II

16.8K 1.7K 797
                                    

—¡Mira, Laney!, Deberías detener tu sangrado menstrual que descubrimos apenas ayer con uno de esos.—Eddie señala el tapón a mi izquierda, yo lo golpeo fuertemente en la cabeza.—No contar la clase de chistes que Richie contaría, apuntado.

Observó a el resto de chicos, ellos han girado sus rostros hacia una dirección. Dudando miro, una chica esta parada a distancia ignorándolos a todos.

Ellos tienen sus bocas abiertas como si la encarnación de alguna diosa estuvieran viendo y sinceramente ni siquiera es tan bonita.

Ella camina hacia nosotros y pregunta qué planeamos hacer con todo lo que está en nuestras manos. Todos dicen que un chico se está desangrando, y no es un chico, su nombre es Ben. El lo dijo varias veces cuando Richie preguntó en el camino.—Tierra llamándolos.—Digo, ellos me ignoran, continuo hablando y aún me ignoran. Incluso han comenzado a seguir a la chica. Con frustración le entregó las cosas fuertemente a Bill y salgo a ayudar a Ben.

Estando frente a él le hablo.—E-ellos están buscando lo necesario, en un momento vendrán.—Le sonrío el asiente.—No te preocupes te ayudaremos.

—¿Que ahora eres una rescatista, Laney?—Richie habla, ruedo los ojos.

—Realmente necesitas aprender a cerrar el pico, Ricardo.—Le respondo.

—Si no lo cierras tú porque lo haría yo, Lindsay.

—Sabes que odio que me digas Lindsay.

—Tu iniciaste con el Ricardo. ¡Y ese ni siquiera es mi nombre!—Responde, yo lo ignoro y me concentro una vez más en Ben, el continua un poco alterado. Y realmente no lo culpo, el año pasado Henry causó una cicatriz en mi pierna cuando su auto se estrelló en mi bicicleta.

—Estarás bien.—Vuelvo a decir, ahora es él quien sonríe.—Lo prometo, y yo jamás rompo una promesa.

—Si lo haces.—Habla sin pensarlo pero luego se contradice.—No mentira, ese es Stanley.

Los chicos aparecen después de unos minutos. Stanley me entrega las cosas yo las quito de mala manera de su mano.—¿Ahora que hice?—Cuestiona, yo lo ignoro mientras con algodón limpio la herida.—¿Tierra llamando a Laney?

—Tu al igual que Eddie y Bill me ignoraron.—Respondo.—Sabes esa chica...—Estoy hablando hasta que me interrumpe.

—Beverly.—Responde, yo lo miro de mala manera.

—Ni siquiera es tan bonita y no entiendo el alboroto.—Hablo, el solo ríe.—No es gracioso.

—Si lo es.

—No lo es.

—Si lo es.

—¿Porque habría de serlo?

—Porque estas celosa.—Responde.

—¿Celosa?—Preguntó.—¿De que habría de estar celosa? ¿De ti y ella? Ni en un millón de años, Uris.

—Yo jamás me mencione.—Responde.

—Pero claro que te referías a ti, te conozco.—Respondo, el asiente.

—Si, tienes razón.—Bromea.—Aunque vamos, Beverly si es linda.

Lo vuelvo a observar de mala manera.—Solo cállate Stan.

—¿Qu-que le pa-pasa ahora a mamá osa?—Bill se acerca. Stanley responde que estoy furiosa, Bill se confunde un poco pero termina entendiendo la situación después de mil años.—Oh va-vamos Laney, no te cambiaríamos p-por Beverly...—Responde mirándola.—Oh bueno, quizás si.—Bromea.

~•~
Para que lo entiendan un poquito más, Stanley y Laney son mejores amigos. Por eso esa relación entre ambos.

girly; itDonde viven las historias. Descúbrelo ahora