Capítulo 8

254 18 0
                                    

Aferro mi brazo al de Raúl y ambos aparecemos en las escaleras.

Mi quijada se abre al ver todo lo que esas dos hicieron: la sala de mi casa está perfectamente arreglada y hay muchas personas ahí. Conocidos de mis padres y de los padres de Raúl.

Raúl besa mi mejilla y ambos bajamos poco a poco las escaleras.

Todas las personas dirigen su mirada hacia nosotros; algunos sonríen y otros se murmuran cosas.

Puedo ver la sonrisa perfecta de mi mamá y la cara de Karla a lo lejos. Están muy elegantes.

Camila me mira con ganas de matarme.

Cuando llegamos al otro extremo de la escalera varias personas se acercan hacia nosotros y nos felicitan por lo bajo.

Alguna que otra persona me besa la mejilla y saluda a Raúl. Cuando al fin logramos estar solos, sorpresivamente pone ambas manos en mi cintura y me acerca a él.

-Estás preciosa -me sonrojo ante su comentario y sonrío.

-Y tú guapísimo -Sonríe y pega su nariz con la mía -¿Estás consciente de que todos nos están viendo?

-Sí y no me importa. No lo hago para darles show -vuelve a sonreír y acepto que lo que siento por él jamás murió. Jamás acabó. Incluso si me lo propusiera... podría terminar enamorada de él. Me propuse no confiar en él pero es imposible.

Unos minutos más tardes mi mamá y la suya nos miran haciendo ademán de que es hora.

Raúl toma mi mano y me conduce al centro de la sala donde todos empiezan a reunirse. Toma una copa larga de Champán y me mira. Sé que esto es difícil. Una cosa es que me tenga cariño y otra que quiera pedirme matrimonio frente a tanta gente.

Mi papá y mi hermano observan desde lejos. Su papá asiente hacia él y entonces Raúl toma mi mano. Carraspea fuerte y llama la atención dé todos.

-Buenas noches... yo... -Me mira -Creo que todos sabemos por qué estamos aquí así que iré al grano -Se pone completamente frente a mí y toma mis dos manos -Eres una chica increíble. Alguien que llena mi mundo de muchas cosas... haces que cada día que pasa sea distinto. Xi... -reacciona y mis ojos se llenan de lágrimas. Iba a decirme "Ximena". Se está imaginando que soy ella. Una punzada me llega al corazón y mis ojos se llenan de lágrimas. ¿Qué me pasa? Esto no es más que una obra para una buena causa. Él ama a esa chica. Debo meterme bien en la cabeza que no debe pasar nada más -Te amo... y... nada me haría más feliz que... que aceptaras ser mi esposa... -Esas son las palabras más vacías que he oído en mi vida. Quiero ignorar el dolor agudo que está apareciendo en mi pecho pero no puedo. Raúl saca una cajita de la bolsa de su pantalón y se hinca. Ni siquiera estoy prestandole atención. Quiero que este momento de mierda termine. Bajé decidida a reírme en la cara de ellas pero no puedo.

Quiero quitarme este maldito vestido y desaparecer.

Raúl carraspea y noto que está esperando mi respuesta. Obligo a mi rostro a sonreír y asiento llorando, todos aplauden pensando que es de la emoción y yo sólo dejó que Raúl coloque el anillo en mi dedo.

Jamás me había sentido tan humillada.

Él me mira pidiendo autorización para besarme y yo sólo pego su boca a la mía sin hacer otro tipo de gesto.

***

Mi cabeza da demasiadas vueltas. Esto no es para nada lo que yo creía.

Bajé haciéndome la valiente y terminé echa un asco.

De la nada me empiezo a reír sabrá Dios de qué y siento los brazos de alguien en mi cintura.

-Deja ya de tomar, por favor. Ya estás borracha... -Me giro buscando esa hermosa voz

-Tú... quién eres... -Me carcajeo como buena idiota. Pero es que no puedo controlarme.

-Soy Raúl. Ya deja de tomar -me quita una copa de la mano y la pone en la barra.

-Aaahhh... tú... ¿Me acabas de dar esto? -Levantó mi mano y le muestro el anillo.

-Sí, fui yo.

-Me gusta tu camisa desabrochada... -estoy borracha tal vez pero veo lo bueno que está. Ya no tiene el saco y las mangas de su camisa están en sus codos. La corbata ya no está y los botones superiores están desabrochados.

Me bajo de esos infernales tacones y busco a mi mamá. Quiero decirle sus verdades.

-¡Ériiikaaaa! -Raúl me tapa la boca y me jala por las caderas -Deeeejaaaaameeeeee...

-¿Para qué quieres a tu mamá?

-Para insultarla...

-No, estás loca. Las personas que vinieron siguen ahí...

-Será con amor... -Me río. De la nada me recuesto en su hombro y le rodeó el cuello con mis brazos.

-Vamos a que te recuestes, ¿sí? -Asiento y él me toma en sus brazos. Empiezo a reírme por lo bajo mientras él sube escaleras conmigo arriba.

Como puede abre la puerta de la habitación y me acuesta en la cama.

No sé en qué momento me puse así pero no hay vuelta atrás.

-¿Vas a dormir?

-Noooo... ven... acércate... -lo hace y me mira a los ojos -Te vez guapísimo... -se ríe -Te quiero... pero... amo a Alejandro -lo empujó. Luego lo vuelvo a acercar a mí y acaricio sus mejillas con ambas manos -No la ames a ella... -mis ojos se llenan de lágrimas y sin pensarlo lo beso. Sus labios se quedan rígidos por un momento hasta que siento que empieza a responder mi beso.

Me hinco frente a él en la cama y entonces su lengua invade mi boca. El beso se hace cada vez más intenso hasta que levanta mi vestido y me sienta en sus piernas.

Enredo mis dedos en su cabello y siento que empieza a bajar el cierre de mi vestido. Deja mi espalda desnuda y sus enormes manos la recorren de arriba abajo sin dejar de besarme. Quito su camisa con manos temblorosas y él empieza a besar mi cuello.

Cielos. Estoy borracha no tonta. Quiero hacerlo con él.

Su respiración se hace pesada al igual que la mía.

Se coloca sobre mí en la cama y recorre el borde de mi corsé. Pasa su lengua por él y yo siento que explotaré en cualquier momento.

Se deshace de mi vestido y acaricia mi cuerpo de una manera delicada. Como si pudiera romperme en cualquier rato.

De repente se detiene y me mira a los ojos. Trago saliva y de la nada me siento tímida.

-No, mi niña. Estás borracha y no quiero que te dejes llevar por la calentura del momento y el efecto del alcohol... -Me sienta en la cama y se pone frente a mí. Tapo mi rostro con mis manos y él las quita de inmediato -Me vuelves loco pero no quiero que sea así -Besa mi frente y me abraza. Me quedo completamente desarmada. ¿Qué diablos me pasa? -¿Te quieres dar un baño?

"Soy de ti"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora