La Protegida

Capitulo 28

   - Él es mi hermano, Tyson - Dijo Percy alegremente. - Es un cíclope. - Eso obviamente explicaba su único ojo.

    - Encantada Tyson, soy Alex. - Le estreché la mano.

   - Y él es Groover, mi mejor amigo - A él también le estreche la mano. - Es un...

   - Sí tío creo que ella es capaz de darse cuenta de lo que soy. - Rió mientras señalaba sus piernas. Yo reí con el y chocamos palmas.

   - Bueno Alex, ¿Qué tal va tu estadía en el campamento? ¿Ya sabes quien es tu madre o padre divino?

   - Pues tengo una marca aquí. - Le mostré el brazo y él se puso pálido. - ¿Sabes qué es?

   -Es...

   - Bueno Tyson tu novia te busca, quiere darte la bienvenida. - Le interrumpió Percy. Tyson estaba a punto de irse cuando yo tome su brazo.

   - Tyson,¿Sabes qué es?

   -Yo...

   - Alex, él realmente debe irse. - Volvió a interrumpir Percy.

   - ¿Cual es tu puto problema? Él sabe algo y yo merezco saber. - Me enoje, y note la sangre hervir. Tyson parece que se asustó y sacó su espada. Yo lo miré, decidida a obligarle a contármelo.

   - Alexandra, relájate. - Escuche una voz conocida detrás mío. Aaron. - Tus ojos, están amarillos. - Agarró mi brazo. -Vamos preciosa, está bien. - Intentó calmarme.

   - Él sabe. - Señalé a Tyson. Intentaba entrar en su cabeza pero algo me lo impedía. Tendría que sacarlo a la fuerzan. Me zafé del agarre y me dirigí hacia él. De alguna manera, con solo pensarlo, lancé la espada al otro lado del campo sin tocarla y Tyson seguía firme.

   - Alex, tranquila. No tiene que ser de esta manera. - Dijo Percy poniéndose en medio de los dos. Groover a su costado se encontraba sorprendido.

   - Sal de mi camino Percy. - Susurré lista para atacar.

   - Lo lamento, Alex. - Sacó su espada.

   - No, yo lo lamento. - Sonreí.

Pov Nico
    - Nico, tienes que controlar a Alex o va a matar a alguien. - Gritó Leo muy nervioso entrando repentinamente en mi cabaña. - ¡Ven, rápido!

No lo dude. Yo salí corriendo detrás de Leo. Al llegar vi a Alex encima de Percy, con una mano en su cuello intentando ahogarlo. En cuestión de segundos, comenzaron a salir plantas del suelo, como si ella las controlara y les ordenara que siguieran la labor que ella había empezado.

   - Alex - Dije mientras la tumbaba en dirección contraria de Percy. Ella pareció perder la concentración y las plantas dejaron de brotar. - Para. - Continué diciendo mientras me colocaba encima de ella inmovilizándola.

   - Suéltame. - Sentí una fuerza empujándome. Salí disparado y termine a un par de metros de ella. Se encontraba furiosa.

Aaron se aproximó a ella y la tomó de la mano intentando tranquilizarla. Se acercó a su oreja y susurró algo inaudible para mi, ella pareció calmarse, se le quedó mirando perpleja y sonrojada.

¿Que le habrá dicho para ponerla así? ¿Como es que el logro tranquilizarla cuando antes solo lo hacía yo?

Ella poco a poco calmaba su furia y sus ojos comenzaban a tornarse de su color natural. Yo seguía observando todo desde el suelo. Molesto con Aaron y conmigo, porque había perdido a mi entretenimiento. Ella ya no sería mi propiedad, está cambiando de dueño. Su corazón se está escapando.