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No me acordé de lo que Haechan me dijo la noche anterior hasta que llegó la clase de educación física.

-Muy bien chicos, hoy es el gran día. -Dijo Yuta con una gran sonrisa que desapareció rápidamente- Vais a ganar contra el otro equipo. No, no vais a ganar, vais a machacarles.

Tenía miedo, seguro que si lo hacíamos mal nos acabaría gritando y conociéndome, no le daría a ningún balón.

-¿Estáis listos para ganar?

-¡Sí! -gritamos todos al unísono.

-Pues vamos. Venga, a calentar.

Cuando acabamos el calentamiento el partido comenzó, yo era defensa así que era suficiente con presionar a los del otro equipo para hacer que tiraran mal y dar un par de patadas y con suerte pasárselo a alguien de mi equipo.

Después de media hora en la que nadie metió ningún gol, Yuta comenzó a gritar.

-Moveos, así no conseguiréis nada. Jibeom, corre más rápido. Youngmi, patea con más fuerza. Chan, haz algo.

Siguió gritando así hasta que llegamos a la mitad de la segunda parte cuando Chenle consiguió meter un gol y fuimos ganando uno a cero.

-Así se hace, Chenle sigue así y el resto seguid su ejemplo.

Sí, Yuta, Chenle es genial y lo que tú digas, pero el fútbol no es su fuerte y fue bastante obvio que metió gol porque al portero del otro equipo se le resbaló el balón y Chenle metió la pierna. Obviamente eso fue algo que Yuta pasó por alto.

-Pasádselo a Youngmi -gritó Yuta- Está sola.

Alguien pateó el balón y como ahora yo estaba al lado de la portería contraria me la pasaron. La intercepté y metí gol, pero alguien del otro equipo que trató de evitarlo corrió y me placó sin querer. Acabé en el suelo con la rodilla sangrando y dolor en la muñeca.

Cuando acabó el partido Yuta desinfectó la herida y me mandó a la enfermería a por hielo, Jisung me acompañó.

-En cuanto vea a Jaeseok te prometo que...

-Tranquilo, me tiró sin querer. Todo el mundo puede hacerse daño.

-Lo sé -dijo calmado- pero no me gusta verte herida.

-Tampoco estoy herida, creo que dolió más cuando Yuta desinfectó la herida que cuando me caí. Además, si miras el lado bueno, ganamos y Yuta no podrá echárnoslo en cara.

-Tienes razón.

Toqué la puerta de la enfermería y cuando la enfermera nos abrió le pedimos hielo.

-Muchas gracias -dije colocándolo en mi muñeca.

-De nada, trata de no moverla y si te sigue doliendo puedes venir aquí y te improviso una venda por al médico. -se dirigió a Jisung- Si ves que intenta hacer algún movimiento brusco, evítalo ¿vale?

-Está bien, muchas gracias.

Hicimos una pequeña reverencia y salimos de ahí.

-¿Te duele mucho? -preguntó preocupado.

-No, solo me molesta cuando intento moverla pero quitando eso estoy bien. -sonreí y me llevé un suave golpe en el hombro- Ay.

-Sí necesitas algo avísame o avisa a Renjun que está al lado tuyo. ¿Vale? -Asentí y le di un beso en la mejilla, me parecía tierno verle tan preocupado a pesar de que no me había hecho daño.

Entramos a clase y vi a Renjun preocupado.

-¿Estás bien? ¿Duele mucho? Vi que Yuta te curó ¿dolió?

PUEDO AYUDARTE- P.JISUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora