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XII

Entramos a la cochera, Bill ha terminado de pegar el mapa de Derry en la pizarra y nos mira:—Las traje.—Ben habla, Stanley me mira. Sabe que los últimos momentos no me he atrevido a decir nada.

—¿Recuerdas lo que dije?—Pregunta, yo lo observó y asiento, el toma mi mano.—Bien.

Camino hasta mi asiento y observó la pizarra. Por momentos puedo observar de reojo como Stanley sigue mirándome.—¿Todo bien?—Preguntó, el mueve su cabeza un poco para reaccionar y luego habla:

—S-si.—Tartamudea de nuevo.—Solo estoy asegurándome de que, de que estes bien.

Le sonrío.—Lo estoy, ¿tu lo estás?—Cuestiono, el asiente.—¿Seguro? Stan, sé cuanto odias esa pintura. Y escuche lo que dijiste, ¿no me mientes?

El niega, una vez más concentró mi mirada en Bill.—Ahí es donde Ge-georgie de-desapareció.—Bill señala una parte de el mapa, después de esto continúa diciendo todos los lugares importantes en nuestra investigación.—Todo eso está conectado a las alcantarillas y e-eso se vincula con e-el pozo.

La mano de Stanley ha comenzado a temblar.—En la casa de la calle Neibolt.—Su voz suena entre cortada.

—¿Es esa casa donde todos los vagos y drogadictos duermen?—Richie pregunta. Yo observó a Eddie, el sujeta su inhalador y con desesperación lo usa.

—Estas temblando y tú mano suda.—Stanley susurra.—No creo que estés bien Laney.

—Lo estoy.—Le digo, el continúa viéndome por unos segundos antes de volver a poner atención en Bill. Sé que no confía en lo que le estoy diciendo y en realidad yo tampoco lo hago, pero necesito dejar de ser el problema y ayudar a resolver el verdadero.

—Odio ese lugar.—Beverly habla, pongo atención en ella al igual que el resto de los chicos.

Eddie no deja de mover su pierna con nerviosismo e incluso ha comenzado a hablar acerca de él como visualizó a la cosa que nos está asustando en la misma.—E-es donde vive eso.—Bill interrumpe.

—No me imagino algo que quisiera vivir ahí.

Eddie se levanta de su asiento y nos grita:—¡Ya no quiero hablar de eso, a-ah no puedo respirar. Es verano, somos niños. Tengo un ataque de asma y no voy a hacer esto!—Dice antes de despegar fuertemente el mapa.

—¿Que haces?—Bill pregunta. Eddie niega y entonces el proyector comienza actuar por sí mismo. Una imagen tras otra de Bill junto a su familia comienza a ser proyectada.—G-georgie.

Stanley me mira y habla.—¡Bill!—No responde, nadie se atreve a decir una palabra. Las imágenes siguen mostrándose, cada vez más rápido. Una tras otra.

Entonces enfoca en una, con firme pasan los segundos va cambiando. El movimiento constante de esta hace que sienta unas inmensas ganas de llorar y entonces lo veo, frente a todos está allí, viéndonos. Los chicos han comenzando a gritar, y yo simplemente estoy estática, no puedo reaccionar.—Apágalo.—Los chicos siguen diciéndole a Bill, el tampoco parece poder hacer un movimiento.

Alguien tira el proyector accidentalmente, por un segundo todo parece calmarse hasta que una vez más se reproduce. Esa cosa sigue ahí y puedo escuchar la falta de aire de Eddie.

De pronto una vez más se mueve, cl quiero cosa que sea eso no está mas. Suelto un respiro y entonces pasa, el esta frente a nosotros. Rápidamente muevo a Stanley alejándolo, eso se acerca a nosotros aún más, Beverly cae al suelo y comienza a gritar. Los chicos están corriendo por todos lados y yo solo no puedo dejar de mirarlo, tengo ni la mínima idea de que está pasando.—Laney, necesitamos irnos.—Stanley me dice, yo lo escucho pero no puedo reaccionar.

Mis ojos se cierran y cuando los abro los chicos han abierto la cochera. No hay más rastro de Eso, Beverly se levanta del suelo y abraza a Bill. Yo no sé en qué momento tomé la mano de Stanley.—¡Eso nos vio y sabe dónde estamos!—Eddie es el primero en decir algo.

Bill camina.—Siempre lo supo, debemos irnos.—Dice moviéndose de un lado a otro con nerviosismo.

Ben se mueve un poco.—¿Que? ¿A donde?—Pregunta.

—Neibolt, es donde Ge-georgie está.—Tartamudea, el resto lo miramos con confusión. Alguien dice que es verano y que deberíamos estarnos divirtiendo, el solo parece estar furioso por lo que se marcha. Los demás gritamos intentando que regrese pero eso no sucede.

No lo pienso ni un segundo y subo rápidamente a mi bicicleta, Bill es mi amigo, uno de los mejores. Si algo le pasase y no hiciera nada, simplemente no.

~•~
Estaba aburrida y me puse a imaginar realmente a Laney en el  libro/película de It. Y que bonito sería todo.