Capítulo 19

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Golpe. Esquivo. Abajo. Pateo. Me caigo
...espera, ¿qué?

Aaron me tendió la mano. La tomé.

   -Esto se te da bien, pero cuando pateas pones todo tu peso en tu parte posterior y no debe ser así.

   - Esto es más complicado de lo que parece. - Admití.

   -Si quieres tomamos un descanso. - Asentí. Y me fui a tomar un poco de agua. A lo lejos vi a Jason y Percy entrenando, ambos estaban compitiendo.

Decidida me dirigí hasta su zona y me senté en una sombra para verlos entrenar. Se les da bastante bien, pensé. Jason golpeaba, Percy esquivaba y viceversa. Ellos ya peleaban con las espadas, Aaron dice que es mejor que primero sepa pelea cuerpo a cuerpo.

   - ¿No deberías estar entrenando? - Preguntó una voz ronca proveniente de mi derecha. Sin pensarlo, una sonrisa se asomó por mi rostro y volteé la cabeza. Nico.

   -Podría decir lo mismo. - Comenté.

   -¿Cuánto ha pasado ya desde que estás aquí? ¿Una semana? ¿Dos? - Preguntó fijando la vista en los demás campistas. Pero yo no podía dejar de mirarlo.

   -En realidad ha pasado un mes. - Contesté.

   - No veo que hayas aprendido mucho. Durarás poco en el campo de batalla.

Gruñí.

   -Prefiero ir poco a poco antes de lanzarme.

   -Debo decirte que lo sabes es demasiado escaso. Y lo sabes. - Le divierte molestarme.

Me acerqué más a él, nos encontrábamos a pocos centímetros de distancia.

   -Si tan mal se me da, ¿Por qué no me enseñas? -Le susurré.

Lentamente me tomó de la muñeca. Y su boca se acercó a mi oreja.

  - Tu pulso está acelerado y tus pupilas dilatadas. -Susurró.

Está jugando conmigo.

Desvié la mirada y rápidamente me levanté intentando resguardar el poco orgullo que me quedaba.

   -Idiota. - Dije, lo suficientemente alto para que solo él pudiera escucharme.

Me dedicó una sonrisa burlona y se levantó.

   -Aún puedo enseñarte si así lo deseas. - Me tendió la mano.

Di que no, di que no, di que no. Está jugando contigo. Protege el poco orgullo que tienes. No tomes esa oferta. Esa...hermosa oferta de ayudarte a mejorar.

   - Sorpréndeme. - Dije poco después de ofrecerle mi mano.

Sorprendido por mi decisión me llevó a un campo vacío. Se quitó la sudadera y estiró.

   -¿Qué es lo que Aaron te ha enseñado?

   - Lo suficiente para vencerte. - Respondí.

   - Ya veremos.

La pelea comenzó.

Por favor que el entrenamiento haya servido de algo.

Esquivo. Pateo. Esquivo. Golpe. Golpe. Golpe. Pateo. Esquivo. Esquivo. Esquivo. Golpe.

De repente todo el campamento nos estaba rodeando. Unos alentaban a Nico y otros a mí. De todos los golpes solo un par le habían alcanzado, pero pude notar que en realidad no estaba intentando darme.

   - Oye, se supone que tú también debes golpear, no solo esquivar.

   -Te dolerá mucho si te doy.

   -¿Sabes qué? - Me detuve. -Hagamos esto más interesante. Lo haremos con armas.

   - Aún no sabes usarlas. - Comentó.

   -¿Acaso eso no es un punto a tu favor? Deja de quejarte y hazlo. Ah, y no te preocupes en golpearme.

Las personas nos pasaron armas y yo me puse en posición. Puede que no me hayan enseñado, pero he observado los movimientos de otros. Sé qué es lo que debo hacer, o eso creo.

El primer golpe fue de parte de Nico, logré pararlo y devolverlo de una forma que él no logró esquivar. Necesito una estrategia. Debo observar sus movimientos. En los pocos segundos que estuve analizandole logré darme cuenta de cuál eran sus ataques recurrentes, los potentes y la zona que normalmente deja desprotegida. No será muy difícil.

Esquivo. Golpe. Golpe. Esquivo. Pateo...

Poco a poco Nico va dándose cuenta de que no debe subestimarme. Y decide atacar en serio, porque yo - La nueva - le estaba superando. Él logró dejarme desarmada. Con un brazo rodeó mi cintura y con el otro empuñó la espada en mi contra.

   -Creo que te he derrotado.

Sin pensarlo dos veces decidí utilizar una pequeña parte de mis recursos. Miré fijamente su empuñadura y con solo pensarlo salió disparada hacia la otra punta del campo. Aproveché aquel momento y le hice caer. Estando él aturdido tomé la espada y se la coloqué en la frente.

   -Crees mal. - Respondí.

   - Hiciste trampa. - Se quejó - Nunca dijimos que se podían usar nuestros poderes.

   - Nunca dijimos que no se podían usar.

   -Tienes razón, nunca lo dijimos.

No tardó mucho en aparecer un agujero en la tierra, justo en el lugar en el cual yo me encontraba parada. Maldito.

¡Sacame de aquí!

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Ya se, ya se. Llevo años sin subir capítulo. Sorry.

Miren, voy a intentar subir más seguido (eso digo siempre :v)

Bueno...

¿Cuánto faltará para que Nico se enamore de Alex?

¿En algún momento Alex podrá ganar a Nico en las peleas?

¿Aprenderá algún día A-Music18 a narrar bien las peleas? No creo.

Bye chicas, quizás también chicos.

   -PinkyPie









  

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