—Ra Young Mi y Park Ji Sung, acudan al despacho del director.
En cuanto escuchamos nuestros nombres por el megáfono ocurrieron dos cosas en el aula: primero nos miramos como si nos preguntáramos que habíamos hecho y segundo, la gente nos miró como si nos hubiéramos metido en un buen lío.
La profesora nos dio permiso para levantarnos y salimos del aula. El camino fue silencioso salvo por las veces en las que intentamos adivinar el motivo por el que nos habían llamado o cuando comentábamos algo sobre las clases. Cuando llegamos, di un par de golpecitos para que oyera el director que ya habíamos llegado y Jisung me abrió la puerta para que pasara antes que él cuando nos dejó pasar. Se le veía muy asustado, como si recientemente hubiera hecho algo muy malo.
Cuando entramos a la sala vimos a nuestro profesor de matemáticas y al de educación física. Sinceramente, no tengo ni idea de que va a pasar, pero seguro que no es algo bueno.
—Hola chicos, podéis tomar asiento. —nos sentamos delante del escritorio del director y esperamos a que siguiera hablando— como sabéis, solo os queda un año para que os graduéis y no sabéis las ganas que tengo de que alcancéis vuestros sueños. —mentira, él solo quiere que este sitio siga siendo tan prestigioso como siempre y poder seguir con su fábrica de dinero— Para ayudaros en eso, he estado revisando los expedientes de todos los alumnos que se graduarán este año y hemos pensado que, teniendo en cuenta vuestras notas, deberías ayudaros mutuamente. Tú, Jisung, ayudarás a Youngmi en todo lo que involucre deportes, mientras que tú le enseñarás inglés. Los dos sois los mejores y los peores en esas materias y por eso sería conveniente que hagáis lo que os proponemos. —hizo una pausa y se acomodó en su asiento antes de continuar— Y bien, ¿aceptáis?
Nos quedamos en silencio, como si esperásemos que uno de los fuera lo suficientemente valiente como para rechazar o aceptar lo que nos decía. Pero no dijimos nada, miré a Jisung y le pedí al director que nos dejara salir 5 minutos para discutirlo.
—Bueno... ¿tú que piensas? —le pregunté después de cerrar la puerta.
—Creo que deberíamos aceptar. —dijo rápidamente— Además no hay nada malo en eso, si no queremos seguir trabajando juntos se lo decimos y ya está y si nos obliga a continuar fingimos que nos ayudamos aunque no lo hagamos y problema resuelto. Tampoco quiero que estemos en su punto de mira solo por no hacer lo que nos pide. ¿Te parece bien?
—Ehm... Podríamos intentarlo. —dudé un poco pero al final acabé aceptando con más confianza— Sí. Hagámoslo.
Entramos en el despacho del director y le dijimos que aceptaríamos, solo si nos dejaba dejarlo si no nos llevábamos bien.
A ver, él y yo no nos llevamos mal pero tampoco es que seamos los mejores amigos del mundo. Simplemente nos soportamos.
—Bueno, entonces supongo que estaréis preparados para empezar. A partir de la próxima semana tendréis la sala del final del pasillo de la segunda planta para vosotros solos. Tendréis que estar allí todos los días de tres a cuatro de la tarde y luego de cuatro a cinco el gimnasio. ¿Entendido?
—Entendido. —respondimos los dos al unísono.
Salimos de su despacho y cuando llegamos a la clase todo el mundo nos miraba como esperando que les dijéramos lo que nos había pasado, pero no dijimos ninguna palabra y nos sentamos en nuestros respectivos asientos.
A parte de eso, el día transcurrió como siempre. Salí del centro y esperé con mi móvil a que salieran mis amigas. Hasta que llegó Jisung.
—Hola, —dijo en un tono bastante bajito— siento molestarte pero sería raro que me dieras clases sin conocerme.
—Sí, eso mismo pensé cuando aceptamos su propuesta. ¿Alguna idea?
—He pensado que el lunes que viene, cuando empieces a enseñarme inglés, hagamos algo para conocernos mejor. ¿Te parece bien?
—Sí. Claro.
Miré detrás de su hombro y vi a mis amigas acercándose a donde estaba, pero se pararon cuando me vieron con Jisung. Ahora empezarán a emparejarme con él y tendré que vivir con ello y las historias que empezarán a inventarse.
—Me tengo que ir así que ya nos veremos. Adiós. —se despidió con la mano y le vi alejarse hasta que mis amigas llegaron.
—Tú y Jisung. —dijo Sunhee muy emocionada— Yo lo veo.
—Yo también. —la apoyó Jisoo.
—Si que estáis desesperadas porque salga con alguien. —dije soltando un suspiro— En fin, vayamos a comer, esta semana será la última que coma con vosotras.
A/N
Es el primer fanfic que escribo así que por favor disculpadme si es corto o aburrido. Nos leemos pronto. 😊😊
*EDITADO*

ESTÁS LEYENDO
PUEDO AYUDARTE- P.JISUNG
FanfictionRa Young Mi: Chica normal. Vida normal hasta que en pieza a juntarse con Park Jisung, entonces se vuelve una vida demasiado dramática para ella. Park Ji Sung: Chico normal. Vida, bueno, Se podría decir que normal A pesar de conocerse desde hace año...