Prohibido Enamorarse

Capitulo 61.

                      Martes en la tarde/5:00 p.m.

-"Es el fin. Te destruiré sin tocarte, iré por tus lados, acabaré con tus extremidades".- Leyó Lana en voz alta. Estaba ya en casa. Esa era la frase que había encontrado en el libro, la había apuntado en una hoja para que fuera mas fácil manejarla.- No entiendo lo último ¿No te va a tocar pero acabara con tus extremidades?

-Estudie la frase toda la tarde, dice que ira por mis lados y acabara con mis extremidades, tal vez se refiere a algo que siempre esta a mi lado, que es como insepara... ble...

Entonces guarde silencio, los ojos de Lana se encontraron con los míos, estábamos pensando lo mismo.

-Va a acabar con Daniel.- Dijo Lana, preocupada.

Entonces logre unir algunas piezas.- Aspen fue quien hizo que Daniel quiera irse de la escuela, el hizo algo. Tengo que ir a hablar con Tyler, he intentado contactarme con el por teléfono pero no entra mi llamada.

-Te acompaño.- Dijo una decidida Lana.

-No.- Conteste sin titubear.- No quiero que te pase nada mas, Lana, has recuperado ya tu habla, no quiero que te pase algo mas grave, te necesito aquí, por favor.

-Nena...

-Lana, hazme ese favor, iré yo sola.

Lana suspiro.- Esta bien, Christian, pero mantente en contacto, ¿Sí?

-Prometido.- Dije levantándome del sofá en donde ambas estábamos sentadas, guarde mi celular que estaba en la mesita de estar junto con mi monedero, al acercarme a la puerta tome mis llaves que estaban colgadas y las guarde en la chaqueta de cuero que traía puesta ese día, junto con unos pantalones negros ajustados y una playera gris sin estampado.

-No tienes que tardar, recuerda que hoy en la noche es la fiesta de tu mejor amiga.- Dijo Lana, me alegra que no haya perdido su característico sentido del humor.

-No lo haré, adiós.- Salí del apartamento y baje las escaleras con prisa, presionando repetidas veces el botón rojo de mi auto para que al llegar abajo estuviera ya ahí esperándome. Y así fue.

Me apresure a subir y arrancar mi auto en dirección a casa de Tyler, llegue y pare el auto frente a esta.

Baje y camine hasta el porche de la casa, toque repetidas veces, nadie abría. Comencé a extrañarme ya que Tyler siempre estaba en su casa, y no eran horas para que estuviera dormido. Decidí girar la perilla para intentar entrar por mi propia cuenta.

La puerta se abrió, pero no completamente, algo la estaba atorando.

Pase por la franja que había abierto entre la puerta y el umbral de esta y tuve que sostenerme de la pared para no caer de la impresión al mirar en dirección al suelo.

Lo que estaba deteniendo la puerta era el cuerpo de Tyler.

-¡Dios mío!.- Mis manos se encontraron en mi rostro, ahogando los sollozos que salían de mi boca, me hinque y busque pulso en su cuello.- No puedo creerlo... ¿Quien te hizo esto?

Entonces Tyler tosió.

-Tyler, Tyler, ¿Me escuchas? Quédate conmigo, llamare a alguien, por favor quédate conmigo.- Dije tartamudeando un poco, saque el celular con manos temblorosas e intente marcar el numero de emergencias.

-N... No.- Dijo Tyler con mucho esfuerzo.- Ve con Daniel, has...

-¿Que haga que? ¿Tyler?

-Vete.- Fue su ultima palabra antes de su ultimo aliento, sus ojos ya no brillaban, estaban vacíos, sin rastro de vida, los ojos que me enseñaron casi todo lo que ahora domino de mi don estaban apagados.