daddy desires ◜ဗ◞ yoonmin

20

—¿Qué clase de relación tienes con Min YoonGi, niño?—Con su derecha sostenía los rosados cabellos de el pequeño, quién sollazaba y sorbía su nariz.

—N-No tengo ningún tipo de relacíon... Con... É-Él..

—Creí que ya habíamos dejado esto en claro.—El castaño soltó sus cabezas, con fuerza llevo su pie a el estómago de JiMin, haciendo que comenzará a tocer—Te vuelvo a preguntar, ¿Qué tipo de relación tienes con él?

—N-Ninguna...—Cerró sus ojos, preparándose para el próximo golpe.

(....)

YoonGi se encontraba sentado en silencio, escuchando lo que le decían JungKook y TaeHyung.

—¡L-Lo sentimos YoonGi, en serio!—Decía en un tono de desesperación el pelirrojo—¡T-Tuvimos que ir al baño!

—TaeHyung, al menos de que ustedes sean un maldito grupo de mujeres, ¿No pudo ir uno primero ó entrar los tres? Les pedí una maldita cosa, la cual fue que no dejarán a JiMin.. Y..—Suspiró, respiró, tomó aire, inhalo, como quieran llamarle, tratando de dejar salir un poco de su enojo—¿Ni siquiera eso pudieron hacer? ¿Quién sabe qué diablos le estan haciendo ahora a JiMin?

—P-Por favor YoonGi, no ha de ser tan malo lo que le estan haciendo ahora...—Musitó el pelinegro con la voz temblorosa.

YoonGi, se encontró con la vista de JungKook, fulminandole con la mirada, frunció su ceño y arrugo un poco su nariz—¿Qué no ha de ser tan malo? ¿Estás bromeando JungKook? ¿Tienes idea de a cuántos ha matado Mark junto con el maricón de Jackson?

(....)

Y, efectivamente, YoonGi no tenía nada más ni nada menos que la razón.

JiMin estaba viviendo el mísmisimo infierno, siendo golpeado, sangrando, llorando, teniendo con los ojos hinchados, era simplemente horrible, no se lo desearía ni a su peor enemigo, o, quizás sí.

—¡¿QUÉ MALDITA RELACIÓN TIENES CON ÉL?!—Le gritó sosteniendo sus cabellos con fuerza, al no recibir respuesta alguna golpeo la cabeza de JiMin contra el respaldo de la silla—Me cansé de esto, ¡YoungJae! Encárgate tú.

—¿No puedes con un niño, Jackson?—Dijo burlón YoungJae.

—No habla, lo he golpeado demasiadas veces y ni así responde, encárgate tú, "Experto".

YoungJae negó con la cabeza y se adentro a la habitación, cerrando la puerta detrás de sí, con su derecha arrastró una silla y se sentó en ella—Hola, soy YoungJae, un gusto JiMin.

—H-Hola...—Dijo en un sollozo.

—¿Te gustaría que te desatará?—Preguntó con una sonrisa.

JiMin asintió con la cabeza, rápidamente YoungJae se levanto de su asiento y desato a JiMin, para luego volver a tomar asiento—¿Algo más?

—M-Me quiero ir.

—Oh, lamentablemente no puedo hacer eso, pues, tengo órdenes de que no puedo dejarte ir, pero, no te preocupes..—Se levanto de su asiento y se acercó hasta JiMin, susurrando en su oído lo siguiente;—Ya vienen por tí.

(....)

—YoonGi.. ¿De verdad no quieres que vayamos contigo..? Quiero decir...—NamJoon, no pudo terminar sus palabras, pues, fue interrumpido por YoonGi.

—No NamJoon, JiMin es mí prioridad.

Dicho esto, el pelinegro se retiró de la propiedad, y comenzo a caminar con rumbo al lugar en el que se encontraba ese tal "Mark".

Se maldecía a si mismo por haber dejado que JiMin saliera, sabía que no debía hacerlo, debió haberlo evitado a toda costa, pero, ah, JiMin con sus regordos cachetes, rosados cabellos, almendrados ojos, rechonchitas manos, preciosos gestos, gruesos labios, era simplemente imposible resistirte a uno de sus sobornos, pucheros, berrinches, era simplemente imposible, y, ahora, no podía imaginarselo... Llorando, con sus ojitos hinchados, quién sabe en que condición, posiblemente con su cara totalmente roja, golpeado, si por una u otra razón encontraba a JiMin en esas condiciones, aún que fuera con los ojos cristalinos se haría responsable de dejar inválido a quién se atrevió a hacerlo.

Es decir, lo vieras como lo vieras, JiMin era simplemente adorable, simplemente tierno, apapachable, JiMin era la representación de perfección.

(....)

—¡YoungJae Hyung no me atrapa!—Las risas de JiMin resonaban en la pequeña habitación mientras corría de un lado a otro, tratando de que YoungJae no le atrapará.

—¡Claro que te atraparé!

YoonGi estaba con la boca abierta, no por el hecho de que JiMin estaba riendo y jugando con toda la felicidad que el mundo le pudiera brindar en ese momento.

No por los cádaveres ensangrentados en el suelo.

Si no por la persona que perseguía a JiMin.

—¡Daddy!—JiMin se abalanzo a sus brazos, se apreto contra su pecho lo más que pudo, inhalando ese dulce olor a canela.

—¿YoungJae?—Musitó aún observandole.

—Ha pasado mucho, hermano.—Le dedicó una sonrisa al pelinegro.

—¿Eh? ¿Qué esta pasando Hyung? ¿YoungJae Hyung?—Preguntó JiMin confunso, pues, el pequeño no podía comprender la situación.

—YoungJae.. Yo.. Creí.. Creí que tú.. Estabas.. Ahm... Muerto..—Pronunció haciendo pausas en su oración, de verdad, el aún no creía lo que estaba viendo frente a sus ojos.

—Hay muchas cosas que no sabes sobre mí, YoonGi, y, pensar que eres mí hermano mayor.—Le dió una sonrisa, dejando mostrar sus blancos dientes—Si me disculpan, tengo que irme, JinYoung me espera.—Le dedicó un guiño a YoonGi y a JiMin, para luego pasar al lado de ellos y abandonar el edificio.

—¡E-Espera! ¡¿Cómo podremos volver a comunicarnos?!—Medio grito medio pregunto YoonGi.

—¡JiMin tiene mí número!—Luego de esto, el pelinegro observaba como la silueta de su hermano se iba alejando poco a poco hasta perderlo de vista.

—Te extrañe JiMin..—Lo apego fuertemente contra su pecho, inhalando el dulce aroma de sus rosados cabellos.

—También te extrañe, Daddy.

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¡Holu!

Así es, YoungJae y YoonGi son hermanos, en realidad, iba a hacer el capítulo diferente pero me agrado más esta idea, creó que ya las he hecho sufrir suficiente. (?)

Aún que, no me gusto mucho como quedo el capítulo. :'v

—Kath.