Especial.

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Aclaraciones:
Esto es parte de la historia, pero no es necesario leer si no quieren. Se menciona a Christopher, pero el tema principal es sobre la familia de Joel.

(El momento JoChris está hasta el final)

No quise integrar esto a los capítulos completos, ya que tenía planeado hacer esta parte especial. Quise explicarlo para que se entendiera porqué Joel era un poco cerrado al comienzo de esta historia.

Además de que me sirve de excusa para alargarlo un poco, okkk.

¡Gracias por leer!


Cuando estaba con Christopher, no podía negar que la felicidad me llenaba.

Su sola presencia me hacía sonreír como un idiota, y no era sorpresa, pues siempre fue una persona que brillaba sobre todos los demás. A pesar de que, hasta hace unos meses, no podía decir que éramos muy cercanos, en ese transcurso de tiempo me hizo sentir de una forma distinta que no llegaría a explicar nunca de manera correcta.
Pero había un problema.

Y ese era que, cada vez que él se iba de mi casa a las 20:15 horas para cenar con su familia, esa felicidad parecía salir por la puerta siguiéndole.

Había muchos aspectos en mi vida que no me gustaban, como el no poder hacer amigos correctamente, desconfiar tanto del mundo, no tener las calificaciones que esperaba por más que estudiara, que me vieran raro por comer de vez en cuando helado de uva y otras cosas sin mucho sentido que quise agregar a esa lista.

El que más me desagradaba era mi familia.

No era mi familia en general lo que me desagradaba, era la situación de la misma lo que me daba ganas de desaparecer constantemente.

Nunca pude hablar con alguien abiertamente sobre lo que sucedía cruzando la puerta, pero, afortunadamente, no era nada tan terrible a los ojos de los demás. No había maltratos, tampoco era odio lo que predominaba, y yo no lo llamaría indiferencia, era solo que estábamos en distintas frecuencias. Todos nosotros. Cada uno.

Durante un tiempo, hace tantos años que ya ni siquiera lo recuerdo con claridad, todos vivíamos en una misma casa, comíamos en la misma mesa, incluso dormíamos en la misma habitación así fuéramos seis integrantes, había una manera de estar juntos y disfrutar momento en familia. Eran los pocos momentos que atesoraba como nada en el mundo en mi mente y en mi corazón, porque eso valía más que todo el oro que alguien me pudiera dar a estas alturas de mi vida.

¿Por qué?

Era fácil: porque ese oro no me devolvería los momentos, ni las sonrisas, tampoco las caras bobas y probablemente ni la casa donde todo eso se llevó acabo.

Carry You. [JoChris] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora