Ángel-Demonio [KookMin]

Encounter and Betrayal

¡Hola! Espero que les guste este capítulo, gracias por todos sus comentarios y votos. <3

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JiMin abrió los ojos con lentitud y salió de igual manera de su reposo angelical. Se puso en pie y sacudió sus alas a su espalda, una blanca pluma cayó sin que se diera cuenta sobre las sábanas de la cama. Se sentía cansado, aunque eso era imposible en el estado que estaba, pero no eran sus alas las que le pesaban, ni siquiera el cuerpo, era algo por dentro que volvía a oprimirle el pecho y le empujaba los hombros hacia abajo. Eran las mismas sensaciones que tuvo cuando estaba en el reino de los cielos, pero no tenía explicación para ello, no lo entendía, no lo comprendía, porque era algo hermoso, sin embargo, sin sentido para él. Se preguntó si tenía que ver con el hecho de que había estado en una forma terrenal, pero lo habría sentido desde el momento mismo en que volvió a ser un ángel por completo, y aquello, lo que se arrastraba bajo su pecho como una serpiente, era nuevo, algo que lo abordó cuando JungKook le pidió que descansara un rato en su cama, había visto en sus ojos una expresión diferente.

Se estrujo el rostro y decidió buscarlo, JiMin no tenía noción del tiempo, pero intuía que ya había oscurecido, y el ser extraño sin aura dijo que se verían esa noche. Salió de la habitación y avanzó hacia el salón. Vio a JungKook tumbado sobre el sofá, parecía dormir. Se acercó con el fin de despertarlo cuando vio el vaso sobre la mesa delante de él, JiMin lo reconoció: era café. Sintió la necesidad de tomar un poco, pero en su forma angelical sería imposible, se mordió los labios tratando de suprimir el deseo de beber aquel líquido que le había gustado, sin embargo su deseo pudo más que su voluntad. JungKook le había pedido que mantuviera su esencia oculta mientras estuvieran allí, pero estaba seguro de que no se enteraría puesto a que dormía tranquilamente.

El ángel cerró los ojos y consiguió esconder su esencia, eso sí, con un poco de esfuerzo. Miro sus brazos cubiertos por las ropas que había llevado antes y sonrió. Se sentó en el borde de la mesa frente a él y cogió el vaso, JiMin aspiró su aroma con placer y se lo llevó a los labios, el líquido se esparció por su boca y bajó por su garganta con suavidad, pero JiMin lo noto diferente, arrugó el rostro y se quedó mirando el vaso de forma confusa. La primera vez que lo había bebido tenía un mejor sabor y no entendía por qué en ese instante le resultaba diferente.

-Es mejor cuando está recién hecho – JiMin se sobresaltó y dejó caer el vaso, pero JungKook lo cogió al vuelo de forma sorprendente.

El café habría podido manchar su fabulosa alfombra de no haber reaccionado a tiempo. Levantó la vista y miró al ángel que tenía una expresión de sorpresa, Jungkook tenía la réplica en la punta de la lengua, sin embargo JiMin embozo una sonrisa inocente y no pudo más que sonreír también dejándolo pasar.

El ángel se puso en pie y dejó correr su esencia por todo su cuerpo, las ropas desaparecieron y dieron paso a las que había usado como ángel. Sus grandes alas se abrieron a su espalda como un hermoso capullo que se despierta en primavera, mostrando la flor más maravillosa del mundo.

-Lo siento – dijo, pero JungKook no reparó en sus palabras, lo observaba con fascinación.

JiMin miró sus oscuros ojos y advirtió que no se equivocaba, había algo diferente en ellos, de hecho, era hermoso lo que veía. Experimento una sensación extraña, pero agradable, que se le caló profundamente, sin embargo a la vez supo que era algo que no debía sentir. El ángel retrocedió con rostro arrugado y se volteó. JungKook sacudió la cabeza y apretó los ojos con fuerzas ¿Qué diablos fue eso?, se preguntó, sintiendo como el palpitar de su corazón latía de forma alarmante contra su pecho, se tragó una larga bocanada de aire para levantarse.