Grand Theft Auto: The Big One

26. Interrogatorio.

Evan despierta en una sala de interrogatorio, aturdido, están los nueve hombres, inmovilizaron sus pies y manos, ninguno está armado ni herido o exaltado, mira a su alrededor, las paredes blancas, las luces amarillas no revelan algo de su paradero tampoco el espejo unidireccional en la pared a su izquierda.

-¿Y la mujer que los mandó?, ¿no debería estar aquí?

-Queríamos hablarte primero, – Dice Michael. – la conocemos bien y si algo sabe esa mujer es sacar la verdad pero también te conocemos bien y podrías resistirlo.

-¿De qué quieren hablar?

-¿Dónde conseguiste secuaces? Teníamos a la mayoría de la ciudad, eran demasiados.

-Sí pero no de todo el mundo, debo agradecerles de hecho por conseguir que King Courtney viniera, te manda saludos, Mike...

-¿Quién es ese King Courtney? – Miran a Mike para que explique, encorvándose de hombros, empieza.

-King Courtney es un tipo que me engañó con las muertes de mis dos amigos cuando estaba en Liberty City, terminé dejándolo herido antes de irme.

-¿Qué puedes decirme de Umberto Robina? – Pregunta Evan, girando la cabeza hacia Mike. – Sólo bromeo, les contaré, supe que Courtney estaba en Los Santos y quise negociar con él, me puso una prueba...

-Le gusta hacer eso. – Interrumpe Mike con fastidio. – Yo tendría cuidado de que te engañe con tu padre.

-Eso es una buena idea, espera. – Trevor sale de la habitación, regresa 30 segundos después con el señor Clay atado y con los ojos vendados, Evan pierde la sonrisa. – ¿Qué pasa, Evan? Tú fuiste quien me dijo que no estabas en malos términos con tu viejo.

-No significa que sea sencillo verlo así.

-¿Evan?, ¿eres tú?

-¿Cómo es que conoce el sonido de tu voz? Tenía entendido que no se habían visto desde que te dejó en Australia, ¿qué no nos estás contando?

-¿Les dijiste que te abandoné en Australia?, ¿ahí es donde has estado cinco años?

-¿Cinco años? Oh, jo, jo, jo, Evan, pequeño granuja, veo que inventaste una buena historia pero eso quiere decir que lo que trataste de enseñarme era completamente mentira, quisiste encubrir tus dotes hereditarios con una trágica historia de fondo y una superioridad moral que justifique tus acciones pero esta es la verdad: Nosotros somos mejores que tú, cada hombre en esta habitación ha luchado y aceptado sus demonios, sus pasados, no nos ocultamos detrás de una historia ficticia para obtener una sensación de falsa libertad... Excepto Michael...

-¡Oye!

Trevor arranca la venda de los ojos del padre, poniéndolo cara a cara con su hijo, no compartían mismo semblante, el señor Clay era más regordete con el cabello, sobreviviente de la vejez, castaño y los ojos muy rasgados.

-Señor Clay, ¿algo que decirle a tu hijo después de tantos años?

-¿Quién es usted?, ¿qué hacemos aquí?

-Usted está aquí por las mentiras de su hijo, dicho esto, añadiré que su hijo es un verdadero prodigio. – Michael aparta a Trevor de forma desapercibida. – Organizó toda una treta para hacerse con nuestros historiales que pondrían en riesgo no solo nuestras vidas sino las de nuestros seres queridos, ya mató a uno de nuestros amigos más cercanos, ¿qué querría decirle a su hijo ahora?

-Evan, ¿lo que dice este hombre es cierto?

-No tiene sentido que te mienta, estamos esposados en una ubicación desconocida y la mirada de estos hombres no es más que odio, rencor y fastidio, sí, padre, es verdad.

-Pero, ¿por qué? Te lo di todo y tú... A ti te conozco – Dice, al ver a Franklin cuando gira la cabeza en negación. – Eres el joven que fue a mi oficina antes de que me secuestraran, ¿eras parte de esto?, ¿qué buscan de mí? Tengo dinero, puedo pagarles si nos liberan, mierda, les pagaré si me dejan unos minutos con él.

-Temo decirle, Clay, que su secuestro era para provocarlo, entré a su oficina para plantar un virus que nos ayudaría a robarle su fortuna, básicamente ya no es un multimillonario.

-¡Basta! Esto no es algo que tenga que ver con lo que pasa aquí, quieren saber dónde están sus archivos, bueno, no les diré a menos que suelten a mi padre... ¡Ahora!

-Evan, nunca te habíamos visto perder el control de esa manera, parece que estás tratando de alejarte de tu padre pero no pedir por la devolución de su dinero, sea lo que sea que te haya hecho, no tiene que ver con su empresa o tiene todo que ver, ¿qué será? – Niko toma el control de la situación. – Reconozco un problema familiar en cuanto lo veo, habla.

-No sacarás algo de esto, Bellic, ni tu entrenamiento o tu relación con Karen harán que hable.

-No busco nuestros archivos, Clay, busco la razón de que tuerzas imperceptiblemente la boca cada que escuchas tu apellido.

-No hablaré, puedes matarme.

-Y todos aquí queremos hacerlo, créeme, queremos respuestas, creo que no las conseguiremos de ti, ¿me ayudan sacándolo de aquí? – Huang arrastra la silla fuera del lugar hasta otra sala de interrogatorio.

-¿Qué?, ¿a dónde lo llevan?, ¿qué van a hacernos?

-Explíquenos lo que pasó entre su hijo y usted.

-Si quieren que colabore, prométanme algo, liberen a mi hijo.

-No podemos, incluso si quisiéramos o tuviéramos lo que buscamos, es un trabajo más y responderá por sus actos.

-¿Para qué organización trabajan? Estoy seguro que retener en contra de su voluntad a dos personas es merecedor de una demanda.

-Ok, ¿con qué dinero pagará el abogado? Responda.

-Hace cinco años, ofrecí un puesto a Evan en la empresa, como ya vieron tiene talento en la computación y en muchos campos más, sería un excelente socio pero tuvimos una discusión, no quería estar ahí, el chico recibió educación privada, adelantaba en cursos que no debían ser adelantados, cambiaba mucho de tutores porque pronto los dejaba atrás, un día nada más desapareció con suficiente dinero para mantenerse cuánto quisiera, un chico listo podría incrementar el dinero así como desaparecer del mapa, borró los registros de su existencia, dejé de buscarlo después de un año. – Luis alza la mano para pedir la palabra con fastidio, haciendo a un lado a Niko.

-Está obsesionado con los criminales de poca monta que se convirtieron en peces gordos, nosotros, ¿alguna idea de por qué?

-Veía todo el tiempo programas y noticias sobre los delitos de la ciudad, investigaba demasiado sobre los crímenes, en las noches veía videos sobre asesinos, más de una vez recibía facturas de tiendas de armas.

-¿No pensó que era extraño?

-Bueno, sí, pero nunca vi las armas, jamás se metió en problemas ni en peleas, no quise involucrarme demasiado en sus cosas por miedo a alejarlo.

-Y ahora mírese donde está, bueno, ya no tengo preguntas, ¿ustedes?

Saliendo todos de la sala, por encima de los gritos de Clay, contactan a la IAA para que se lleven bajo custodia a Evan, Karen no responde la llamada pero otro agente del mismo nivel realiza la transacción.

-Agradezco con su contribución, caballeros, nos encargaremos desde aquí con el señor Clay, no se preocupen.

-Oiga, agente secundario, – Trevor no pierde la oportunidad. – los archivos que robó nos fueron prometidos por la directora Black para que los destruyéramos.

-La directora Black fue trasladada debido a una orden superior, no estará en la ciudad hasta nuevo aviso, sus archivos pasarán a ser evidencia y el dinero desfalcado será confiscado. – Los agentes dejan la residencia en diez minutos con todo lo incautado, los criminales quedan sin secuestrados, sin dinero y sin archivos clasificados, Lester llega, molesto y, tras una ferviente discusión entre ellos que casi termina en un tiroteo, Michael dice, cansado, molesto y tenso.

-Debemos sacar a Evan.