niña así que consigue soltarse y corre hacia ella pero la ve en la ambulancia, todos los paramedicos intentando que su hija reaccionara. Por fin se da cuenta de su error y se pregunta "¿en que se convirtió?"

Se dirige donde su hija, empuja a los paramedicos y llora pidiendo a gritos que su hija siga viviendo y que sea feliz. La policía actúa rápidamente y lo alejan de su pequeña hija, definitivamente no lo veremos por mucho tiempo.

Mientras tanto en la casa de ellos, esta la madre de la niña preocupada aunque no se puede ni imaginar la noticia que le espera al contestar la llamada de su hermana.

—Ya la encontramos, está en el hospital—le informa y ella comprende todo enseguida.

Ella comienza a sentirse culpable, el peor enemigo de un individuo es uno mismo y en ese momento la madre de la niña deseó hacer todo lo que antes no hizo por tenerle amor al padre de su pequeña hija. 

No hizo nada por cuidarla, solo se quedó en silencio, mendigando amor y olvidando lo que debió ser más importante que su propia existencia.