Eddie mira una última vez el rostro de Richie y entonces cierra sus ojos...
Eddie camina entre en medio de el bosque, con confusión. Ni siquiera sabe cómo es posible pero lo hace.—¿Eddie?—Una voz familiar le habla constantemente. Él intenta seguirla pero no consigue nada.—¡Eddie!—La voz vuelve a decir.
Gira su rostro buscándola y entonces siente como unos brazos lo rodean.—¡Estas aquí!—Murmura. En sus brazos, puede sentir quien es. Lindsay está allí abrazándolo.
—¡Momento lindo pero debemos irnos!—Murmura hablando. ¿Como es que Lindsay está aquí?—Georgie y Stanley están esperándonos, la última vez me retrase mucho y no quiero volverlo a hacer, solo vamos.
Eddie camina detrás de ella. Lindsay parece feliz, e insistentemente jala su mano para que camine más rápido.—¡Solo un poco más Kaspbrank, vamos recordaba que eras más rápido!—Murmura. El hombre confundido ve a la chica.—Sujeta mi mano.
El la toma apenas la escucha decir eso y la sigue a su paso. Mira las manos de ambos, la suya parece muy grande ante la de la chica.—¡Stanley! ¡Georgie!—Lindsay comienza a gritar.—¡Lo encontré!
El primero en aparecer ante los ojos de Eddie es Georgie, el hermano pequeño de Bill. Parece tímido, porque se esconde detrás de Lindsay.—¿Recuerdas lo que pensabas de Stanley, y en realidad resultó ser?—Pregunta ella. Georgie asiente.—Eddie es igual de asombroso, lo prometo.
Stanley aparece después de un rato.—Georgie me dejo tirado apenas te escucho gritar. ¡Estábamos jugando soldado!—Grita y entonces mira a Eddie.
Una sonrisa se forma en su rostro y rápidamente corre a abrazarlo. Al ver una vez más sus manos Eddie puede verlo, no es más un adulto. Incluso ha vuelto a su baja estatura.—Kaspbrank, pensé que tardaría más tiempo volver a verte.—Murmura.—¿Como está el resto?
—E-ellos, están bien.—Las lágrimas caen de sus ojos. Stan continúa abrazándolo.
—¿Podemos seguir jugando?—Georgie pregunta.—¡Eddie podría ser el sargento!
Lindsay asiente y hace una señal a los chicos para que la sigan. Stanley asiente, al igual que Eddie.—¿Que es esto?—Confundido pregunta.
—¿Esto?—Habla, Eddie asiente.
—Si.
—Esto es nuestro lugar especial.
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