Siempre estaré aquí para ti

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En las salas del castillo, Korrina, Clemont y Shauna se encontraban limpiando la sala de estar. De pronto, el rubio le guiñó el ojo a la morena y esta le indicó al músico que tocara algo romántico.

Korrina: ¿Que demonios?

Clemont: ¿Me permite esta pieza, bella mujer? (dijo extendiendole la mano a la futura madres de sus hijos)

Korrina: Estamos trabajando, Clemont. Mas tarde, ¿ok?

Clemont: Pero mi amor, los reyes no están. Vamos, solo será una canción.

Korrina: Mmmm. Ay, esta bien, solo una.

La rubia tomó la mano de su prometido y este posó su mano en su cintura. Después de un romántico baile, se besaron tiernamente hasta que escucharon una voz que los hizo separarse.

Serena: Clemont, ayuda!!! Ash está herido!!!

Clemont: ¿Que?¿Que pasó? (dijo acercándose pero se detuvo al ver a Greninja cargando a Ash) ¡Un pokemon!

Korrina: ¡¿Por que trajiste un pokemon, Serena, más bien varios?

Serena: Eso no importa ahora, Clemont por favor cura a Ash.

Clemont: ¿Que le pasó?

Serena: Estabamos jugando con los pokemon del bosque hasta que un Charizard apareció y nos atacó. Ash me protegió y lo dañaron en la espalda. No sé que paso después porque tenía los ojos cerrados.

Clemont: Korrina, Shauna traigan la caja de medicamentos, rapido!

Korrina: Claro, cariño.

Clemont: Llevelo a su cuarto, princesa. Iré a lavarme las manos para atender sus heridas.

Serena: Claro. Grenija, por aquí. (dijo guiando al pokemon a su cuarto)

La pelimiel se dirigió con apuro a su habitación acompañada de Fennekin, Pikachu y Greninja. Al llegar, Greninja soltó al inconsciente Ash en la cama y se fue por la ventana después de que Serena le agradeciera. Al instante llegaron Clemont, Shauna y Korrina.

Clemont: Bien. Shauna, quitale la camisa.

Shauna: (sonrojada) ¿Que?

Clemont: No hay tiempo para tonterías, hazlo.

La morena con timidez pero rápidamente, despojó al azabache de su camisa. El marcado cuerpo de Ash hizo sonrojarse aún más a la morena. Si no estuvieran en esta situación, la pelimiel estaría igual pero no había tiempo para eso. En su espalda notaron varias cicatrices rodeando la herida sufrida contra Charizard.

Clemont: Uff, que bueno. No es tan grave, solo hay que desinfectarla y ponerle una venda

Serena: ¿En serio? Creí que lo perdíamos.

Korrina: Si, pero miren todas esas cicatrices. ¿Como se las habrá hecho?

Shauna: Que importa. Mira ese cuerpo, sin esas cicatrices sería más perfecto aún. Pero me encantan. Ya estoy considerando ser la madre de los hijos de Ash.

Pensamiento de Serena: ¿Ash como el marido de Shauna? No soy de desearle el fracaso a alguien, pero por alguna razón, espero que Ash la rechace si pasa eso. ¿En que pienso? Yo no soy así. ¿Por que me molesta la idea de que Ash tenga una mujer? 

Korrina: Oye, Serena.

Serena: Ah si. Dime.

Korrina: ¿Tú sabes como se hizo esas cicatrices?

Shauna: ¿Acaso importa? Lo que importa es que maneras sensuales encontrare para lamerlas cuando me lleve a este grandote a la cama.

Serena: ¡Deja de decir tonterías!

Moriría por ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora