Capitulo 28
Yo me undi en la silla reclinable.
-Bueno.- Hablo Daniel.- ¿Que es un bloqueo?
-Su don se concentra en el cerebro, para ser mas exactos en la parte que controla los recuerdos y/o los pensamientos. En su mente tiene un recuerdo que no le permite mostrar ese don.
-Oh ya.- Dije enbobada por la explicacion.
-¿Puedes hacer algo mas que ver el futuro?.- Me pregunto Ty.
-Hmm, hace unas semanas pude levantar mi celular con mis ojos.- Dije.- Y desde ese momento tambien puedo mover cosas con los ojos, mire.- Dirigi mi vista hacia un plato de cereal a medio comer que habia en la mesa de la cocina; junto a donde estabamos. La cuchara con algo de cereal comenzo a flotar y llego hasta mi boca. Mmm, es un buen cereal.
-Esta rico.- Dije con la cucharada de cereal aun en la boca.
-Eres única.- Dijo Daniel riendo un poco.
-Perdonen, estaba desayunando cuando llegaron.- Se disculpó.
-Ay ni se preocupe.- Dije quitada de la pena, con un ademán de la mano. Daniel me volteo a ver con mirada penetrante, aunque sabía que bajo esa mirada había cierto toque de burla.- Digo, no se mortifique, Sr. Castellan.- Voltee a ver a Daniel y le enseñe la lengua.
-Bien.- Dijo Tyler.- Puedes ver el futuro y puedes hacer que las cosas cambien de lugar. ¿Tu don es hereditario?
-Si, no recuerdo que mis padres me enseñaran alguna vez sus dones, jamás los vi hacer algo que no hicieran los demás padres, ya sabe, comprarme galletas, cocinar, llevarme al parque...- Sin darme cuenta una pequeña lagrima había salido de mis ojos y estaba recorriendo mi mejilla, rápidamente la quite y volví a mi charla.-Pero tengo entendido que esto, lo de los dones, me lo heredo mi madre.- Dije y me puse un mechon de cabello detras de la oreja.
-Aguarda.- Tyler tomo mi mano y aprecio el tatuaje que me salio en el hospital.- ¿Eres una Absoluta?.- Parecia aterrorizado y consternado.
-Hmm, si, bueno, para ser mas exactos soy hija de 2 Absolutos y...
-Fuera de mi casa.- Susurro en voz casi inaudible.
-¿Perdon?.- Dije.
-Fuera de mi casa.- Dijo.
-Pero tio, Christian necesita tu ayuda.- Dijo Daniel.
-¡Pero nada!.- El tio de Daniel grito, tanto que se me erizo la piel, me pare de un salto de la silla reclinable y fui a abrazar a Daniel, cuidando el brazo momificado.
-¿Que tiene que sea una Absoluta? O sea, no es un crimen.- Le dije, estupido valor.
-¡Callate, estupida asesina!.- Tyler me solto una cachetada, las lagrimas salieron de mis ojos, me frote la mejilla.
-No la vuelves a tocar, te quedo claro, Tyler.- Daniel engroso la voz.
-Váyanse.- Dijo abriendo la puerta de la casa.- Y no quiero que vuelvan.
Me separe de Daniel y sali por la puerta, el me siguio, no sabia donde estaba asi que solo camine hacia la acera, bajando las escaleras de la puerta principal.
-Christian, perdoname, no sabia que haría eso...- Me dijo Daniel llegando detras de mi.
-¿Que tiene de malo que sea lo que soy?.- Le dije sin voltearlo a ver.- Mis padres no le hicieron daño a nadie.
-No es malo, a unas personas les sorprende, solo eso.
-¿Y porque me dijo asesina y me cacheteo?.- Dije sin voltear a verlo aún.- ¿Nada más por gusto?
-No lo se, Christian, pero creeme que no se va a quedar asi.
Yo voltee a verlo, tenia mi mejilla roja y estaba saliendo sangre de mi nariz.
-Dios mio, Christian, ¿Quieres que te lleve al hospital?.- Daniel saco un pañuelo de la sudadera.
-No inventes.- Dije y me puse el pañuelo en la nariz.- Acabo de salir de ahi.
-Bueno, vamos a tu casa.- Me dijo.
Asenti y saque del bolsillo de mi chaqueta las llaves de mi auto, Daniel me vio feo.
-¿Acaso creias que me iba a ir caminando? Ni siquiera se en donde estoy.- Dije y presione el boton que traia mi auto a donde estaba. En pocos minutos llego.
-¿Algun dia me acostumbrare a esto?.- Pregunto Daniel rodeando el auto para entrar en el lugar del copiloto.
-Espero que si, Sr. Castellan.- Dije entrando al auto y disponiéndome a manejar para llegar a mi casa de una buena vez.
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Prohibido Enamorarse
Teen FictionChristian Difaglio, hija de una pareja millonaria con franquicias bancarias en todo el mundo, es una joven normal, con una inteligencia muy grande pero sin el amor de sus padres fallecidos cuando ella acababa de cumplir los 12 años. Un suceso en l...