Capitulo: 1

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Se podría decir que todo empezó cuando tenía 16 años. Era viernes y hacía mucho sol y calor pero yo no lo notaba (no noto la temperatura de las cosas pero si la percibo). Estaba en una esquina del patio del instituto sentado y rompiendo una hoja cuando empezó a armarse revuelo en el  centro del patio. Me acerqué a mirar por curiosidad y puro aburrimiento y vi a dos chavales dentro del corrillo que habían formado casi todos los alumnos del patio. Los dos eran de mi clase, uno se llamaba Andrés, era uno de los chicos mas listo del colegio (de estos que sacan 10 en todo), era bajito y flaco y llevaba puesta una camisa a rayas y unos chinos con unos náuticos; estaba tirado en el suelo sangrando por la nariz, con lagrimas en los ojos y las gafas rotas mientras el otro chico le gritaba. Este se llamaba Mateo y había repetido curso varias veces, así que era mas mayor que el resto de la clase. Tenia fama de prepotente y de abusón (de estos que les haces caso o te dan una paliza). Era un tío bastante grande ya que media 1'95 y pesaba mas de 100 kilos pero nadie se metía con el porque... bueno porque si lo hacías te daba una paliza.

-¿Que pasa? - le pregunte a una chica que había a mi lado.

- Dicen que Andrés no dejo copiar a Mateo en un examen- respondió sin ni siquiera mirarme.

Le di las gracias y empecé a apartar gente para entrar en el circulo. Cuando por fin llegué al centro le dije a Mateo:

-Eh, déjalo en paz, ¿quieres?

Se giró y me miró con aires de superioridad mientras respondía:

-¿ O sino que?

-En serio, déjalo en paz.

Se rió y después dijo a la vez que me pegaba un puñetazo:

- Que te jodan.

El puño me golpeo en la mejilla izquierda y me hizo retroceder dos pasos, escupí sangre y maldije por lo bajo, me había mordido la lengua. El dolor era lo que menos me molestaba, había pasado por cosas peores. Al ver que no me acobardaba Mateo me lanzo otro puñetazo pero esta vez lo bloquee con la mano izquierda.

-Eso no ha sido buena idea- dije haciendo que doblara el brazo hacia él para después hacer un giro brusco a la derecha, rompiéndole así el brazo, que crugio como una rama seca al romperse. Se puso a gritar y lo tire al suelo, despues me acerque a Andrés y le di la mano para levantarlo ante las atónitas miradas de mis compañeros.

-¿Estás bien?- le pregunté mientras se levantaba.

-Si si, gracias- dijo en un tono apenas audible mientras recogía sus gafas y se iba con cara de estar aun en shock.

Empezó a sonar la campana que nos indicaba el fin del recreo y todo el mundo salio corriendo a la parte del patio que le correspondía a su curso, unos con deseos de comentar lo que había pasado y otros que sencillamente querían alejarse de Mateo y de mi. Yo me diriji con calma al lugar en el que esperaba siempre, cerca de la gente de mi curso pero no con ellos. Mientras esperaba me di cuenta de que todo el mundo me miraba de reojo. Maldije en silencio, no me gustaba llamar la atención y ni siquiera sabía porque había ayudado a un chaval con el que no tenía relación.

El resto del día transcurrió con normalidad. No hubo castigo alguno por romperle el brazo a Mateo, únicamente una pequeña charla con el director, que estaba mas preocupado de acabar su crucigrama de que volviera a hacer algo así (ventajas de los colegios en los que los profesores pasan de todo). El instituto estaba cerca de mi casa así que no tardé mucho en llegar. Cuando entre me asaltó el olor a tabaco y a alcohol (al que ya estaba acostumbrado) y vi a mi padre inconsciente en el sofá (cosa a la que también estaba acostumbrado). Entre a la cocina y me prepare un bocadillo, después me fui a mi habitación y empecé a preparar la bolsa para el fin de semana. La llené con ropa para todo el finde, un bañador, gel, champú, mis gafas de bucear (por si alguien no lo nota pretendía ir a nadar), una cámara de vídeo y mi portátil. Una vez lo cogí todo salí otra vez del piso con la idea de pasar un fin de semana tranquilo y sin sorpresas sin saber que iba a conocer a alguien que me iba a cambiar la vida. 


Ascua (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora