Believe Me - Camren

Capítulo 9

A/N: Primero que todo, disculpen la demora, sigo sin computadora y escribir en el teléfono es una lata. Por lo tanto voy a seguir tardando en actualizar, lo lamento.

Así como también lamento los errores que pueda haber en este capítulo, es por lo mismo de que escribo desde el celular.

Una vez aclarado esto, disfruten la lectura.

Las llantas de la camioneta rechinaron después de la repentina forma en la que Lauren pisó el freno. ¿De verdad era ella? ¿Sinuhe Estrabao?

La mujer que observaban a través del cristal del parabrisas retiró la mano de su frente, la cual había utilizado para protegerse de la cegadora luz que irradiaban los faros del vehículo, cuya intensidad ya había disminuido considerablemente .

Camila sintió que se le congelaba el alma. Tragó con dificultad y luego de darle un apretón en la mano a su esposa, abrió la puerta de la camioneta y se bajó sin decir nada, aproximándose a la mujer que le dio la vida y de la cual había pasado tantos años sin tener una sola pista de su paradero.

"Mierda." Murmuró Lauren retirándose el cinturón de seguridad. Lawrence alcanzó a escucharla y de inmediato se preocupó, pues no era normal que ninguna de sus madres dijeran palabras malas enfrente de ellos. "Quédense en el auto. ¿Entendido?" Ordenó Lauren con voz autoritaria y descendió del vehículo sin dar la oportunidad de que su hermana o sus hijos preguntaran absolutamente nada.

A pasos rápidos rodeó el cofre de la camioneta hasta alcanzar a Camila, que se había quedado inmóvil frente a Sinuhe. Es que simplemente no podía creérselo, de verdad era ella, se veía tan distinta... Mucho menos altiva.

Su postura era ligeramente encorvada y los años ya le habían pasado factura a su rostro que se veía más arrugado. Su cabello estaba recogido de forma desordenada y sobre el tabique de su nariz reposaban las almohadillas de unos anteojos de armazón plateada.

"¿Camila?" Fue aquella mujer la primera en hablar y la doctora de inmediato comenzó a llorar. No sabía por qué. No sabía lo que estaba sintiendo en ese momento, pero sus manos por instinto fueron a parar a su vientre, rodeando con cuidado el lugar donde su pequeño bebé estaba creciendo. Lauren sin embargo, si sabía perfectamente lo que sentía y esto era una profunda ira. Un resentimiento que jamás podría superar y al ver las temblorosas manos de su esposa cubrir su estómago de forma protectora supo que ella debía involucrarse también. No permitiría que Sinuhe volviera a lastimar a Camila, nunca más.

"¿Qué mierda está haciendo aquí?" Preguntó la morena en un gruñido. Su mandíbula estaba apretada y sus fosas nasales se abrían amenazantes por la dificultad para respirar.

Sinuhe la observó de arriba a abajo. Tenía vagos recuerdos de esa chica, no era de su agrado. ¿Tanto tiempo se había mantenido trabajando para la familia?

"Le hice una pregunta." Volvió a tomar la palabra Lauren, esta vez con más enfado impregnado en la voz. Entonces Camila se abrazó a ella sosteniéndola por el brazo.

"Camila" La ignoró la mujer dejando su mirada fija en la doctora "Hija."

"¡No se atreva a llamarla así!" Espetó la ojiverde totalmente furiosa. ¿Cómo se atrevía a si quiera mirarla a la cara?

"¡Y tú no me levantes la voz!" Devolvió Sinuhe enfrentando a Lauren por primera vez "Estoy aquí para hablar con mi hija. No con una empleada como tú." La ingeniera iba a responder pero antes de que pudiera decir cualquier cosa, la voz de Camila se hizo escuchar.

"Ella no es una empleada." Sentenció con la voz firme pero aún así denotando que seguía impactada por la presencia de su madre. "Es mi esposa." Agregó presionando con afecto su agarre en el brazo de su mujer.