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Me distraigo en casa, Stanley prometió pasar por mí para ir juntos a la casa de Eddie en 20 minutos.—Bien pequeña Lily, abre tu boca linda.—Sonrío a mi hermana pequeña, ella golpea la cuchara. Esta cae al suelo, mamá me mira molesta.
—¿Que no sabes hacer nada? Te doy todo y tú ni siquiera puedes alimentar a un niño. Eres patética.—Me responde.
—Y-yo l-lo lamento mamá, n-no era m-mi intención.—Le digo, ella suelta una risa que hace eco en todas las paredes.
—Otra vez ese estupido tartamudeo. ¿El idiota de tu amigo Bill acaso te lo está pegando?—Pregunta, yo niego.—Solo lárgate. La observó unos segundos, intentando que me mire y me pida una disculpa.
No lo hace, los dos últimos dos años está ha sido mama tras casarse con Arnold Figins. No culpo a Susan por desaparecer la mayor parte del tiempo, en realidad si Lily no existiera, yo jamás volvería a casa.
Sin pensarlo dos veces salgo rápidamente por la puerta. Me recargo en las gradas de al final de la calle y me obligo a no llorar. De pronto, los frenos de un auto suenan, levantó la vista rápidamente, no necesito toparme con Henry esta tarde, pero no lo observó. Al contrario puedo ver a un carro frente a mi, parado a mitad de la calle.
—¿Hola?—Preguntó, nadie responde pero eso no evita que las ventanas del auto bajen. Levantó un poco mi vista intentando visualizar algo pero solo veo oscuridad. Como si en el auto no hubiese nada.
De pronto, un pequeño globo de color rojo sale flotando del auto. Continuó mirando todo con confusión hasta que una voz me habla.
"¿Laney? ¿Cariño?" Puedo escuchar la voz perfecta de mi padre dentro de este auto."¡Aquí estás! Dylan y yo te buscamos por tanto tiempo y por fin aquí estás."
—¿Papá?—Es lo único que puedo lograr decir. Mi boca y manos han comenzado a temblar. ¿Como podría mi padre estar ante mis ojos?
"Si, Laney. Soy papá." Repite.
"Lan-Lan, te extrañamos tanto." La voz de Dylan se hace presente por primera vez, mi hermano.
Abro mi boca para responder y me acerco al auto, pero entonces sucede. Dentro de este puedo visualizar llamas de fuego que han comenzado a aumentar, los gritos desgarradores de papá y Dylan suenan en mi cabeza sin cesar. Corro rápidamente y intento abrir la puerta, hasta que una mano blanca me toma por la muñeca, grito:—Por favor, papá. ¡Soy Laney!—Continuó repitiendo constantemente
—Papá, Dylan. Y-yo los voy a sacar, lo prometo. Papá por favor.—Las lágrimas han comenzado a caer de mis ojos.
Siento los brazos de alguien rodearme. Las lágrimas no dejan de caer por mis mejillas.—Estoy aquí, todo está bien, estoy aquí.—La voz de Stanley me tranquiliza.—No planeo dejarte.
Yo me aferro a él, y lloro en su hombro.—P-papá, e-era papá, Stanley.—Lo miro.—Y-yo no pude salvarlo.
El recarga mi cabeza en su hombro y habla:—Eso no era real Laney.—Yo lo observó.
—T-tu n-no lo viste Stanley, era real. Totalmente real. Papá, Dylan, ellos volvieron por mi.—Le digo.
El levanta mi cabeza de su hombro, sujeta mis mejillas y me mira:—No era real, Laney.—Vuelve a decir.—Tus amigos son reales, yo soy real.—Yo lo observó detenidamente logro que mi llanto se calme, besa mi frente.
—P-pero...—No puedo dejar de temblar.
—Yo soy real Laney, estoy aquí, contigo. Y jamás voy a dejar de estarlo.—Habla.
Me aferro aún más fuerte a Stanley. Jamás podría soportar perderlo.
~•~ Aloooo. ¡Se ve, se siente, Pennywise esta presente! Y en noticias, es triste pero es real, Laney es la más débil del grupo, por lo cual es a la que más le afectará la situación de Pennywise.
