Capítulo 21

183 16 2
                                    

Me alejo de él un poco desconcertada y bajo la mirada.

-Alejandro... eso... -carraspea

-Lo sé, Perdóname. En serio que no pude contenerme...

-Sólo te pido que no vuelva a pasar -abro la puerta y él sólo se da la vuelta sin decir más.

Tal vez fui algo grosera, pero sólo... no sé. Una parte de mí (la que acepta que se enamoró de Raúl) sabe que no está bien. Aunque la otra esté consciente de que esto no es más que un juego donde todos ganan menos nosotros.

Dejó las llaves en la mesita de noche y reviso mi teléfono. Tengo 26 llamas perdidas de Raúl y algunos mensajes preguntando en dónde estoy o si estoy bien; en un par más pide disculpas.

No le respondo y me voy a la cocina a buscar algo para tomar. Estoy en eso cuando alguien llama. Levanto el celular pensando que es él pero contestó rápido al notar que es mi hermano.

-Hola -respondo animada.

-Hola, fea. ¿Cómo estás?

-Bien, ¿Qué tal tú? -Suspira.

-Bien. Feliz. Ya sabes que la constructora está avanzando bien y bueno... mi papá algo decaído. Dice que jamás se perdonará el haber dejado que mi mamá hiciera eso para salvar algo material -suspiro con pesar.

-Dile que esta semana prometo irlo a visitar. A penas empiezo a acomodarme con Raúl y eso pero en cuanto me desocupe, iré.

-Lo sé y él lo entiende. La vida de casado no debe ser fácil -se ríe -Debo dejarte, sólo quería saludar. Te quiero

-Yo también te quiero -Y cuelgo. Debo decir que lo extraño y mucho.

Tomo el teléfono y decido subir a la recámara a inventar algo que hacer.

***

Lamentablemente mi cometido no se llevó a cabo, dado que el sueño me ganó y dormí como oso. Debe ser el cambio de clima. No suelo dormir en la tarde.

Reviso la hora: 9:30 p.m. ¡¡Pero qué mierda...!! ¿Tanto tiempo dormí? Es imposible. Corro al baño a darme una ducha rápida para despejarme un poco y pensar en un lugar donde Raúl pueda estar. Es tardísimo. En la tarde que me gritó así eran como las 3 de la tarde y no he sabido más de él.

No puedo creer que el tiempo se me haya ido tan rápido. No puedo creer que haya dormido tanto. En serio no. Seguramente hoy no duermo.

Me visto lo más rápido que puedo y seco mi cabello con una toalla.

Reviso el teléfono y noto que hay muchos mensajes de él. Le marco de inmediato pero me manda a buzón directamente. Mi corazón empieza a latir fuerte por la preocupación.

Dónde te metiste, Alonso...

Decido preguntarle a Miranda si está con ellos.

-Hola, Irlanda -responde de inmediato.

-Hola, Miri. Oye, de casualidad, ¿Está Raúl con ustedes?

-No, hoy no ha venido. ¿Por qué? ¿Pasó algo? -La preocupación en su voz es palpable. Pienso inventarme algo pero no me sale bien mentir.

-En la tarde tuvimos un... no sé, desacuerdo y entonces me gritó y me enojé y me fui de allí donde estábamos. No lo he visto desde esa hora -mi corazón se acelera al pensar que exageré y por mi culpa pudo pasarle algo.

A penas va a responder cuando el timbre suena.

-Espera un momento.

-Dime si es él, por favor -no respondo y abro rápidamente.

Mi boca se abre al ver al chico parado frente a mí y borracho hasta más no poder.

Diego sonríe como si acabaran de hacer la peor travesura de sus vida y Miranda no deja de preguntar si es él.

-No te preocupes. Va llegando. ¿Mañana te marco?

-Sí, y por favor avísame cualquier cosa.

-Lo prometo -y cuelgo.

-Hola -dice mientras sostiene a su amigo por la espalda baja y el otro recuesta su cabeza en el hombro de Diego.

-¿Tomaron juntos?

-No, no. Yo no tenía idea. Él me marcó diciendo que necesitaba regresar a su casa pero no estaba en condiciones de manejar. A penas y le entendí -niego con la cabeza y me hago a un lado para que lo deje en el sofá.

Él avanza lentamente hasta llegar al mueble. Raúl cae como costal de papas y se ríe como idiota.

-Qué voy a hacer con este hombre... -suelto mientras lo observo.

-¿Estuvo Alejandro aquí? -Lo miro asustada.

-Sí, ¿Por qué? -respondo tratando de imaginar el por qué de su pregunta.

-No paró de decir que te besó y que se sintió muy celoso por ello -no puede ser. Él nos vio.

Seguramente prefirió regresar aquí a esperar que yo apareciera y entró justo cuando Alejandro me besó.

¡Mierda!

Mi cara arde de la vergüenza.

-No, tranquila. Sé que esta situación es complicada -aprieta mi hombro derecho consiliadoramente -¿Quieres que te ayude a subirlo a la recámara? Tengo un compromiso pero no pasa nada si llego un poco tarde

-No, no te preocupes. Ahorita lo subo yo. Ve a tu compromiso y, Diego... gracias por traerlo -le sonrío.

-Todo por él. Es mi hermano, recuerda -me guiña un ojo y sale del departamento.

Raúl no para de hablar cosas sin sentido y de la nada se sienta.

-¿Irli'? ¿Dónde estás? Perdóname... no quise ser grosero, mi amor -en cuanto me localiza busca mis manos y besa cada una. Mis ojos se llenan de lágrimas. Él está así porque me vio con Alejandro.

-Tranquilo, vamos a la recámara... -me levanto y de manera muy lenta, él lo hace detrás de mí. Pasa su brazo izquierdo por mi hombro y yo lo tomo por el abdomen. Espero que no nos caigamos por las escaleras.

De manera lenta subimos hasta llegar a la cama. Ahí lo dejo caer pero como no me suelta, caigo sobre él

-Tú lo besaste, mi amor. ¿Por qué?

-Perdón -es la única estupidez que se me ocurre.

-Ese imbécil besó algo que me pertenece -dice tocando mis labios. Está borracho pero se sostiene un poco al menos.

Yo no respondo. Él tararea una canción y de la nada atrapa mis labios en un beso profundo que hace que cada parte de mi cuerpo reaccione. Me separo tratando de respirar un poco y él se ríe.

-Soy un imbécil -me dice entre risas. Me levanto y le quito los tenis.

-¿Por qué lo dices? -Sólo quiero que se canse y se duerma.

-Porque lo soy -responde aún riéndo.

-No lo eres.

-¡Lo soy! Lo soy porque... porque yo... yo... -se ríe -Lo soy porque me enamoré de ti -me quedo completamente quieta.

¿Qué?

Debe ser el alcohol que lo hace decir esas tonterías.

-Estás delirando, ahorita te vas a dormir y...

-No, no. No estoy delirando. Estoy borracho pero no tonto. Te amo, Irlaanda. Te amo y ya no quiero seguirme guardando esto -me jala hacia él y me besa mientras yo proceso la información.

Esto debe ser una broma...

Perdón, perdón, perdón a las personitas que están leyendo. No noté que subí el Cap 22 sin haber subido esto. A veces puedo ser demasiado distraída... ^-^

"Soy de ti"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora