Capítulo 28

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Abro los ojos sintiendo los párpados pesados. Raúl no está en la cama y eso hace que me siente de inmediato. Escucho el agua caer de la regadera y su canto nada afinado. Me río y decido tomar el baño con él.

Son las 8 de la mañana y aunque me siento cansada no quiero estar en la cama.

Justo cuando voy a levantarme de la cama el celular de Raúl empieza a sonar. Me acerco a él y con un poco de indecisión respondo.

-¿Sí?

-¿Raúl? -la voz desconcertada de Diego me saca la risa.

-Oh, no. Soy Irlanda. Él está bañándose -en ese momento aparece con una toalla en la cintura y se acerca a mí mientras me abraza por la espalda y le doy el celular.

-¿Quién es? -pregunta con el ceño fruncido.

-Diego -susurro.

-¿Qué pasó, Bro? -quiero soltarme de su agarre pero más me aprieta a su cuerpo.

-No olvides la práctica de hoy.

-Claro que no. Sólo desayuno y me voy -logro que me suelte y voy directo al baño.

Siento que han pasado años de mi boda con Raúl cuando hace a penas un par de semanas de eso. Las cosas han cambiado tanto... Abro el grifo de la regadera y me quedo ahí pensando mientras el agua caliente sale.

Las manos de Raúl rodean mi cintura haciendo que me sobre salte.

-¿Bajaste de peso? -frunzo el ceño y niego -Tu cintura es mucho más pequeña

-Pues no ha sido a propósito, créeme -se ríe y busca mis labios. Le facilito el trabajo y rodeo su cuello con mis brazos. El beso empieza a subir de tono pero ninguno de los dos se detiene. Sus manos bajan hasta mi trasero y suben nuevamente hasta mi cintura. Sube mi blusa poco a poco y de un tirón la quita de mi cuerpo.

-Creo que te verías mejor sin eso -señala mi pants y yo no puedo evitar reírme.

-Tienes que irte a entrenar -murmuro mordiendo mi labio inferior sólo para provocarle.

-Tenemos tiempo -responde acercándose y tomando mis labios con los suyos nuevamente.

***

Después de hacer el amor en el baño y no querer salirse de ahí por más de media hora, ahora el señor Jiménez corre como loco porque se le hizo tarde. Me río de él mientras como mi desayuno feliz de la vida.

-Conste que yo te dije que tenías entrenamiento -me mira riéndo picaronamente.

-La satisfacción que tengo es que ya te hice el amor en el baño... la primera de muchas -me guiña un ojo y mi cara arde de la vergüenza. Le lanzo un pedazo de pan y él lo esquiva fácilmente.

Se acerca y me da un beso rápido.

-Te veo al rato -toma sus llaves y desaparece.

***

Papá duerme tranquilamente mientras mi mamá vela su sueño a un lado de la cama.

Estará esta noche en observación y luego le darán de alta. Salgo tratando de no hacer ruido para no despertarlo y decido ir a ver a Alejandro. Desde ayer que lo internaron no supe más.

Abro la puerta y lo hallo mirando el televisor muy concentrado.

-Hola -le sonrío y me acerco a besar su mejilla. Su boca forma una enorme sonrisa.

-Hola. Luces bien -me sonrojo.

-Gracias.

-No es a lo que me refería... tus ojos brillan -lo miro y no puedo evitar sonreír ampliamente -Me alegro que ese idiota te haga feliz

"Soy de ti"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora